Tomadas

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Capitulo no apto para cardíacos

Lisa pov

Me encontraba saliendo de la empresa para ir a mi casa, hasta que recibí una llamada muy preocupante de Rosé.

-Hola hermana- salude.

-Lisa, tenemos un problema, tienes que venir rápido a casa- colgó.

Apenas me colgó, corri al auto hacia casa, pues esa llamada me había dejado muy preocupada.

Al llegar corri hacia la puerta, la cual estaba abierta, y entre.

-¡ROSÉ!- grite.

-Hermana, que pasa, por qué tanto alboroto- dijo tranquilamente.

-¿Cómo que porqué?- me miró raro.

-Pues la llamada, que me hiciste- dije con obviedad.

-Ah cierto, ven rápido sube- salió corriendo al piso de arriba.

-Mira, lo que me encontré en la calle- señaló a la cama.

-¡CARAJO!- dije al ver a Jisoo y a Jennie en la cama acostadas.

-¿Que paso?- pregunté a mi hermana.

-Pues venía en el coche, hasta que me pareció ver a chu, salí del auto y las ví, estás estaban siendo llevadas por unos chicos, tuve que amenazarlos con la policía para que me dejarán traerlas- explico.

-¿Y ellas no se defendieron?- pregunté.

-Lisa, están borrachas, que no ves- señaló a las chicas que deliraban en la cama.

-¿Y porque no las llevaste a su casa?- dije curiosa.

-Lo intente, pero sus padres estaban en casa, al parecer llegaron de sorpresa, y no quería llegar y ser interrogada con miles de preguntas, aparte tampoco o quiero que regañen a chu- habló.

-Y ahora- dije.

-Pues, yo me quedaré aquí en mi cuarto con chi, y tú llévate a Jennie a tu cuarto- me saco.

-Espera ardilla, no querrás aprovecharte de chu,¿cierto?- me miró enojada.

-Claro que no idiota, yo dormiré en el suelo, es solo, sabes que chu me gusta- asentí.

-Okey, pero si escucho algún grito vendré corriendo- dije.

-Aunque probablemente cuando lo oiga ya habrán empezado- me lanzó un cojín.

-Bueno, bueno ya, me voy- agarre a Jennie y la lleve a mi habitación.

-Lis, besame- dijo la chica que ahora descansaba en mi cama.

-¿QUÉ?- escuche bien o dijo besame.

-Que me beses carajo- me tumbó a la cama.

-Jennie, para estás borracha- la aleje.

-Quiero que me beses carajo, sabes porque- negué.

-Porque me gustas y quiero que me toques, que me beses y que me cojas- Puta madre, qué acabo de escuchar, a Jennie si se le pasaron los tragos.

-Jennie estás borracha, deberías dormir- la arrope.

-¡LALISA MANOBAN!, si tú no me coges ahora con tu polla, juro que mientras duermes lo hago a la fuerza- Como carajo sabe Jennie sobre mi condición.

-C-como sabes de eso- pregunté nerviosa.

-Digamos que una vez Jisoo y yo nos escabullimos y miramos los expedientes de ambas, en el cual contaban sobre tu condición y la de tu hermana- la mire sorprendida.

-¿No te asusta?- me miró confusa.

-No antes me excita- se me acercó de forma amenazante.

-Jennie duérmete por favor- la tire en la cama y la arrope.

-Que aburrida- me gritó mientras yo salía por la puerta y apagaba la luz del cuarto, no iba a dormir ahí, no después de la amenaza de Jennie.

Rose pov

Después de que Lisa se fuera acomo de a Jisoo para acostarla a dormir.

-Rose- dijo.

-Me gustas mucho Rosie- casi me caigo.

-¡QUE!- dije.

-Que me gustas Roseanne Park- repitió, cuántas botellas se habrá tomado.

-No,no tú estás muy borracha- dije.

-Pero los borrachos dicen la verdad- dijo, ¿Y si tiene razón?.

-Que cosas dices- me fui.

-Espera- volví.

-Tengo un regalo para ti antes- me besó.

-No, no- la intente alejar, pero se sentó encima de mi.

-Quiero tener sexo contigo Rosé- dijo, está no es mi chu, está chu está muy peligrosa.

-No- trate de alejarla.

-Si- empezó a mover sus caderas.

Dios estaba muy excitada, tanto que ya no tenía fuerza de voluntad para decirle que parará.

Empezó a quitarme la chaqueta y la camiseta que llevaba puesta.

-Me encantas tus cuadritos- dijo pasando su mano por ellos.

Yo ya no supe de mí, esa fue la gota que rebasó el vaso,estaba tan excitada que  ya no pensaba con claridad.

-Ahora, quiero que me comas el coño- dijo.

Baje con besos hasta su centro, y empecé a lamerlo,oi como Jisoo gemía de placer, metí dos de mis dedos, mientras lamía su clítoris.

-¡Ahhh!- soltó un gemido cuando comencé a mover más rápido mis dedos.

-¡Roseeee!- sentó como su centro se estrechaba.

-¡Ah!- soltó un gemido cuando por fin se vino, lami todo sus jugos, los cuales eran deliciosos.

Jejejeje, los dejé calientes , quieren que suba otro cap?,

Del odio al amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora