Vi cómo las chicas se iban cogidas de la mano y a los minutos, también se fueron Sergio con la chica que habíamos estado los dos bailando. ¡Joder! ¿Es que todos iban a follar esta noche menos yo o qué?, cogí el chupito y me lo tome notando como bajaba quemando mi garganta.
-Tienes buena tolerancia al alcohol, por lo que veo.- Luis se colocó a mi derecha en la barra-Da gusto ver como lo tragas- lo mire sorprendida y levante una ceja- digo el alcohol Anna-No pude evitar reírme.
-Y también te mueves muy bien, la verdad.-Mire hacia mi izquierda, donde ahora estaba Adrián- Es algo que hemos disfrutado de ver, aunque hubiera sido mejor estar en el lugar de la pareja con la que bailabas.
-Gracias por el cumplido. Pero yo no habría bailado con ninguno de vosotros dos de esa manera- El alcohol en mi sistema, me estaba ayudando a soltarme y decirle directamente todo lo que pensaba, sin miedo ni ponerme nerviosa.
Seguí bebiendo, ya que estaba de mal humor al estar cachonda, porque toda la situación con Sergio y ver a las chicas casi follándose en la pista me había empapado y estos dos no estaban haciendo que mi ánimo mejorara.
-¿Y eso? ¿Tanto miedo te da bailar con nosotros?- Luis me acaricio la mejilla, mientras volvía a poner su sonrisa ladeada que tanto me ponía.
-¿O es que te ponemos nerviosa, Anna?- Adrián se había vuelto acercar a mi oído para susurrarme esas palabras, mientras pasaba su mano por mi cintura y me cogía con fuerza de ella.
Yo mire la mano que Adrián tenía en mi cintura y luego lo repase entero. Desde sus pantalones vaqueros con roturas en las rodillas que le quedaban bien ajustados, siguiendo por la camisa de manga corta negra, que le quedaba lo suficientemente justa al torso, dejando entrever que estaba bien ejercitado y que debía tener unos buenos músculos debajo de ella y luego esa cara. Esa cara que ya había dicho antes parecía la de un niño bueno, pero que tenía una sonrisa de cabrón, al igual que su personalidad, que podía ponerte cachonda en un segundo. Adrián tenía unos ojos color miel preciosos, siempre lo había pensado, al igual que su sonrisa de anuncio de pasta de dientes y unos labios carnosos que te tentaban a morderlos. Y ahora llevaba el cabello lo suficientemente largo como llevarlo atado en un moño, de esos que ahora muchos hombres llevan y la verdad es que les queda jodidamente sexy.
-No Adrián, no me ponéis nerviosa para nada.- Cogí su camisa y lo acerqué a mí, para dejarlo tan cerca que nuestros labios se rozaban- Aunque sé que te encantaría tenerme temblando por vosotros- Puede notar como intentaba acercase para besarme, pero me aleje justo a tiempo para que no pasara. Él se separó un poco y me sonrió.
Me giré hacia Luis, y ahora me dedique a mirarlo a él. Luis era más alto que Adrián, ya que debía estar midiendo su metro noventa tranquilamente. También llevaba unos pantalones ajustados con roturas en las rodillas, pero estos eran negros acompañados con unas botas militares del mismo color. En la parte de arriba llevaba una camiseta negra de tirantes que marcaba su pecho, dejando ver sus brazos trabajados y que se ajustaba a su cintura estrecha. Como me ponía los hombres con los brazos como los de él, esos brazos donde puedes ver unas venas marcadas pero nada exagerado al igual que las manos. Y su cara hacía mejor todo el paquete, ojos negros rasgados, ya que su madre era de filipinas, labios carnosos y cabello negro rapado en los laterales, con el resto del cabello algo más largo. Este hombre tenía un letrero en la frente que ponía, que si te acostabas con él te dejaría temblando hasta el día siguiente.
-¿Miedo? Yo diría que no es lo que provocáis en mí la verdad- Pase mi mano por su antebrazo, notando sus venas debajo de mi palma y haciendo que me recorriera un escalofrío muy satisfactorio por todo el cuerpo. Él no dejo de mirar el recorrido de mi mano por su brazo.
-¿Y qué es lo que te provocamos pequeña?- Deje de tocarlo para mirarlo directamente a los ojos, mientras me mordía el labio inferior e imaginaba mil escenas donde les hacía de todo y dejaba que ellos me lo hicieran a mí.
-Creo que eso podéis descubrirlos solitos- Me aleje de él y bebí unos cuantos tragos rápidos de mi cerveza dejándola casi vacía.- Pasadlo en grande chicos- Sonreí a Luis y sin despedirme de Adrián me fui hacia la pista de baile.
Cuando me alejaba de ellos, puede ver en la pista de baile a Daniel un antiguo novio de mi primo David con su actual pareja. Así que decidí irme con ellos a bailar y pasármelo en grande, ya que Daniel es el alma de la fiesta y la típica persona con la que te lo pasas genial. Nada más verme me cogió de la cintura y pegándome a su cuerpo me dio un fuerte abrazo.
-¡Anna, estás preciosa! Hacía mucho que no te veía, te he echado de menos enana- Me cogió de las mejillas y me dio un beso en los labios, siempre que iba con unas copas de más me saludaba de esta manera y la verdad que no me molestaba en absoluto- Quiero presentarte a mi novio Charles, lo conocí estudiando en Londres el año pasado y cuando me fui de vuelta a España, él decidió venir conmigo.- Mire a Charles y lo salude con dos besos.
-Nice to meet you, Charles.-Él me devolvió una sonrisa tan bonita y sincera, que supe al instante que nos íbamos a llevar fenomenal y por como miraba a Daniel podía ver que estaba muy enamorado de él.
-Enana, puedes hablarle en español. Ya que su madre es de Madrid.- Me dio una leve palmada en el trasero, por la cual yo salte.
-Genial. Aunque ahora me has jodido, ya que pensaba que así podía practicar mi inglés- Los tres reímos por mi comentario- Dani quiero bailar, ¿qué te parece?- Siempre que le decía eso, Daniel se volvía una máquina de bailar sensual conmigo y eso me encantaba.
-¿Crees que puedes con los dos, pequeña? A Charles también le encanta bailar y hacerlo contigo y conmigo le va a encantar, ya me entiendes- Me dio una sonrisa pícara y se mordió el labio inferior mientras le daba una pequeña mirada a su pareja- Aunque luego solo me lo llevaré yo.- No pude evitar reírme.
-Ponme a prueba, nene. Y no te preocupes este semental es todo tuyo- Nada más decirle eso me empujo contra Charles, que me cogió por las caderas y empezó a bailar conmigo mientras Daniel se ponía detrás de él y le besaba la nuca mientras le susurraba cosas al oído.
Parecía que esta noche iba a ser la espectadora de mis amigos y sus parejas, eso o el universo quería dejarme excitada a niveles extremos. Charles se movía de una manera brutal bailando mientras seguía cogido a mis caderas y Daniel iba alternando entre colocarse detrás de Charles o detrás de mí bailando pegado a mi culo. Al cabo de un rato de bailar, necesitaba con urgencia ir al baño, así que aprovechando que Daniel se había alejado de mí, me acerque al oído de Charles para que pudiera oírme.
-Voy un momento la baño y vuelvo- Él asintió y soltó mis caderas.
Cuando llegue al baño por suerte no había nadie y pude entrar rápidamente sin tener que esperar. Al acabar me lavé las manos y me mire al espejo, donde me arregle el cabello y comprobé que mi maquillaje seguía perfecto y en su sitio. Al salir del baño me encontré con Luis y Adrián cada uno apoyado en una de las paredes del pasillo, por donde tenía que pasar para poder llegar a la pista. Intente pasar entre ellos sin hacerles caso, pero Luis me cogió de la muñeca y me empujo suavemente contra la pared. Al tenerme contra ella, me soltó la muñeca, pero no me dejo ir, sino que coloco una de sus manos en mi cintura y la otra la puso en mi cuello cogiéndome suavemente si hacer presión en él.-Creo que ya sé lo que te provocamos pequeña- Mientras me decía esas palabras acerco un poco su cara a la mía- Apuesto, que si ahora mismo pongo mi mano en tu ropa interior estás empapada. Y eso es lo que te provocamos nosotros y también esos dos con los que bailabas.- Nada más acabar de hablar, se lanzó contra mis labios devorándome. Mientras nos besábamos, Luís mordió mi labio inferior haciéndome jadear, cosa que aprovecho para incitarme a que nuestras lenguas jugaran entre ellas. Fue bajando la mano que tenia en mi cintura hasta que la metió dentro de mi ropa interior, acariciándome y volviéndome loca con solo rozarme levemente- Completamente empapada, me encanta.
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Ya os avise que en menos de 24 horas habría capitulo nuevo. Esto cada vez se esta poniendo más interesante, ¿nos os parece?
Gracias por leer mi historia.
Besos,
Anna
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CORBEL
Nonfiksi- Sabemos lo que te gusta y como te gusta Anna. Luís me tenia acorralada contra el escritorio, mientras Adrian nos miraba sentado desde una de las sillas del despacho. - No voy a hacerlo, no de nuevo.- Mis piernas no dejaban de temblar, ya que realm...