Seungmin tomará represalias contra todos los que le hicieron daño.
- Cada uno de ellos llorara lagrimas de sangre cuando me vean...
Un juego donde solo el más inteligente saldrá ileso de tantas flechas de VENGANZA y eso también incluirá a Seungmin q...
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Había despertado sin saber en dónde estaba, todo el lugar estaba oscuro y ningún ruido se escuchaba.
Trató de levantarse pero una punsada en la parte baja de la espalda lo inmovilizo.
Respiró ondo y volvió a moverse está vez ganado un corrientazo de dolor por todo el cuerpo, lloró de la impotencia y del dolor.
- Cuando te vea te romperé la cara imbécil - movió sus manos tratando de encontrar su teléfono pero no sabía siquiera su seguía en la casa del mayor o estaba tirado en cualquier lugar.
Esperó varios minutos en el suelo, si, estaba en el suelo lo había descubierto después de no encontrar una almohada y porque su espalda estaba como una tabla de lo rígido que estaba.
Gran parte del sentido del tacto no lo estaba sintiendo pues el dolor se acumulaba solo en su espalda baja.
Las luces blancas de los focos de los pasillos se encendieron, ya sabía en dónde estaba.
- ¡Seung amor! - Ju gritó en las puertas del elevador y corrió hacia él, se arrodilló a su lado y lo abrazó - me preocupe cuando no llegaste en la noche, salí a buscarte... ¿Estás bien¿ ¿qué haces aqui afuera?, te resfriaras.
Ju sostuvo sus mejillas y vio sus ojos llorosos, escaneo un poco la escena asustandose por lo maltratado que estaba.
- Seungmin...tu...
Seungmin no mentiría si decía que se iría con ellos así que...
- Le dije que se detuviera, quiero descansar - susurró el menor dejando caer su cabeza en el pecho de su novio.
Ju abrió los ojos aterrado, miró su cuello llenó de marcas moradas, sus pequeñas manos con marcas rojas y verdes en las muñecas y esa herida en el labio que claro que la vio en el primer segundo.
Apretando los dientes de la rabia sacó la copia de la llaves y abrió la puerta, sus brazos envolvieron con cuidado al peli-negro escuchándolo quejarse con cada paso.
Estaba asustado, cuando lo cambió de ropa no podía creer que su pobre chico estubiera llenó de chupetones, su piel blanca lechosa ahora era un nido de marcas moradas e incluso verdes, sus piernas no corrían mejor suerte pero lo que si lo llevó al limite fue ver una mancha de sangre.
- Estás sangrando debemos ir al hospital - no era pregunta era una orden.
Con ropa ligera logró cambiarlo y llevarlo a una clinica.
Papeles, preguntas, dinero... y al fin estaban ya dándole un diagnóstico y medicamento.
- Suele ser "frecuente" cuando es la primera vez, lamnetablemte no hubo una buena lubricación y ninguna dilatación previa así que fue más fácil que sufra un desgarre, tienen suerte de que no haya sido más grave...
