13

2.2K 251 80
                                    

Después de todo el día con Katsuki, realmente no tenía ganas de irse, no quería apartarse de su lado, no quería afrontar a Chisaki, sabía con anticipación que el cliente de aquella noche había ofrecido el doble por él, lo cual era una gran ganancia para su negocio, pero Izuku no había asistido a encontrarse con él y no sabía que le sucedería.

Está sentado en la sala abrazando a Katsuki mientras ven una película, Katsuki detesta ver Titanic, odia el dramatismo que posee aquella película, aunque no puede negar que en realidad la historia está muy bien adaptada.

Izuku adora esa película, era la favorita de su madre y por consecuencia también la suya, hacía mucho tiempo que no la veía y con Katsuki ofreciéndole escoger una película, no pudo evitar elegir Titanic.

Inevitablemente llega una de las escenas más emotivas, la despedida de Jack y Rose en el océano helado, Katsuki quiere reírse, mientras que Izuku está empezando a ser un mar de lágrimas.

- ¿Porque lloras?

- Merecían estar juntos! La vida no es justa!

- ¡Sólo es una película! Nada es real!

- Rose merecía vivir feliz con Jack Kacchan!

- No es posible....

Izuku estuvo varios minutos llorando por esa escena, Katsuki no podía decir nada, sólo se limitó a escuchar lo lamentos del pecoso mientras le repetía una y mil veces porque ese final no lo merecían.

Una película de romance que termina mal, le deja un mal sabor de boca, en mayoría prefería los finales felices que le hacían desear una romance justo como ese.

El final de la película llega y están discutiendo que otra cosa deberían ver, Katsuki protesta y declara que no quiere otra tonta película de romance, le atrae más tal vez ver una película de terror, a lo que Izuku se niega ya que suele tener pesadillas después de ver una de ese género, se dicen muchas opciones y llegan a la conclusión de que no saben que otra deberían elegir.

- ¿Puedo tomar algo de beber Kacchan?

- Hay jugo en el refrigerador si quieres.

Izuku se levanta y Katsuki le sigue detrás, en el momento en el que Izuku se agacha para alcanzar el cartón de jugo que está hasta abajo, el rubio no puede evitar dar un vistazo a esa linda vista que tiene.

Puede ver perfectamente la ropa interior blanca del pecoso, se ajusta perfectamente a su cuerpo, y esos muslos, no tenía problema con usarlos de collar en algún momento.

- Mis ojos son bendecidos.

Dice inesperadamente Katsuki, Izuku no entiende a qué se refiere, una vez que toma el cartón de jugo recuerda que no trae nada que le cubra debajo más que su ropa interior, se levanta de golpe, su rostro está más rojo que nada.

-K-kacchan!

- Perdón perdón.

Izuku deja el jugo en la mesa y toma un vaso para servirse un poco, Katsuki se acerca y le abraza por la cintura reposando su mentón en el espacio entre su cuello y su hombro.

Antes de la tormenta viene la calma.

Katsuki sujeta al pecosi de la cintura, le abraza con cariño, inhala su aroma, puede divisar pequeñas pecas distruidas por su hombro, no puede evitar el impulso de besarla, son tan lindas como las estrellas adornando un cielo nocturno.

Izuku tiene un escalofrío, siente los labios de Katsuki besar su hombro con cuidado, instintivamente hace su cabeza a un lado dándole más acceso y el rubio no puede evitar besar con más fuerza, empieza a recorrer todo el cuello de su lindo chico, besa, lame, muerde, deja una leve marca roja en el transcurso.

PECAS (KATSUDEKU)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora