●Prólogo●

7K 533 32
                                    

•~~~~•~~~~•~~~~•~~~~•

En una isla, donde un reino habitaba, los reyes estaban en una zona alejada del castillo para acampar, ya que era el cumpleaños de su pequeño hijo.

Una mujer llamada Elinor, de cabello castaño y largo amarrado y ojos verdes, teniendo un vestido morado y una tiara, caminaba con una sonrisa buscando a su hijo al jugar a las escondidas juntos.

-¿Dónde estás?-Diría con una voz cantarina mientras miraba a los lados riendo
-Sal de ahí travieso... Sal de donde estés-

Mientras pasaba por la mesa rodeándolo, un pequeño niño de rizos rojos rebeldes, ojos verdes y piel pálida que fue llamado Merid, estaba escondido debajo de esta evitando reír para no ser descubierto.

-¿Dónde estás pequeño travieso? Voy a atraparte-Diría la madre agachandose para no encontrar nada, por lo cual sonreía y se paraba
-¿Dónde está mi lindo cumpleañero? ¿Hmm?-

Mientras ella hablaba al aire, el niño escondido detrás de un escudo, se asomaba lentamente detrás de ella al querer sorprenderla.

-¡Lo voy a devorar cuando lo encuentre!-La mujer de repente volteaba para encontrarse al niño, por lo cual el pequeño daba un grito al ser atrapado antes de escapar
-¡Voy a comerte!-

Comenzaba a hacer ruidos fingiendo comer al niño, mientras este reía sin parar.
Cuando llegaba el padre del pequeño, este dejaba un gran arco de madera en la mesa para poder comer, llamando la atención de su mujer.

-Oh, Fergus. Sin armas en la mesa-Regañaba Elinor mientras su hijo se soltaba de ella

-¿Puedo disparar una flecha?-Diría Merid tomando el arco enorme a comparación de su tamaño
-¿Puedo, por favor? ¿Sí, sí puedo?-

Al mirar a sus padres con el arco en manos, debido a su tamaño y lo pesado que era, este caía sentado en el césped con una sonrisa mientras su padre reía.

-No con ese. ¿Por qué no, usas mejor el tuyo?-Fergus sacaba detrás suyo, un arco hecho a su tamaño como regalo, sacandole una sonrisa de emoción a su hijo
-¡Feliz cumpleaños, mi muchacho!-

(....)

Luego de agradecerle el regalo, los padres estaban junto a Merid frente a un blanco para intentar aprender a usarlo.
Enfrente del blanco, habían varias flechas de intentos de Merid que habían fallado. Mientras este intentaba volver a estirar el arco con la flecha colocada, Fergus le instruia y ayudaba, mientras Elinor estaba para asegurarse de que no se dañara.

-Bien, así se hace muchacho. Estiralo hacia tu mejilla, hasta atrás-Explicaba el hombre mirando a su hijo que trataba de mantener la flecha derecha
-Abre bien los ojos y.... Suéltala-

Al soltar la flecha, esta comenzaba a volar unos metros lejos hasta perderse en el bosque.

-Ay, fallé...-Diría Merid con algo de decepción

-Ve por ella entonces-Al escuchar a su madre, Merid le entregaba su arco para ir tras la flecha, mientras Elinor miraba a su esposo
-¿Un arco, Fergus? Es un caballero-

El hombre no decía nada, y solo le daba una nalgada a su mujer de manera traviesa para reír mientras su esposa le daba un golpe en el pecho.

-Quieto-Diría la mujer riendo un poco igualmente mientras su esposo reía a carcajadas

(....)

Por parte de Merid, este entraba al bosque corriendo, jugando con algunas hojas y ramas, buscando en donde pudo parar la flecha entre los grandes árboles.
Mientras más se adentraba en el bosque, los árboles lo rodeaban, hasta que su vista iba a la flecha clavada en el tronco de un árbol, que para su suerte, estaba a su alcance.

𝕍𝕒𝕝𝕚𝕖𝕟𝕥𝕖 (Male Merida X TN)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora