Capítulo 1

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un frío y nevado miércoles de enero, un joven comerciante con el nombre de Lee DongHae tocaba fondo. No estaba seguro de en qué punto, exactamente, pasó esto... pero sucedió. Pudo haber sido cuando salió de su vieja camioneta Ford por la mañana para hacer una carrera a la oficina de correos, sólo para descubrir que no tenía uno, sino dos pinchazos. O podría haber sido cuando trató de pagar por las reparaciones en el 'Auto Big John' y su tarjeta de crédito fue rechazada porque estaba por encima de su límite. Pero, probablemente, la gota que finalmente lo rompió, fue cuando regresó a la pequeña casa victoriana, de ciento treinta años de edad, que le servía de hogar y lugar de trabajo, para encontrar una nota en la puerta diciéndole que si no pagaba la factura de electricidad dentro de siete días, le cortarían el servicio.

Después de encontrar el aviso de desconexión, DongHae arrugó la hoja de papel amarillo en un puño y se quedó mirando el letrero de oro decorado con lunas azules, estrellas color púrpura, y las palabras 'Tienda mágica de Lee' colgado sobre la puerta.

—¿Y dónde está la magia cuando la necesito? —murmuró, sintiendo toda la tensión de los últimos meses pulsando sobre él hasta el punto en el que quería acostarse, aquí en el porche delantero, y llorar como cuando lo hacía siendo un niño pequeño.

No había habido mucha magia en su vida desde hacía bastante tiempo.

Había intentado, realmente intentado, mantener una actitud optimista, diciéndose a sí mismo que los problemas pasarían, que las ventas subirían, que todo estaría bien. Se decía que el sol saldría, así como cualquier otra frase falsamente alegre que conociera. Pero para DongHae, cada día se había vuelto más y más difícil ver el lado bueno de las cosas.

Las cosas habían ido cuesta abajo desde hacía meses en todos los frentes de su vida. Ni siquiera podía recordar la última vez que había pasado tiempo con amigos. Había gastado mucha energía en mantener a flote la tienda, o en preocuparse por mantener a flote la tienda, por lo que no había quedado mucho para nada más.

Aparte de los clientes, una charla ocasional con el empleado regular en la oficina de correos, y la vecina que vivía detrás de él, a quien ayudaba a salir de vez en cuando, él estaba más o menos por su cuenta. Parecía que cuanto más empeoraba el negocio, DongHae se aislaba más y más.

No es que con su pequeña tienda en la calle principal de la tranquila ciudad de Daegu alguna vez fuera a hacerse rico, aún en los mejores tiempos, pero por lo menos en el pasado siempre había sido capaz de pagar sus cuentas, comer, y salir de vez en cuando. Hasta el año pasado, había tenido una vida cómoda. Incluso los universitarios de esta pequeña ciudad liberal tenían una necesidad de volver a la naturaleza, conscientemente viviendo como paganos y metafísicos que amaban sus hierbas, aceites e incienso, dragones, elfos y hadas, pentáculos, Tarot y herramientas de adivinación.

Pero el triste estado de la economía nacional había levantado su fea cabeza hasta aquí, y las recientes ventas habían disminuido gradualmente a casi cero. Había intentado bajar los precios en general, hacer grandes descuentos para poder vender, e incluso se atrevió a ir él mismo a una feria local metafísica y hacer lecturas de cartas para conseguir algo de dinero extra. A pesar de todo, el pasado mes de diciembre, había sido su peor temporada festiva desde que había abierto la tienda.

Y, maldita sea, él necesitaba tener una temporada de unas buenas vacaciones. Si ni siquiera podía ganar dinero decente en diciembre, cuando la mayoría de la gente estaba dispuesta a gastar más, ¿cómo diablos iba a hacer la diferencia ahora?

El solo pensamiento lo hizo enfermar físicamente.

—Hola, DongHae.

Tomando una profunda respiración para defenderse del enorme nudo en la garganta que amenazaba con ahogarlo, DongHae giró lentamente hacia la acera. Descubrió una mujer menuda, anciana, envuelta en un abrigo de lana y una bufanda de color rosa chillón caminando por la acera cubierta de nieve, con su bastón en una mano y tirando de una cesta de compra en la otra.

El Elfo y el Zapatero adaptación EunHaeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora