Ambos chicos en aquel salón rieron nerviosos antes la bochornosa situación que acaba de suceder. Quackity escuchaba la bonita risa del oso y veía sus mejillas torneadas de un toque de color carmesí, sin dudarlo, una muy linda imagen para él.
Spreen, nervioso por la mirada del contrario se calló y comenzó a tratar de hablar, aunque la mayoría fue un balbuceo debido a todo lo anterior.
— B-bolud- — Tartamudeos sólo salían de su boca. Quackity rió nerviosa y levemente ante la situación.
— Perdóname spreen por eso. ¿Pero qué acaba de pasar, qué hago acá? — Preguntó directo, sin rodeos. — ¿En serio tú y yo...? —
Spreen negó nerviosamente mientras negaba con su cabeza y escondía su rostro en sus manos. Muy serio el chico, pero cuándo hablan de estos temas era muy avergonzado con ello.
— ¡No, no! ¡jamás haría eso con alguien inconsciente! — Seguía negando. Quackity puso su cara de confusión y rió.
— Sólo bromeaba. — Salió de la boca del más bajo. Spreen se calmó.
— Te desmayaste en frente de mi cafetería, te traje hasta acá porque te veías cansado y un poco pálido. — Carraspeó spreen su garganta antes de volver a hablar. — ¿Haz comido bien, Quackity? — Preguntó.
Quackity se calló y negó lentamente con la cabeza. Spreen se encogió en hombros y lo miró.
— Debes comer bien, ¿sabes? —
— Ven, te prepararé algo rico y debes comerlo todo si quieres que salgamos. — Sonrió Spreen, su sonrisa contagió a Quackity.Esté sólo se limitó a asentir con su cabeza, no sabía porque tanta la preocupación de que comiera, más aún si lucia como lucia.
Spreen en unos instantes preparó un rico desayuno, bastante nutritivo según él y el mismo mencionado antes. Spreen sonrió y lo dejó en la mesa en la que mandó a Quackity a sentarse.
— ¡Todo Quackity! — Dijo Spreen, mientras veía su teléfono. Quackity estaba loco con el delicioso aroma pero no quería comer, era algo doloroso pensar que no merecía está comida.
Spreen lo observó detenidamente, veía como se arrepentía cuándo iba a tomar la comida así que hizo algo drástico.
— Cuándo yo tenía problemas para comer, mis amigos me daban comida en la boca — Dijo, para luego partir un pedazo de pan y ponerlo frente a la boca de Quackity. — Abre la boca — Dijo Spreen, mientras sonreía.
Fue un lindo gesto, que Quackity no se negó a rechazar. Abrió la boca y permitió la entrada de un rico pan dentro, y dios... sabía tan bien en las papilas gustativas de Quackity que no se podía negar a otro pedazo.
— Cocinas muy bien, Spreen. — Dijo Quackity mientras Spreen partía otro pedazo de pan. Spreen asintió e hizo un gesto para que volviera a abrir su boca.
— Lo sé. —
— Cuándo termines de comer, te prestaré el baño para que te duches y ropa para que te vistas, saldremos hoy a lo planeado. — Dijo Spreen.Quackity lo miró confundido. ¿Por qué hacía todo aquello por él? apenas y se conocían hace unos días. Las preguntas rondaban su mente y no se percató de una leve mancha al lado de sus labios que fue quitada por el pulgar de Spreen.
Esa imagen sucedió en cámara lenta para Quackity, como si el mundo se hubiera paralizado en ese microsegundo y se hubiera guardado el recuerdo en su memoria.
Spreen sólo se levantó rápido al notar lo que hizo y fue hacia su habitación a buscar ropa y una toalla para Quackity, obviamente evadiendo. Quackity le siguió el pasó para ir a buscar su ropa y toalla, ignorando lo que pasó.
Spreen le pasó las cosas, Quackity entró de inmediato al baño con las indicaciones de Spreen y se encerró. Suspiró pesadamente y sólo entró a la ducha.
Spreen se puso a jugar en la pc.
...
Algo cortito porque ando con covid y bn enfermo pero quería hacer un cap. =3
Ustedes deciden
¿Quieren que haga la salida de ellos dos o algo angst?
ya se que van a elegir, pero bueno.
gracias por leer. < 3
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spreenckity ★ ( cafetería y aroma a miel. )
General Fiction; spreen es un barista en su propia cafetería en un pueblo pequeño, dónde a pesar de no ser tan grande bastantes acontecimientos suceden. quién iba a pensar que llegaría un nuevo chico que está escapando de alguien. ¡ Aclaraciones ! Sólo cubitos, n...