Aprender a vivir de nuevo

7

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— Esto no luce bien... —

Aquellas palabras no ouedieorn evitar salir casi en un susurro de la boca del rey, fue el primero en levantarse y examinar al rededor luego de que ambos cayeran en esa extraña grieta, sin embargo no esperaba estar en un lugar como este.

MK no tardó mucho en ponerse de pie, había alcanzado a escuchar las leves palabras de wukong y por la forma en la que esta las dijo MK no pudo evitar preocuparse, dando un visado al rededor, el sitio era oscuro, alcanzaba a distinguir arquitectura antigua china y la luz que había era ocasionada por llamas verdozas, era un verde marino bastante perticular qué no había visto antes.

— Esto es?... —

Preguntó sin queré pedir una respuesta directamente.

— El Diyu. —

Confesó wukong suspirando preocupado.

— Espera! Estamos en el inf-!? —

— shh! —

Wukong cayó al joven poniendo un dedo sobre sus labios, en es lugar era mejor no pasarse de confianza, la última vez que había estado ahí se había comportado como un idiota para huir, borrando su nombre dle libro de la vida y la muerte... En ese momento daba igual, el mudnos seguía siendo relativamente joven y él estaba solo.

Pero las cosas definitivamente habían cambiado.

— No seamos ruidosos, lo mejor será tratar de no llegar la atención, hay que ver como salir de aquí... Este lugar está mucho más grande de lo que recordaba. —

Luego de eso se apresuró a emprender caminata sobre la ruta de piedra en la que estaban, el sitio aprecia abandonado, pero por supuesto que no lo estaba y lo mejor iba a ser irse lo antes que puedan.

Porque era bastante conciente de que si no salían de ahí en una semana entonces el Diyu reclamaría sus almas y ya no podrían escapar jamás, no quería arrastrar a mk a eso y él tampoco o quería quedar atrapado.

MK poe su parte sólo siguió a wukong de cerca, se mantuvo en silencio pero por supuesto admirando muy curioso su alrededor, era aterrador, se sentía solitario y muerto, pero a la vez era como si supieras que te estaban mirando y que con cada segundo ahí tu alma se volvía más pesada de cargar en tu cuerpo.

Sería una semana larga para ambos, sobre todo peo qué wukong y apenas recordaba por donde debería empezar a buscar, si no tenía cuidado mk podría terminar atrapado o siendo usado con fines de chantaje, por supuesto no quería permitir aquello.

Mei no había tenido más opciones que llevar a macaque con Tang quien hizo qué se lo terminarán llevando a sandy, pero realmente nadie sabía cómo ayudar al demonio.

Desde que mei lo había sacado de la montaña del fruto floral su mal estado simplemente se desvaneció, sin embargo luego de que la fatiga y el mareo pasarán por completo empezó la frustración.

Una fuerte, se la pata a pisoteando con sus patas traseras el suelo mientras chillaba por lo alto, como si le reclamará a alguien invisible, era obvio que quería a wukong y se sentía horrible por no saber por donde buscarlo, generalmente podía escucharlo, aunque fuesen sus latidos de manera muy leve, sin embargo ahora no escuchaba nada, ni lo más mínimo, cosa que era frustrante porque solo podía significar una cosa y no era buena.

Asi que inevitablemente se puso inconsolable rasguñando lo que se encontrará por frustración y llorando hasta que su voz se puso ronca.

Realmente el grupo no sabía cómo ayudarlo, mei trato distraerlo con comida con cosas coloridas, pero fue ignorada.

Tang intento consolarlo acariciando su melena y siendo suave con el pero macaque estaba muy estresado para prestarle atención.

Sandy por su parte tuvo una idea al notar que macaque no dejaba de mover las orejas y llorar frustrado.

Le extendió un peluche de wukong algo más hecho, qué dentro tendía una pequeña grabadora donde se reproducían latidos comunes.

Macaque al principio no presto mucho atención pero cuando vio el muñeco no pudo desprender la mirada del mismo.

Lo tomo con mucho cuidado, no quería dañarlo por supuesto y sentía que si lo agarraba con al menos algo de fuerza lo destruiría.

Sabía que no era wukong, pero era lo más similar qué tenía, ais qué todo lo que hizo fue dejar el peluche en una esquina para luego acostarse con cuidado, usando el objeto de almohada mientras pegaba su cabeza al pecho del wukong improvisado, sabía que esos latidos no eran los mismos, tenían un ritmo ligeramente diferente, pero era lo más cercano qué tenía ais qué al menos dejo de llorar a maneras para simplemente empezar a sollozar hasta quedarse dormido, muy dormido, nisiquiera había podido empezá bien su descanso porque lo interrumpieron en la huía de wukong.

Aunque ahora se sentía arrepentido de saber que lo había estado arrastrando a que durmiese con el aun cuando wukong se intentaba soltar.

Solo esperaba que no estuviese tan molesto por eso y regresar, al menos para poder escucharlo vivir su día a día, era relajante saber que de alguna forma lo tenía cerca ya que nunca solía irse de casa y cuando lo había solo intentaba seguirle el paso con sus oídos.

Incluso cuando simplemente tiene una pesadilla y Mac lo sabe, le gusta porque sabe que basta con subirse al lado de wukong y acostarse encima del mismo para relajarlo.

Le daba una extraña seguridad de protector, como si lo estuviese protegiendo mucho constantemente siendo que viven juntos.

El grupo no sabía lo que pasaba por la mente del mono, solo estuvieron más tranquilos al ver que el invento de sandy funcionó de alguna manera pues macaque parecía más quieto, aunque melancólico, tendrían que pensar en cómo ayudarlo antes de que quisiera escapar para buscar a wukong por su cuenta, no podían dejar que se arriesgara así mismo en ese estado.
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