1. Negación

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Usa estaba tranquilamente en su casa. Tenía pensado hacer varias cosas ese día: Llamar a su hermano pequeño, discutir con su presidente, si eso hablar un poco con Nezuko, la cuarta hija de ONU y FBI.

Ah, y pasar tiempo con su poste favorito.

Se levantó del sofá, dispuesto a llamar a su hermanito pequeño. Marcó el número, y nadie contestó. Se extrañó bastante. Canadá siempre contestaba a sus llamadas. Y si estaba ocupado, contestaba, y le pedía que llamase en otro momento. Volvió a llamar, un poco preocupado, y está vez, sí que contestaron.

-¿Canadá?-dijo Usa-¿Todo bien?

-Usa...-dijo una voz al otro lado de la línea-No soy Canadá... Soy OMS...

-¿¡Qué haces con el móvil de Canadá!?-exclamó Usa, alarmado-¿¡Está bien?!

-Usa... Esto no debería decírtelo por teléfono, pero...-dijo OMS, asustando cada vez más al estadounidense-Te recomiendo sentarte...-Usa se sentó, completamente nervioso-Usa... Canadá... Sus grietas ya no tenían remedio...-¿grietas? Canadá no tenía grietas...-Usa... Canadá... Ya no está con nosotros...-a Usa le dio un vuelco el corazón.

-T-Te estás equivocando O-OMS...-dijo Usa-C-Canadá n-no t-tiene g-grietas... C-Canadá e-está en su casa...-dijo empezando a hiperventilar.

-Le he pedido a Rusia que vaya a buscarte-dijo OMS, mientras Usa sentía como se le nublaba la vista-No te muevas, ¿vale? Llegará en cualquier momento, y te traerá aquí. Isania va con él-

Usa ya no estaba escuchando. En su mente, solo había una cosa:

Canadá.

Su hermano pequeño

Canadá

Grietas

Canadá

Suhermanopequeño

Canadá

Grietas

SuhermanopequeñoCanadáGrietasSuhermanitoCanadáGrietasCanadáGrietasCanadáCanadáMuerto

Entonces, llamaron a la puerta, insistentemente. Usa no podía levantarse del sofá. No tenía fuerzas. Se escucharon cada vez más fuertes. Entonces, una voz femenina dijo: "Отвали!" (¡Apártate!)

De pronto, la puerta se cayó, y una chica de pelo blanco, con mechas azules, flequillo arcoíris, piel blanca, y un círculo azul, bajo una luna arcoíris bajaba la pierna. Isania, la primogénita de ONU. Detrás de ella, venía Rusia, bastante alterado, también.

-¡Usa!-exclamó al interior de la casa. Entonces su mirada se cruzó con la del americano, con sus ojos llenos de lágrimas. Rusia abrió mucho los ojos, al darse cuenta de que el chico ya sabía la noticia- Oh, Usa...-dijo acercándose a él, y abrazándolo.

-R-Russia...-dijo el estadounidense, correspondiendo al abrazo del ruso-N-No... N-No puede estar... Canadá...-dijo buscando refugio en el abrazo del ruso-É-Él...-Rusia suspiró.

-Lo siento, estrellita...-murmuró Rusia, haciendo que Usa abriese completamente los ojos-Lo siento mucho de verdad... Canadá era una gran persona...

-No... No... No... ¡No! -exclamó el estadounidense, tratando de zafarse del abrazo-¡Mi hermano está bien! ¡Mi hermano no está...! ¡Canadá, no está...!-se puso de pie. Pero las piernas le fallaron, y, de no ser porque Isania y Rusia tuvieron los reflejos rápidos, habría caído al suelo.

-Súbelo al coche, Rusia-le dijo la chica al ruso-Ve con él detrás, yo conduzco-miró a Usa-ONU ha dicho que vayamos al hospital de OMS.

Usa iba a replicar algo, pero entonces, Rusia lo alzó en brazos, y lo sacó fuera. Usa quería replicar, pero tenía un nudo en la garganta que le impedía hablar. Rusia se metió en la parte trasera del coche, con Usa en brazos, e Isania al volante. Rusia empezó a mimar a Usa, a darle besos, y decirle palabras de consuelo al oído. Pero Usa no las escuchaba. Su mente estaba bloqueada. No se dio cuenta de cuando llegaron al avión privado. Recordaba vagamente a Sayon esperándoles al volante del avión. Sayon era el hermano de Isania. El tercero, y el único chico. Isania le decía algo a su hermano, y Rusia le seguía teniendo en brazos. Entonces, cuando aterrizaron, Usa reaccionó. Se soltó de los brazos del ruso, y corrió hacia la puerta del hospital, donde estaba su hermano. Lo primero que vio al abrir, fueron a Francia, acompañada de la italiana. A Uk, acompañado del español, con ellos, estaban sus hermanastros; Edric y Mateo. También estaban Australia, y Nueva Zelanda. Bielorrusia también estaba con ellos, consolando a Nueva Zelanda, y a Ucrania, que lloraban a lágrima viva. También estaba México, que parecía un poco pálido... Resultó que el mexicano había sido quien había encontrado el cuerpo de Canadá.

Usa no se paró a hablar con nadie. A pesar de las protestas y preguntas que le hacía su familia, Usa abrió la puerta que tenía delante de golpe.

Y casi se desmaya.

En ella, estaban OMS, hablando con ONU, y, con ellos, Ainesu, la segunda hija de ONU, revisando unos datos médicos.

Y en la camilla, estaba su hermano.

Canadá estaba lleno de grietas, con la piel completamente blanca, y los ojos cerrados. Por alguna extraña razón, sonreía.

-Usa...-dijo ONU al verlo entrar-Respira hondo...-dijo acercándose al americano. Este retrocedió-Vale, escucha, tienes que calmarte, y... ¡Usa!-exclamó.

El americano acababa de desmayarse.

-Estrellita...-dijo una voz, por encima de Usa. Una voz que cada vez se escuchaba más clara-Estrellita... Usa... despierta...

El estadounidense abrió los ojos. Estaba en el suelo, en brazos del ruso, apoyado en su pecho. A su alrededor, Zelanda y Australia lo miraban preocupados. Usa hizo amago de incorporarse.

-Ve despacio-le advirtió Ainesu-Te has desmayado por el shock-le tendió un vaso de agua, pero Usa lo rechazó.

-C-Canadá...-fue lo llegó a murmurar, en brazos de ruso-C-Canadá e-está...

Australia y Zelanda no dijeron nada, pero se arrodillaron junto a su hermano, abrazándolo.

Usa murmuraba por lo bajo "No, no, no, no", una y otra vez. Quería que todo fuese un sueño. No podía ser verdad... Canadá no estaba... No podía estar...

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Muerto...


Five Stages of Grief -Usa-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora