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Aviso: situación incomoda entre chicos, proceder con precaución

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-¿Seguro que no necesitas ayuda con esa caja?

-No te preocupes, si las llevo así podremos terminar esto más rápido.

Escuchando el tintineo que le provocaba un enorme nerviosismo, el pequeño chico abrió la puerta mientras cargaba otra de las cajas con los mecheros de alcohol y pinzas.

Karma había tenido la brillante idea de poner encima de la ya pesada caja dos charolas más para agilizar el trabajo, Nagisa suspiró cuando su compañero tomó las cosas y se paró en la puerta dispuesto a irse.

Shiota no pudo evitar sudar frío con el característico sonido del vidrio al chocar. Abrió la puerta comenzando el viaje al almacén, intentando mantener un ritmo lento su preocupación se disparó cuando su amigo caminó más rápido de lo que pensó.

-¡Ey! ¡Karma-kun! - levantó la voz llamándole a la vez que intentaba alcanzarlo.

A pesar de que solo tenían que ir todo recto hasta llegar al salón donde estaba el espacio para guardar el material del laboratorio, el corazón del pequeño no podía evitar achicarse imaginando que el vidrio pudiese lastimar a Karma.

En algún punto de la persecución comenzó a correr por lo que no tardaron casi nada en llegar.

-Hehe, mírate Nagisa-kun ¿Estás preocupado por mi? - burlón sonrió dejando ver sus colmillos.

El chico lo miró con reproche respondiendo a su pregunta en silencio, volvió a abrir la puerta soltando un "no hagas eso Karma-kun".

-Deberías mirar tu ros....

Justo antes de seguir molestando al pequeño ambos chicos fueron sorprendidos por la presencia de un grupo dentro.

-¡Miren! Más miembros - Kurahashi fue la primera en hablar saludandolos con bastante ánimos.

Un pequeño grupo conformado por Yada, Chiba, Rinka, Okajima, Megu y Kurahashi les miraba expectantes.

-Llegan justo a tiempo íbamos a comenzar pero honestamente nos faltan miembros - comentó Yada contenta.

-¿Qué hacen aquí chicos? - Nagisa le entregó la caja a Karma quien ya había acomodado su carga mientras ellos hablaban parándose al lado de su compañero.

-Vamos a perfeccionar la técnica del beso de Bitch-sensei - dijo con simpleza Kurahashi.

-¡¿Beso?! - preguntó Nagisa sorprendido.

-¡Sí! También es una técnica de asesinato así que también debemos de sacarle provecho - volvió a hablar la muchacha sin una pizca de vergüenza.

-Ya veo...- el rostro del peliazul se tornó un tanto más pálido y una gotita de sudor rodó por su mejilla -Bueno, que se diviertan con...

-Vamos, vamos no sean tímidos - Yada se levantó tomando a Nagisa de la mano jalandolo hacia el grupo.

De repente ya estaba sentado entre Okajima y Karma quien lo había seguido en silencio.

-Ya teníamos las parejas hechas, Chiba y Rinka, Megu y Okajima y finalmente Yada conmigo - explicó Kurahashi sonriente con sus ojos verdes destellando de emoción.

-Ka-kataoka-san con...- las palabras se quedaron atoradas en la garganta de Nagisa, ni siquiera Karma pudo disimular la sorpresa de escuchar aquello.

-Ni de chiste besaría a Okajima-kun, estoy aquí con el propósito de vigilarlo y que no se salga de control - la mirada llena de determinación y dureza fue suficiente para calmarlos.

Karmagisa one shotsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora