7- Invitado

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James se sentó en la mesa mientras era apuntado por Howard.
-Sientate, es el mejor corte de carne. Deberias probarlo.

Howard sonrió sinicamente.
-Esperas que baje la guardia verdad?

James se sirvió un poco de vino y empezó a comer.
-No, sería una pena desperdiciar la comida.

El hombre se sentó pero no dejó de apuntar a James, sacó un documento de su abrigo y se le entregó.
-Ten, firma y me voy.

El joven lo miró, tomó el documento y mientras bebía vino, leyó el documento.
-Interesante, quieres que firme un contrato donde me das el 20% de las ganancias, con mi hotel, mis empleados y mi remodelación? Es complicado...

Howard cargó el arma.
-Es eso o te mato. Nadie sabe que estoy aquí, sería solo un caso de asalto.

James suspiró.
-Si firmo, puedes matatme y quedarte con todo. Asique no es una garantía.

-Soy un hombre de palabra, ya está firmado lo mio.

James rio mientras se terminaba el vino.
-De palabra, y estas aquí apuntandome con una pistola. No firmare.

Howard se levantó de la silla enojado, apunto a James a la frente.
-Entonces moriras.

En ese momento Howard sintió un pinchazo en la espalda, frunció el seño y sintió otro.

Se giró y Crista estaba con un picahielo en la mano, lo había apuñalado en el pulmon, dos veces.

James esgaba sorprendido, pero antes que hiciera algo, tomó la pistola de Howard y Crista, aprovechó de apuñalarlo en el cuello. Ina, dos, tres veces hasta que el hombre se arrodilló desangrandose.
-Maldita puta.

James le apuntó a la cabeza y le disparó.

La joven estaba cansada pero se acercó a James corriendo.
-Estas bien?

El joven le tomó la cara con ambas manos y le besó la frente.
-Tranquila, no es nada.

Crista sonrió, miró el asienro de James y tenía una navaja escondida en su bastón. Por lo visto igual iba a atacar al hombre.
-Que haremos?

James sonrió.
-Ocultar el cuerpo.
James buscó una soga entre sus cosas, la amarró a los brazos del cadaver y Crista lo ayudó a empujarlo.
Pasaron por el pasillo hasta la puerta de la ropa sucia, ahí ambos levantaron el cuerpo y lo lanzaron.
-Crees que lo encuentren?

El joven rio.
-No, nadie va a ese lugar. Se va a pudrir y desaparecerá con el tiempo.

La joven miró a la puerta y luego sus manos.
-Tengo miedo.

James le hizo cariño en el pelo.
-No nos atraparan.

-No es eso... me sentí bien al matarlo.

Crista miro a James quien estaba sorprendido y sonrió.
-No te preocupes, es normal.
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.
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Hazel y Olga estaban en el piso a una esquina del salón mientras los hombres las apuntaban con armas.
-No deberían ir a ver a su jefe? Está tardando más de lo normal.

Uno de ellos le pegó una cachetada a Hazel.
-Calla o te mato.

Olga rio.
-Creo que su jefe murió, el señor March tiene bastante experiencia en eso.

Los tres hombres se miraron, hasta que uno dijo.
-Yo iré a ver.

Cuando iba caminando hasta el elevador, James salió de ahi y le disparó en la cabeza.

Los otros estaban helados y James aprovechó esto para dispararle a ambos en las piernas.

Hazel y Olga les quitaron las armas.
-Señor March, sabía que estaba bien.

Crista estaba detras de él.
-Estan bien?

Ambas quedaron sin voz cuando la vieron manchada de sangre, Hazel miró a James y este se encogió de hombros.
-Esta vez no fui yo.

Los hombres se quejaban de dolor en el piso, y el joven les dijo a sus sirvientas.
-Hagan lo que quieran con ellos, con tal que no salgan de aquí.

Las dos se miraron y arrastraron a los hombres hasta la habitación de ambas mientras estos gritaban.
-Que crees que hagan?

James suspiró.
-No me importa.

Crista le tomó la mano a James.
-Me alegra que estés bien... ese hombre era malo, lo conocí cuando tenía 15 años. Creo que necesitaba vengarme.

James la miró y entendió, era el hombre del que le habian hablado. Apretó los puños y se enojó.
-Mierda... pude haberlo matado de otra forma, no tan rapido.

-No...así estuvo bien.

Crista caminó hasta un sofa y se sentó en él. James la siguió, busco un cigarrillo en su bolsillo y lo encendió.
-Creo que mi idea de expandir mis negocios a londres fracasó.

Crista cerró los ojos y miró al techo.
-Tienes su firma y huella, puedes hacer lo que quieras con ese documento.

El hombre dejó de fumar y miró a la chica. Era verdad podia poner esa pagina en cualquier otro documento, incluso podría hacer que todo lo que era de Howard, fuese suyo.

Se levantó rapidamente.
-Eres brillante Crista.

James caminó a paso firme hasta el elevador mientras ella seguía descansando, mirando al techo.
-10.

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Our Past  (James Patrick March)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora