╰┈➤beyond the soul―multifandom one shots.

¹⁸|chat noir, miraculous.

Acababa de ver en el Ladyblog que había un ataque, al parecer Kim fue akumatizado luego de ser rechazado y humillado por Chloé.

Recibí la foto de su parte.

Salí por el ventanal de mi casa, corriendo y saltando por los tejados encontrándome a Chat Noir, al parecer tenía como once de sus llamadas perdidas.

—Hola, bogaboo, no me contestaste las llamadas. —hablaba él.

—Que te conteste Marinette. —hablo yo con sarcasmo para ser detenida por él.

—Espera un momento. ¿Estás celosa de Marinette? —se rió él, no le dije nada y simplemente levanté una ceja.— Pues no tienes nada que envidiarle, Milady. De hecho, quería decirte algo.

—Soy toda orejas, gato, habla ya. —dije con los brazos cruzados, se acercó a mí para posar sus manos en mi cintura.

—La verdad es que yo... Te... —entonces miró detrás mío con terror.— ¡Cuidado! —nos dio vuelta, me di cuenta que Cupido Negro nos había tirado una flecha y la recibió Chat.

—¡Gatito! —habló preocupada, sus labios se volvieron negros y solo había vacío en sus ojos.

—¡Yo te odio! —dijo el para correr hacia mi, ¿Qué estaba pasando?

Habíamos corrido por todo París y terminamos en un tejado en específico, el tejado del hotel del alcalde.

Me estaba por acorralar.

—¿No lo entiendes? ¡No hay nada más poderoso que el odio! —me gritó, acortando su distancia.

Entonces recordé la clase de hoy, un beso de amor era lo que necesitaba.

—Te equivocas, gato tonto. —lo miro, y él se asustó.— No hay nada más poderoso que un verdadero beso de amor.

Entonces fui yo la que comenzó a corretearlo, persiguiéndolo por todo París.

—¡Ven, gatito gatito! —bromeaba.

Hasta que pude alcanzar el cinturón que simulaba si cola, entonces fue cuando me tropecé y caí encima suyo. A sus horcajadas junté nuestros labios en un fogoso beso. El acalorado principio me llevo a ahuecar mis manos en su rostro. Luego de un tiempo comenzó a reaccionar, deslizando sus manos en mi cadera y muslos.

Nuestros labios se movían salvajemente el uno con el otro, uniéndonos, y rompiendo el hechizo.

Cuando el aire comenzó a faltar fue cuando nos separamos.

—Wow, Milady, feliz día de San Valentin. —dice él tratando de volver a besarme.

—Ah ah. —negué yo poniendo mi mano en su cara.— Tu te portaste mal, eres un gato malo. —dije fingiendo enojo. Nos levantamos y me acordé que quería decirme algo.— ¿Qué me ibas a decir, Chat?

—Yo solo quería decirte que... hum. —tartamudeó el con nerviosismo.— Es que yo... Te amo.

Su confesión me dejó confundida, ¿Me amaba?

—¿E-En serio? —pregunté yo.— Pe-Pero como amigos o... —no me dejó terminar, me callé cuando posó sus manos en mis caderas para acercarme a él.

—Como algo más. —respondió a pocos centímetros de mi cara. Entonces deposité un beso en la punta de su nariz.

—Hablamos más tarde, gatito, ahora hay que salvar a París. —le digo con seguridad para seguir corriendo por los tejados de esta ciudad.

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—Adiós, mariposita. —habló Ladybug al ex-akuma— ¡Miraculous, Ladybug!

Todo volvió a la normalidad.

—¡Ganamos! —dijimos los tres al mismo tiempo, chocando nuestros puños. Entonces fue cuando los aretes de mi compañera comenzaron a sonar.

—Nos vemos luego, chicos. —habló ella para irse.

—Oye. —me llamó la atención el gato, lo miré.— Dime, ¿Tú sientes lo mismo?

—Te mentiría si te dijera que no, chaton. —pude besar rápidamente sus labios.— Me tengo que ir. —señalé mi miraculous, que estaba a punto de consumirse.

—Espero verte pronto, Milady. —dijo con las mejillas un poco rojas, le sonreí para dirigirme a mi casa, lo más rápido que pude. Quería bañarme, había corrido por todo París al menos tres veces.