LA VENGANZA ♡ SEUNGMIN X SKZ

II

Sus manos temblaban , su cuerpo sudaba y su voz había desaparecido.

- Hey, parece que has visto un fantasma - pasó su mano por el rostro de Minho - ¿qué ocurrió y el pedido?

El nombrado abrió la boca y la cerró sin emitir palabra alguna, estaba muy pálido parecia que se desmayaria en cualquier momento.

- Me estás asustando que...

- Lo vi...- su mirada asustada se dirigió a Hyunjin.

- ¿A quién? - salió de su puesto y ver a los clientes no encontrando nada raro.

- A-a S-seungmin- exhalo sonoramente y volvió a hablar - te juro que lo vi, esos ojos nunca los olvidaría...son verdes y-y.

- Y Seungmin esta muerto - suspiró triste- se que aún tienes peso en ello pero debes aceptar la realidad.

- Hyunjin créeme lo acabo de ver.

- Será tal vez alguien que se le parezca hyung, estas nervioso déjame que yo me haga cargo- tomo la agenda de las manos contrarias e hizo los pedidos.

Mientras hacia las decoraciones de los platos pensaba en lo dicho por su hyung, Seungmin vivo? Pero y el velorio? Sus padres llorando? Aquella lápida en el cementerio? No, definitivamente Minho había enloquecido.

Sin tomar en cuenta que pasaron ya seis años en todo ese tiempo lo hubiera visto, pero claro está muerto así que...

- Tonterías- suspiró y tomó la orden, fue en busca de la mesa encontrando a una mujer ahí, sinceramente era mucha comida solo para ella pero bueno - lamento el retraso - dejo su comida ahí, dándole una muestra de vino para después ser aprobado y servirle el resto.

No encontró a nadie más y se retiró, aquella mujer se le hacía conocida pero su memoria no era tan buena recordando así que talvez y sería de esas señoras adinerada que frecuentaba el restaurante.

- L-lo viste...es él no es así- un muy nervioso Minho preguntó.

- No y ya deja de decir eso, que solo me trae recuerdos malos - ignoró al mayor y fue a seguir haciendo sus cosas.

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Seungmin regresó del tocador y vio la mesa ya con sus alimentos.

- Así que quieres que yo modelo su nueva colección? - preguntó el chico.

- Eres perfecto para eso, eres elegante y muy lindo en ti quedará perfecto todo - aquella mujer era como una niña, festejando y aplaudiendo de la emoción.

- Bueno, por algo estoy aquí, así que encantado lo haré- el resto de su noche fue tranquila, hablaron de los proyectos que tenía para el menor y también de como Seungmin estaba pensando en sacar alguna canción.

Derepente se acercó otro mesero, a diferencia del primero este llevaba una mascarilla negra.

- Joven el señor que está allá le envía esto - Seungmin no regresó a ver y solo asintió, una botella de vino negro fue entregada a su mesa - le dejo algún...r-recado~ - su voy bajó su volumen conforme veía al castaño, este nisiquiera le observaba pero podía intuir lo que dijo Minho.

- Dile que gracias pero que no salgo con viejos - le dio una mirada un segundo, Hyunjin casi se cae de la impresión tenía ojos verdes como Seungmin de echo se parecia a Seungmin.

- C-Claro, con permiso- con reselo y torpeza se acercó al señor - Lo lamento dice que no está interesado en salir con adultos - aquel hombre frunció el ceño y asintió- permiso

Al llegar a la cocina donde descansaba Minho lo vio y pudo asentir a lo dicho.

- Lo vi... pero como...- susurró.

- Vez, no estoy loco ni traumado es él.

De vez en cuando se asomaban a las mesas observando a aquel chico de cabello castaño que movía su copa con elegancia, su postura era erguida y sus movimientos delicados, era simplemente un chico muy guapo tanto así que fueron testigos de como una joven se acercó para pedir su número siendo rechazada con un ademán de manos, un joven de su edad más o menos también se acercó con elegancia al chico recibiendo la misma respuesta.

Y vaya que aquel señor del vino insistió más de dos veces, en todas llevándose un "no" por respuesta.

- Que insiste- murmuró Hyunjin con el ceño fruncido.

- Que lindo - dijo Minho embobado.

Hynjin negó con la cabeza, su amigo seguia tan embobado como hace años.

Pronto la mujer pidió la cuenta, ambos discutieron un rato por ver quien iría.

- Aquí está su cuenta - habló Hyunjin, observando al chico que acaba de beber el vino - en efectivo o tarjeta ...

- Pagaré yo, no te preocupes noona - el castaño sacó una tarjeta de su cartera y se la entrego, el mayor con manos temblorosa la sujetó rozando levemente sus dedos, recoriendole un escalofrío.

Observó la tarjeta y el nombre lo decilusiono "SKY KIM" intuía que era extrangero ya que a su lado daba la residencia canadiense.

- Gracias cielito, la próxima te invitare yo - le devolvió su tarjeta e hizo una reverencia.

- G-gracias por venir, vuelvan pronto- observó a la pareja levantarse y marcharse, sin quitar los ojos del Sky quien caminaba con elegancia distinguida.

Suspiró por su falsa esperanza, y volvió a su trabajo.

- Como se llama, te dio su tarjeta lo viste - preguntó desesperado el mayor.

- Eres un tonto hyung - caminó decaído hasta entrar a la cocina- su nombre es...Sky.

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Esa noche le fue difícil dormir, se levantó sudando y con lagrimas en los ojos, recordando como fue de tortuoso tener a Minho como su vecino.

Teniendo nuevamente esa pesadilla de cuando le decía cosas horribles.

"Aquí el único monstruo eres tu ¿no te haz visto en un espejo? Por eso tu madre siempre te castiga porque eres lo más horroroso que verá y que lastima por ella que tenga que lidiarte todos los días"

Lo odiaba, odiaba tener que soñar con esos feos momentos, con Lee Minho que era su cruel bully.

- Ahora que regresé no se quedará así Le Minho, tenemos pendientes...

Ahora era bonito, nadie podía decirle lo contrario, y se lo recalcaria en la cara por haber dicho semejantes cosas.