❝Tú serás mi reina❞
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Ginny suspiró leyendo la carta de Leah por quinta vez en tres días, vio a sus dos hijos menores jugando en el jardín cubierto de nieve desde el balcón.
–Sabes que el frío le afecta–Tranquilizó Harry a su esposa mientras le ofrecía una taza de chocolate–Tranquila, es Leah, disfruta de estar sola–
–No puedo estar tranquila, es nuestra ahijada y esta sola en navidad–Contestó la pelirroja–No puedo creer que Hermione no pase las fiestas con ella–
–Está ocupada–Recordó el Potter.
–Nosotros también–Refunfuñó la Potter cruzándose de brazos.
Él decidió no responder más, sabía que hasta cierto punto su esposa tiene la razón al enfadarse, él ni siquiera le había pedido a Hermione que vaya a esa reunión pero ella insistió en ir, todos los años hacía lo mismo.
–Madre–Llamó James Sirius acercándose–Escuché que Albus dijo que Leah iba a venir hoy–Comentó emocionado por alguna razón.
–No lo hará–Respondió su madre acomodando su capa–Me envió una carta diciendo que esta muy enferma y se quedará en casa–
El mayor de los hermanos Potter esperó a que su madre continúe, pero cuando ella no lo hizo frunció el ceño confundido ante su respuesta.
–¿Y la dejaremos pasar sola la navidad y el año nuevo encerrada en su habitación enferma?–Cuestionó sin creerlo.
–¿Qué quieres que hagamos?–Preguntó Harry–Sin ánimo de ofender, hijo eres una de las razones por las que no está aquí–
El chico bajó la mirada y escuchó a su madre dándole un zape a su padre, pero sabe que él tiene razón, siempre supo que él tiene la razón, es su culpa.
–Estaré en mi habitación–Anunció antes de irse con la cabeza gacha.
–¿Ves lo que provocas?–Soltó Ginny viendo a su esposo.
Pero en lugar de ir hacia su habitación el príncipe bajó a los establos y sacó a su ciervo de ahí sin que nadie lo vea, subió sobre su lomo y rápidamente salió con dirección a la casa Granger.
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THE DRAGON HEIR ||JAMES SIRIUS POTTER||
FanfictionDespués de años viviendo en una mentira Leah Granger finalmente sabe la verdad, el mundo mágico ahora sabría el horror que traería un simple error del destino. Desde el principio el destino decidió que esos dos reinos jamás debían unirse, pero nunca...