26. Luna de miel

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Askada y Nami me forzaron a aceptar esto, no estoy muy satisfecha porque sé que han hecho algo mal o al menos sospechoso. Han preparado mi maleta para la "luna de miel" y mierda, parece que cargaron lo de un año.

La casa que hemos rentado es enorme, diseñada por uno de los mejores arquitectos del mundo y aislada en algún punto de la selva, una total fantasía.

No digo nada... me siento inusualmente cómoda a pesar de estar sola en una casa en medio de la nada junto a una de las personas más letales del mundo.

—¿Qué miras?— pregunta Chrollo rodeándome con sus brazos desde atrás, recargando su cabeza sobre mi hombro.

Lo miro de reojo, comienzo a arrepentirme de venir a este lugar... en realidad, no... Le levanto una ceja, obviando mi respuesta, pero al final decidiendo contestar.

—La tierra, ¿sabías que soy capaz de observar a detalle las hormigas desde un segundo piso?— pregunto irónicamente.

Él no se inmuta, simple y sencillamente me da un beso en la mejilla. Yo suelto un suspiro... joder, es verdad, le gusta esta parte de mi personalidad.

—Solo miraba a Venus, hoy resplancece de una forma notablemente especial— respondo, muchas veces puedo pasar minutos e incluso horas observando cosas concretas, pensando en cualquier cosa.

—Es verdad— responde —. Por cierto, _______, ¿quieres mirar algo? Hay muchas películas en el mueble del televisor— cuestiona.

Asiento con la cabeza.

—Vamos— le respondo casi en un susurro.

Escogemos una película al azar, literalmente las entendemos en el suelo de la sala y señalamos alguna de ellas sin ver. No sé si nuestra elección final me convence, pero le daremos una oportunidad.

Ponemos el filme y comemos algunos bocadillos que hemos traído, nada muy elaborado. Esta vez estoy un poco cansada, por lo tanto me recuesto sobre sus piernas, sin mirarlo, tan solo usando aquella parte de su cuerpo como accesorio si podemos decirlo de alguna forma, por el momento aún me incomoda siquiera tener su cara cerca bajo estas condiciones: en este lugar, en este momento, siendo lo que es.

La película comienza, los planos son bonitos y la música me encanta, probablemente es aquello que más capta la atención, la historia... es un drama.

Un par de hombres que comienzan a quererse. Uno que lo acepta al instante, el otro que se muestra reacio, que tiene miedo, que lucha por ocultar lo que siente pero que al final ama con locura a su contraparte a pesar de ni siquiera estar seguro de si lo que siente por él es solo algo físico, algo pasajero o peor que eso... un error.

Me atrapa, no creí jamás que una historia de este tipo pudiera gustarme. Y soy como él, soy como Enis, tengo miedo, amo al hombre que tengo al lado pero no puedo decirlo abiertamente por eso, incluso me ha costado admitirlo... la gran diferencia es que yo he podido casarme con él y vivir a su lado, que no es necesario que nos ocultemos.

Miro a mi marido, está tan atrapado como yo, se mira tranquilo y mientras transcurren los minutos, acaricia mis cabellos.

La película termina, es un final agridulce con predominancia agria... Jack muere y Enis... Él acepta su pleno sentir, extraña al que fue el amor de su vida y simplemente lo recuerda como lo más bello que le pasó.

—¿Te gustó?— pregunta Lul, con esa sonrisa a medias que lo caracteriza, sin mucho movimiento en un volumen adecuado, como si buscará hacer de mi vida una expectativa cómoda y placentera.

Lo miro con un gesto aburrido que no refleja mis pensamientos y asiento con la cabeza.

—Ven, ¿quieres salir a caminar?— me pregunta, yo niego con  la cabeza, solo quiero descansar un poco.

AKUMA NO GUNTAI. ᶜʰʳᵒˡˡᵒ ᴸᵘᶜⁱˡᶠᵉʳ ˣ ᴸᵉᶜᵗᵒʳᵃDonde viven las historias. Descúbrelo ahora