Mi destino (omegaverse)

16

El omega acariciaba ahora las dos manos de la alfa y de la nada empezó a reír un poco.

— ¿qué sucede?

— nada, solo recordé algo junto a mi lobo — su sonriso se amplió más notándose esos hoyuelos de nuevo

La alfa dejo que el omega tocara su mano, además no es nada malo, sus ojos veían el jardín tan bonito hasta que sintió un dolor por todo su cuerpo.

Julia aléjalo, estamos entrando en celo

Esto la alerto, quito sus manos bruscamente para luego alejarse de él e ir a la ventana, respirando todo el aire que sea posible con tal de no oler ese dulce olor del omega.

piensa en cosas bonitas

— alfa ¿está todo bien? — la vio respirar rápido uno y otra vez — alfa

cálmate, todo va a estar bien, yo puedo tranquilizarme

— alfa

El aroma de tierra mojada y pino se mezcló con el aire, llegando a la nariz del omega, el celo de la alfa había llegado, el lobo del pequeño quería ayudarle y el también.

— enciérrate en el baño y no salgas hasta que nos saquen de la habitación — su voz estaba algo ronca, si ella entraba al baño se volvería loca por el olor del omega, era mucho más fuerte que el de un omega normal

— te puedo ayudar alfa — era consciente de lo que decía

mierda Julia, no podre esta vez controlarme

— Gael, por favor enciérrate en el baño —hace una mueca de dolor — por favor, no quiero lastimarte

— pero alfa

— no soy tu alfa — hablo un poco bajo

En cualquier momento perdería la poco cordura que le quedaba, tenía que calmarse si no quería hacer una locura ahora.

— alfa — el omega soltó su aroma llegando a la nariz de la mayor

Ese aroma verdadero de galletas recién orneado era delicioso, sintió un dolor en su zona baja viendo un bulto en ellos, unas pequeñas manos le abrazaron con fuerza.

— omega

Sin esperar más tiempo se separó del abrazo con un poco de fuerza y miro al omega para luego besarle con intensidad, sus manos rodearon la pequeña cintura del omega para elevarle un poco, logrando que él colocara sus piernas alrededor de ella.

Ese beso era con intensidad, con cuidado lo llevo y recostó con suavidad en la cama al omega, como si de algo frágil fuera y que en cualquier momento se rompería

Por falta de aire se separaron un poco y se vieron con atención, sus respiraciones eran agitadas y un pequeño hilo de saliva los unía a ambos.

— ah — sus mejillas estaban sonrojadas y esa pequeña boquita estaba entre abierta

— mi omega

Otra vez se besaron, las manos de la mayor querían recorrer su piel por debajo de ese polo del omega, pero se detuvo para luego separar solo un poco del beso.

— ¿puedo? — pregunto al omega

— sí, solo hazlo pero no me dejes, prométeme estar a mi lado, no importa si no nos conocemos quiero estar contigo — sin más que decir beso a la alfa siendo correspondido

Sus brazos del omega se enrollaron en el cuello de la alfa haciéndolo más profundo el beso, mientras ella recorría todo el cuerpo del omega con delicadeza, el beso bajo hasta el cuello de Gael mientras daba pequeños suspiros