El Príncipe

101 9 6
                                    

Mi nombre es Mo Ran y soy el príncipe de un pequeño pero próspero país en China del Este. La historia que voy a contarles es sobre mí y como luche para hacer mi amor imposible, posible. Todo empieza con el príncipe Chu Wanning que pertenecía a un país vecino que ha estado enemistado con el nuestro durante siglos.

Todo comenzó cuando yo era un joven príncipe, apenas salido de la adolescencia. En una de las visitas de mi padre al país vecino, me llevaron con él como su hijo y futuro líder de mi país. Era una visita diplomática, por lo que tuvimos muchas reuniones y cenas oficiales con miembros del gobierno y la realeza vecina.

En una de esas cenas conocí a Chu Wanning. Era un joven apuesto, con el cabello oscuro y negro como cascada y unos ojos de fénix afilados de color miel. Era el hijo menor del rey aunque era mayor que yo por 3 años, note que Chu Wanning no parecía tener ningún interés en la política o el poder. En cambio, parecía más interesado en el arte de las máquinas, la música y la literatura. No pude evitar sentirme atraído por él y, para mi sorpresa, parecía que el sentimiento era mutuo aunque a él no le gustaba demostrarlo.

Pasamos mucho tiempo juntos durante la visita y al final de la misma quedamos en intercambiar cartas. Desde entonces, nos mantuvimos en contacto y nos encontramos varias veces en secreto para que nuestras familias no nos cachara. Cada vez que nos veíamos, mi corazón latía con fuerza y ​​me sentía feliz y vivo de nuevo, pero también asustado y temeroso de lo que nos podía pasar.

Nuestros países han estado enemistados durante siglos. No había forma de que mi familia, mi pueblo y mi gobierno aceptara que yo estuviera en una relación con alguien de un país que probablementen era enemigo y mucho menos siendo un chico. Era peligroso pensar incluso en ello. Si se descubriera, podría haber una guerra entre nuestros países.

Así que, con el corazón roto, me alejé de Chu Wanning de manera cobarde. Durante los siguientes años, traté de olvidarlo, pero nunca pude lograrlo. Me casé con una princesa de un país vecino llamada Song Qiutong, siguiendo las expectativas de mi familia y mi gobierno para no decepcionarlos. Pero nunca pude amarla de la misma manera que amaba a Chu Wanning.

Pero el destino nos volvió a unir. Un día, mientras estaba en un viaje oficial a un país neutral, me encontré con Chu Wanning por casualidad. Había estado viviendo en ese país por varios años, tratando de encontrar un lugar donde pudiera ser libre para ser quien era y vivir su vida sin la interferencia de su familia y de manera independiente, me di cuenta de que había abandonado su país luego de que su padre Huai Zui lo desterrara al enterarse que era manga cortada.

No sé cómo me atreví a pedirle que nos sentaramos a tomar un té y hablar durante un rato. Fue como si el tiempo no hubiera pasado y se hubiera detenido. Aún podía sentir que había una conexión fuerte entre nosotros y, de alguna manera, sabía que seguía amándolo, pero veía que él tenía sentimientos encontrados hacia mi y otros sentimientos que no podía descifrar. Él no dijo mucho, pero a pesar de eso pude sentir que mi corazón volvía a latir nuevamente, luego recordé que no podíamos estar juntos nunca, además de que yo ya me había casado, pero aún así quería tenerlo de manera egoísta a mi lado.

Nos despedimos al final y lo hice prometer que se manteniera en contacto conmigo y así lo hicimos, yo siempre era el que lo contactaba primero y él siempre trataba de evitarme, me sentía mal, pero sabía que no podía seguir así. No podía seguir sintiéndome atrapado en un amor imposible porque solo lo estaba lastimando a él y a mí al mismo tiempo en esta relación. Asi que decidí hacer algo que nunca antes había hecho. Decidí desafiar a mi familia y a mi gobierno por primera vez en mi vida. Decidí luchar por mi amor, decidí ser feliz.

Fue un camino dificil y lleno de obstaculos. Pero con la ayuda de algunos amigos cercanos como Ye WangXi y Nangong Si, también de algunos aliados en el gobierno y mi primo Xue Meng, logramos convencer a mi familia y a mi gobierno de que era manga cortada y de que estaba enamorado de un hombre desde hace unos años y lo había dejado ir por cobardía y me había casado por la misma razón, pero de que está vez estaba decidido a luchar por quien amaba y si no aceptaban no heredaría el reino, solo así aceptaron.

Cuando ví que aceptaron salí corriendo hacia donde había estado viviendo Chu Wanning y toque a su puerta, pero no abrió, quería decir muchas cosas, pero al final lo único que pude decir fue..."Wanning, préstame atención".

Pequeños Fanfics De ErhaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora