IMPERFECTAMENTE PERFECTOS [LIBRO 2] [TERMINADO]

🏍️ 11. NADA DURA PARA SIEMPRE 🏍️

HUGO

Que Jenna no tenga relación con el padre de su hijo y que se lleve de esa manera con su excuñada, da que pensar, y para mal. Algo muy malo tuvo que pasar para que las cosas terminaran así.

No quiero insistir preguntándole, pero no voy a mentir y decir que no me interesa. De alguna manera, ella me importa y también su vida.

Aunque sea pasado, tengo la necesidad de saberlo y apoyarla. Pero como bien dice, le doy su tiempo y voy a seguir haciéndolo. No quiero que sienta presiones conmigo ni mucho menos hacerle recordar algo dañino para ella.

Siento que cada vez tenemos más confianza y eso me hace avanzar en cuanto a lo que quiero, que es básicamente, estar cerca de ella.

Cada vez que la veo, mi corazón palpita con fuerza. Me recorre una sensación jamás mi vida y es algo que no puedo obviar.

Sé que muchas veces le incomodan algunos de mis comentarios, pero no puedo dejar de pensarlos ni de decirlos. Luego tengo que contrarrestar diciéndole que son broma, pero ni yo mismo me lo creo, no sé como ella lo hace.

Ya me ha pasado más de una vez que tengo que irme de su lado para no cometer una locura contra ella. Es tan guapa que quiero besarla y tan sexy que quiero follarla. Me tiene muy, muy mal.

Ahora estoy terminando de hacer la comida y esperando a que llegue de trabajar. Salgo de la cocina cuando escucho mi móvil sonar en la mesa del salón. Frunzo el ceño al ver su nombre.

– Jenna – respondo - ¿Pasa algo?

– Hola Hugo – responde nerviosa – Yo... eh...

– ¿Estás bien? - pregunto nervioso.

– Si, si – habla apresuradamente – Solo que voy a salir unos minutos más tarde del trabajo y nadie puede recoger a Karim del colegio. Todos están trabajando y la única que está disponible es Noa pero tampoco coge el teléfono...

– Jenna, tranquila – la paro cuando veo que se va a quedar sin aire – Me sobran las explicaciones. Yo voy a por él.

– He intentado salir a mi hora, de verdad, pero mi jefe...

– No hay ningún problema – sonrío aunque no me vea.

– No me gusta molestarte con cosas así porque mi hijo es mi responsabilidad...

– Vuelve a excusarte y recojo a tu hijo en la moto.

– ¡No! - exclama - ¡Hugo, eso sí que no!

– Jenna – suelto una carcajada - ¿De verdad me ves capaz? Termina de trabajar y te esperamos en casa, anda.

Cuelgo antes de que me pueda rebatir y con una sonrisa en la cara, me pongo mi chaqueta y cojo las llaves para ir a por mi chico favorito.

Desde que estoy conviviendo con él las ganas ser padre han aumentado, aunque sé que falta mucho para eso, si es que llego serlo algún día. Siempre me han gustado los niños y me pongo triste al pensar que ya soy algo mayor y que se me va a pasar la juventud para tenerlos.

Solo espero que la vida me de una oportunidad, quiero cumplir el único sueño que me falta. Y no voy a decir con quien, porque todos saben quien es.

Al llegar al colegio, me fijo en todas las filas de niños hasta dar con Hugo. Él también está mirando a todos lados supongo que intentando buscar a su madre. Su profesora lo tiene cogido de la mano y él se mueve impaciente.

Me acerco lo suficiente para captar su mirada. Sus ojos se abren con sorpresa y su boca también. Se suelta de un tirón de la mujer y avanza tambaleándose hacia a mi con una sonrisa de oreja a oreja.