¹⁷|kol mikaelson, tvd.

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Advertencia: contenido +18 pero no tan específico y detallista como los otros, gore, celos.

Estaba cenando con mí mejor amigo Kol, hoy íbamos a ver un partido de soccer pero se terminó cancelando debido a que los jugadores no pudieron llegar.

Los dos éramos muy fanáticos de los deportes, todos los domingos nos juntábamos a ver partidos de tenis.

Así que acá estábamos, comiendo unas hamburguesas con papas fritas.
Había un grupo de chicos que no conocía pero estaban riéndose a carcajadas.
—Se rien una vez más y les reviento la cabeza contra la pared.—dijo Kol enojado.

Sonreí divertida por su comentario.

Entonces un chico rubio, de unos 18 años aproximadamente se nos acercó, bueno, a mí específicamente.
—Hola, ¿Me das... tu número?—dijo sudando, podía sentir los latidos de su corazón yendo cada vez más fuertes.

Abrí la boca con intenciones de responderle pero Kol me interrumpió.

—Lo siento campeón, pero soy su novio, prohibida para ti y todos los críos de tus amigos.—sonrió sarcástico.

Soltó un "oh" de decepción y volvió a su lugar.

—¿Novio?—reí.

—Te salvé.

—No del todo—respondí mostrándole el papel que tenía en mí mano, que el muchacho me dió.

“escríbeme tú

-el número-”

Lo leyó y su ceño se frunció.
Miró al chico y se levantó haciendo que la mesa retumbe y todos nos miraran.

Roja de la vergüenza agarré mí bolso, disimulando.

Me levanté y su mirada seguía en el rubio.

Agarré su mano y le susurré.
—Vámonos.

Le pagué al mozo sin despegar mí mano de la suya.

Lo arrastré a la puerta y entrelazó sus dedos con los míos. Cuando llegamos al auto, decidí manejar yo, ya que no había tomado mucho vino.

El camino fue puro silencio incómodo.

Él se iba a quedar a dormir a mi casa, porque los sábados en los partidos de soccer, nos quedábamos a dormir en la casa del otro así el domingo a la mañana veíamos el juego de tenis.

Y esta vez tocaba mí casa.

Estacioné el auto y nos bajamos en silencio.
Cuando entramos a casa, cerré con llave la puerta y me di la vuelta encontrándome con Kol.
—¿Que pasó?—pregunté desentendida.

Bufó.

—Esto.—se acercó a mi y rápidamente colocó sus manos en mí rostro.

Ahí fue cuando acercó su cara a la mía y simplemente me besó, haciendo que me pegara a la puerta por la presión vampírica.

Respondí a su beso, nuestros labios se movían desesperadamente. Pidió permiso para entrar en mí cavidad bucal, entrelazando nuestras lenguas, haciendo que pareciera una guerra.

Nunca había dado un beso así en mis 375 años de vida. Bajó sus manos de mí rostro a mí cuello, sin despegarse de mí.

Cuando nos íbamos a separar a causa del oxígeno, mordió mí labio inferior.
Pasó de darme besos en la boca, a besarme la mandíbula mientras salían jadeos de mí boca.

Yo no podía creer esto, hasta ahora, no sabía que sentía algo por mí mejor amigo o solo era la emoción del momento. Pero me agradaba esta sensación de probar cosas nuevas.

Enredé mis dedos en su cabello, jugando con éste. A rapidez vampírica lo lleve a las escaleras, y el me dió la vuelta empujándome hacia la pared enfrente a la escalera.

Bajó sus besos a mi cuello.
Sacó sus colmillos y me mordió, sacándome sangre de la vena. Un gemido salió de mí boca e intensifiqué mi agarre en su pelo, apretándolo más causando que él jadee.

Salió de mi cuello, guardando sus dientes de vampiro, con algo de sangre saliendo de su boca. Lo acercé a mis labios y limpié los suyos con mí lengua, tragando mi propia sangre.

Sentí su erección en mí abdomen, al parecer eso lo calentó. Nos separamos, aproveché y agarré el dobladillo de su remera y la levanté dejando ver su abdomen y músculos trabajados.

Él hizo lo mismo con mí camiseta, mostrando mí ropa interior de encaje rojo.

Devolvió sus besos a mi clavícula, mientras bajaba más y más hasta llegar a mis pechos.
Con sus manos desabrochó mí brasier de forma tan rápida y estratégica que me sorprendió.

Sacó mí prenda interior, mostrando mis pechos que debido al aire frío se erizaron. Comenzó a lamerlos, succionarlos y masajearlos, mientras yo gemía.

De un momento a otro quedarnos desnudos, tal cual como venimos al mundo. Esa noche nos unimos en cuerpo y alma, amándonos como siempre lo hicimos pero demostrándolo como nunca antes.

Ƹ̵̡Ӝ̵̨̄ƷƸ̵̡Ӝ̵̨̄Ʒ

Los primeros rayos del sol impactaron en mi rostro, despertándome.
Abro mis ojos y pestañeo repetidas veces para acostumbrarme a la luz, viendo a la ventana.

Noto una presión en mí cintura, y un flashback se me vino a la cabeza de todo lo que ocurrió anoche.

Estaba desnuda.

Busco la mano de Kol en mí abdomen y la aparto, dándome vuelta para verlo a la cara.
Me acerqué a él y le di pequeños besos en todo su rostro.

Abrió los ojos lentamente, perdiéndose en mí mirada.
—Buenos días, Koliflor—tenía la voz ronca debido a que me despertaba.—o Kolibrí.—reí mientras jugaba con su nombre y el sonreía.

—Buenos días, linda— Acercó su rostro al mío, juntando nuestros labios, fundiéndonos en un beso amoroso y tierno.

╰┈➤beyond the soul―multifandom one shots.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora