Amalia
Después del escándalo que se armó por la foto de Asher y yo besándonos recibí una llamada que me sorprendió era el padre de Asher.
Llegue a la mansión de los Roths el señor ya me esperaba en el despacho, algún día todo esto será mío, no importa lo que tenga que hacer, pero yo seré la nueva señora Roths.
_ Señor, me sorprendió mucho su llamada, pero más lo hizo la curiosidad de saber que es eso tan importante que quiere proponerme
Me hizo un ademán para que tomara asiento ojee al señor Roths de arriba abajo no estaba nada mal si no logro quedarme con el hijo, no me importaría intentarlo con su padre.
_ Voy a hacer directo contigo, te voy a ofrecer mi ayuda para que puedas alejar a mi hijo de esa mujer un pase directo a lo que siempre has querido
Señalo todo a nuestro alrededor no pude evitar que una sonrisa se ensanchará en mi rostro.
_ ¿Que hacemos?
_ Déjame lo ami cuando tenga todo listo te voy a llamar para darte instrucciones por el momento no dejes solo a mi hijo ni un segundo y evita que la busque ya me enteré que dejo el apartamento es ahora cuando debemos aprovechar su debilidad
Asher
Me sentía como el mayor de los invencibles aunque no tenía la culpa jamás, debí aceptar la maldita invitación de Amalia, debí tomar en serio su amenaza, me sentía atrapado en un cuarto oscuro sin salida, pero ella le creyó a todos menos a mí.
Eso fue lo que más me dolió ver como confiaba en los demás, golpee la mesa del bar con tanto coraje que me sacaron deambule por las calles oscuras de la ciudad y termine no me pregunten como en la casa de Sarah subí el ascensor todos mis sentidos estaban confusos llame a la puerta no pensé que fuera abrir.
_ ¡Asher! ¿Qué haces aquí a esta hora?
Me miro con preocupación, pero aún podía notarla a la defensiva, mordió su labio inferior pensativa me puse tenso ante aquel movimiento que despertó mi virilidad y encendió el deseo que nunca se fue de hacer la mía.
_ Sé que mañana vas a odiarme por esto, pero ya no puedo más
La tomé del cuello y la jale a mí aplastando su boca con ferocidad, al principio intento zafarse, pero luego de unos segundos se rindió y se dejó llevar la empotre en la puerta, mis manos recorrieron su cuerpo con devoción solo podía sentirla sentir el deseo de amarla de cuidarla.
Ambos queríamos esto desde hace mucho tiempo la besaba con miedo a romperla, a que esto solo fuera una ilusión que se podía desvanecer de la nada.
Su cuerpo me llamaba con tanto anhelo como el mío le gritaba que se dejara querer.
Por hoy no habría pasado, no habría dudas, culpas, negación, esta noche solo existiríamos ella y yo.
_ Quiero curarte y quiero que tú hagas lo mismo conmigo
_ Solo esta noche
Le desnudé apreciando su hermoso cuerpo, era perfecta, aunque note algo que me dejo pensando en ella había marcado el dolor que por años la persiguió, pero lo deje pasar esta noche, solo quiero amarla.
Acaricie su piel era tan suave como la seda, cada rincón era mi hogar desde hoy desde que me introduje en ella confirme que jamás podría volver a tocar a una mujer que no fuera ella con cada estocada que daba borraba los recuerdos oscuros que guardaba que alejaba los demonios que le robabaron la felicidad con cada beso limpiaba su alma con cada mirada creamos recuerdos nuevos momentos que sepultaron tanto dolor.
Pego su frente a la mía y con lágrimas en los ojos susurro algo que jamás olvidaría.
Sus palabras fueron algo que guardaría solo para mí.
Sus caricias despertaban en mí sensaciones que no había sentido, jamás sus besos lograban hacerme volar al paraíso y su piel desnuda junto a la mía me bajaban al infierno, éramos un gran puñado de dudas, desconfianza, errores, deseos, que se acomodaban bien, pero que dolían como espinas clavadas en el cuerpo.
Nos perdimos en un inmenso cielo que ardía en llamas.
Sus demonios y los míos danzaban a nuestro alrededor en la oscuridad de la noche que nos abrazó mientras la hacía mía por primera vez.
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Jefe ¡Cuánto te Odio! (TERMINADA)✓
Romance"Sarah, una mujer que odiaba con todo su ser a su jefe, el engreído y mujeriego Asher, se vio obligada a fingir ser su esposa a cambio de un deseo que la haría olvidar su odio. Un matrimonio falso que se convirtió en un juego peligroso cuando el amo...