El chico de la ventana

Ⅰ

Entonces fue cuando le vi.

Un guapo chico de estatura media alta, piel bronceada a la perfección, un pelo castaño similar al mío pero el suyo estaba ondulado y perfectamente alborotado coronado por una gorra roja. No alcance a ver sus ojos.

Estaba de lado, parecía estar mantenido una conversación con una tercera persona, pero no puedo confirmarlo.

Y como si de una película romántica se tratara se giro hacia la ventana, y entonces sucedió.

Nuestros ojos se encontraron, eran marrones, pero era un marrón precioso.

De mis labios escapo una leve sonrisa al igual que de los suyos.

Yo me quede ahí parada contemplándole como si de la mona lisa se tratara.

Mientras que él estaba quieto mirándome sorprendido pero a la vez alegre de podernos ver cara a cara.