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El bello omega de piel blanca y ojos ámbar se levantó al sentir algo húmedo en su cuello y pequeñas cosquillas.
Al abrir sus ojos solo vio el cabello de su alfa chocaba a su rostro

— alfa — acaricio el cabello suave de la chica

— hola mi pequeño — susurro cerca de su oído para luego lamer un poco

Se separa de ese lugar teniendo sus mejillas sonrojadas al igual que el chico.

— vayamos a almorzar — beso la punta de su nariz — tienes que estar saludable omega

Se aleja de él sentándose aún lado de la cama, estirando sus brazos después de dormir un poco.

— mala — hace un pequeño puchero, mientras se levantaba de la cama y le abraza por detrás — quiero hacerlo de nuevo alfa — froto su mejilla con la espalda de la chica

— es mejor ir a comer pequeño — acaricia las pequeñas manos que le abrazan

Todo era tranquilo hasta que la puerta se abrió de golpe, asustando a la pareja.
La cara del alfa era tenebrosa para el omega pero no para su destinada, eso era normal en alfas.

— distanciamiento en ustedes dos — se acercó a su hijo y le separa a la fuerza de la alfa — no me robaras a mi pequeño

— buenas tardes — se levantó hasta estar al frente del señor o más bien dicho su futuro suegro si es que le acepta

— buenas tardes — le mira de pies a cabeza — ni creas que me lo quitarás

— le pido hablar entre alfas, por favor

— hijo retírate — suelta a su hijo — prometo no hacer nada malo a "esa" alfa — hace una mueca de desagrado

No le quedo de otra que irse, no sin antes dejar un beso en el cachete de su amada para irse corriendo y después detenerse con las mejillas rojas.

— Gael sígueme — apareció el padre de Julia asustando le

— si — su corazoncito palpito fuerte

Caminaron hasta ir de nuevo al jardín e ir a la misma mesa donde estaban antes, solo que más arreglada teniendo un pequeño florero.

Se sentó en una de las sillas vacías siendo imitado por el otro.
Sus piernas los movía de un lado a otro, tenía miedo de que lo haría a su amada.

— tranquilo — mira el jardín

La palabra "tranquilo" es fácil de decirlo.

Minutos después llegó el otro alfa sentándose en una de las sillas vacías.
La comida aún no estaba en la mesa, los empleados esperaban la señal para poder traerlo

— esperemos unos minutos más — mira su reloj — no les molesta ¿verdad? — pregunto el alfa viendo a al omega y al otro alfa que se sacaba la mascarilla

— para nada — su vos era muy gruesa, él es amado por muchos omegas — ¿puedes convencer a mi hija de ir a mi casa ? — miro al alfa

Gael solo los miraba en silencio.

— tal vez valla pero sin su omega — coloca una mano en sus cabellos

— ¿por qué?

— ahora Julia debe estar enterándose que él estudia en Nueva York y le falta un mes para terminar su carrera

Esas palabras le hicieron temblar un poco, ¿que pasaría si su padre le dice a su alfa que ya no lo vera? ¿O que me casare con otro alfa a la fuerza?

Sus ojitos se cristalizaron, no quería estar separada de ella, si es posible tendrían una relaciona distancia con tal de que ese mes pase muy rápido y estar de nueva con ella.

Mi destino (omegaverse)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora