La mirada de Antonela se enfocaba en él, Guillermo solo entró al salón y escogió uno de los asientos de atrás, a estas alturas prefirió guardar distancia con la argentina, a su lado se encontraba el hombre que conoció ese mismo día, Cristiano, quien al igual que Riccuzzo, no le quitaba la mirada de encima.
—Hey—le llamó su nuevo amigo—¿hiciste la tarea?
—Sí, ¿por qué?—respondió Memo.
—Porque yo no—carcajeó.
—Descuida, solo era leer un artículo y elaborar el resumen en inglés.
—Ok, déjame leerlo—agarró el cuaderno del mexicano.
—No creo que te dé tiempo de terminarlo todo, no tardará en llegar la profesora y…—tal y como mencionó Ochoa, la profesora entró al salón.
La mujer los observó fijamente y señaló a Cristiano, le pidió que pasara enfrente y diera un resumen del artículo que leyó. Él asintió y se levantó del pupitre, seguro de sí mismo y se impuso frente a sus compañeros. Sus palabras eran fluidas y sin problemas explicó el artículo que hasta hace unos momentos leyó en la libreta de Guillermo. El rizado estaba sorprendido de la exactitud con la que Ronaldo recordó cada palabra.
Al finalizar, la profesora preguntó si alguien más deseaba pasar, Memo levantó la mano, su objetivo del primer día era el mismo; ser el mejor de su clase, no por él, no por sentirse superior a los demás ni por alimentar un ego que innecesario, su motivación verdadera era únicamente su bebé, y nadie más que él.
Aquella pequeña e indefensa criatura que se gestaba en su vientre. Se supone que Guillermo le daría vida por medio de la suya, pero él lo sentía completamente diferente, fue su pequeño quien le dio vida cuando él sentía que estaba muriendo por dentro debido a la traición del hombre que fue como su aire, Lionel Messi. Entonces, tenía que regresarle ese favor siendo el padre que se merecía.
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El aroma de un buen café se esparció por el lugar, estimulando los bulbos olfativos del argentino, de inmediato recordó que no había desayunado debido a la ausencia de Javier en la cocina, por lo tanto, ir a la cafetería de la Universidad no fue mala idea, sacó su teléfono y releyó las conversaciones anteriores con el mexicano, agradecía que la cafetería estuviera relativamente vacía, era muy temprano y casi todos estaban en clase.
De este modo podía sentir tranquilidad de no ser visto por ninguno de sus compañeros, cubrió su rostro y dejó salir esas lágrimas que deseaban brotar desde hace semanas, esas lágrimas que le quemaban por dentro y eran su cruel recordatorio de que no supo cuidar de un buen amor. De esos amores que marcan el alma y no se repiten dos veces.
Porque no se puede ser tan afortunado dos veces en la vida.
El releer esas conversaciones fue un digno castigo, sin embargo, quería volver al pasado y encontrarse con aquel lindo hombre de cabellera rizada, con su voz dulce que le decía cada noche que pasaban juntos: "Te amo", el te amo más puro que jamás en su vida pudo escuchar, ni siquiera su padre alguna vez le dijo un te amo tan sincero.
Guillermo era la tranquilidad en su tarde de tempestad, pero ahora se estaba ahogando en esa tempestad que él mismo creó. Sólo deseaba reunir la suficiente fuerza para seguir con lo que él se propuso cuando puso en una balanza la estabilidad de su familia o el amor del rizado.
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Entre Lágrimas [MESSI X OCHOA]
FanfictionGuillermo Ochoa es un joven de 22 años que salió de México para ir en busca de su primer gran amor, esa persona sólo lo engañó y dejó a su suerte en Argentina, un país totalmente desconocido para Memo, para su buena o mala suerte, encontraría trabaj...