Suave amor

Día 16: nerd x golden retriver

Capítulo 7
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—Es una suerte que estemos juntos un año más —dice Sakura dejándose caer en una silla junto a sus dos amigos.

—No realmente, quienes fueron líderes pueden solicitar tener en el mismo curso a sus vice-líderes —explica Nirei escribiendo en su nuevo cuaderno.

—¿Cómo sabes eso? Espera, nunca solicité nada —asegura Sakura confundido.

—Eso es porque lo solicité en tu nombre. Y respondiendo a tu pregunta: conocer a todo el mundo tiene sus ventajas —sonríe el rubio orgulloso de sí mismo.

—Nirei-kun es impresionante como siempre —elogia Suou palmeando el hombro del chico—. ¿Qué harías sin él, Sakura-kun?

—Bueno… —murmura sonrojándose, ha pensado en una respuesta muy sentimental y no lo dirá, esos dos nunca lo olvidarán si lo hace—. No voy a responder a eso.

Suou y Nirei sólo se ríen.

—Por cierto, hoy nos asignaron el curso al que instruir, son clase 1-1 y adivinen qué: los llevaremos a patrullar.

—Es déjà vu.

—¿Cómo es que te enteras de todo? —Dice Sakura, aún está sorprendido con el tema. En un comienzo, Nirei había sido nervioso y temeroso, pero ahora es el amigo de todos.

—Sólo habló con la gente, los llamo por sus nombres, pregunto amablemente y ellos responden —explica Nirei.

—Sí, claro, como si fuera tan fácil.

—Has progresado mucho desde hace un año, estoy orgulloso de ti —habla Hayato destellando corazones hacia el rubio, su sentimiento es correspondido con una sonrisa avergonzada.

—Gracias, Suou-san

—Eso es verdad. Todos lo hicimos de hecho, crecimos. ¿Qué más sabes sobre los de primer año? ¿Hay alguien interesante?

—De hecho sí, muchos destacados. Te cuento por el camino, deberíamos estar allá ahora mismo.

—Sakura-kun, espero que no estés pensando en pelear con ninguno de ellos, debes ser un ejemplo a seguir.

El mencionado frunce el ceño y no responde.

Los tres se levantan y salen del salón. A pasos lentos llegan a la clase 1-1, justo donde se conocieron hace un año. Sakura debe entrar y explicar la situación de líderes y demás cosas, pero está congelado frente a la puerta, tiene mucha más responsabilidad ahora, una vez que entre deberá guiar a un nuevo chico, un líder novato que confiará en él y lo verá como un modelo a seguir justo como Kaji lo fue para él. Puede hacerlo, esto será difícil, pero Nirei y Suou están ahí, lo peor que puede pasar es toparse con un imbécil al que sin querer terminará golpeando.

—Nirei, Suou, vamos.

Y con eso abre la puerta.

(…)

—¿Sabes qué piensan de ti los de primer año? Creen que eres un nerd aterrador —comenta Nirei apoyando las manos en los hombros de Suou, quien está sentado frente a un escritorio en el cual reposa un libro abierto.

Están en la biblioteca y aunque hay algunos estudiantes ahí a nadie parece importarle el ruido. De hecho, hasta a veces suena música, es un lugar particular para leer.

—¿Nerd? No creo ser inteligente, pero gracias —dice tumbando la cabeza hacia atrás hasta apoyarse en el rubio.

—Eres muy listo, pero no creo que entres en la categoría los nerd no son tan guapos.

—Oh, gracias. Tú eres muy lindo —habla Suou con una traviesa sonrisa que crece junto al sonrojo de Nirei.

—Como… como decía, ellos creen que eres nerd por lograr el mejor promedio el año pasado y muchos te vieron estudiar aquí, justo como ahora —explica esquivando los elogios con éxito, toma asiento junto a su amigo y observa el libro sin interés alguno—. Aunque lo de aterrador no sé de dónde salió, con quienes hablé dicen que tienes “esa mirada” una que da miedo.

Suou recuerda todas esas veces en donde vio a Nirei siendo demasiado amigable con los de primer año, esos niños son peligrosos, la forma en que lo miran con tanta admiración y cariño, que sí, Nirei es un sol, pero como sigan mirándolo así van a robarle toda su luz y calidez. Además, algunos parecen aprovecharse de esa amabilidad y eso no puede permitirlo. Bueno, con tantos sentimientos de protección y propiedad es normal que parezca aterrador.

—Creo saber a qué se refieren.

—¿Si? ¿Qué es?

—No te lo diré.

—¿Por qué? ¿Acaso estas amenazando a los chicos?

—Mmh, algo así.

—Suou-san, eso está mal.

—Se lo merecen.

—¡Suou-san!