⇢ 𝑫𝒂𝒅𝒅𝒚 𝒊𝒔𝒔𝒖𝒆𝒔 -- 𝑯𝒂𝒊𝒕𝒂𝒏𝒊𝒔 -- 𝑺𝒂𝒏𝒛𝒖

✿ 20 ✿

Advertencia ; escena subida de tono.

• • •

∷ Era media noche, me levanté camino a la cocina por un vaso de agua dejando a Ran en la cama, abrí el refrigerador y me encontré con una malteada. Mi favorita... Por supuesto que la tomé.

No era por ser convencida pero estaba casi segura que era para mí.

Así que en vez de tomar un poco de agua me dispuse a consumir de ese vaso.

--- ¡Mierda, me asustaste! -dije precionando mi pecho-

"¿Qué tiene Haruchiyo con llegar siempre por detrás y de manera desprevenida?"

--- Lo siento... -dijo con una leve sonrisa, acarició mi cabello mientras yo tomaba del popote- ¿Estás bien? Noto tus ojos rojos, ¿Estuviste llorando?

--- Sí, pero no es la gran cosa. -respondí, no valía la pena mentirle-

--- ¿Segura? -preguntó, yo asentí- bien, igualmente sabes que le parto la cara a cualquiera.

--- No creo que sea necesario. -reí a lo alto, después bajé la voz por las altas horas de la noche- tomo esto y regreso a la cama.

--- ¿Quieres que te acompañe? -preguntó con gentileza e ilusión, yo negué-

--- Estoy durmiendo con Ran... -desvié mi mirada con timidez, sorbiendo el líquido- otro día estará bien...

--- Oh, ya veo... -trató de no hacer notar su enojo- igualmente ya me iba, solo vine a verte.

--- ¿Dormida? -pregunté incrédula, lo ví asentir con una sonrisa-

--- Con verte de lejos me basta.

∷ Seguí hablando unos minutos más con Haru, por accidente en un ataque de risa tiré un poco de la malteada al suelo. Entonces me dispuse a limpiar con una servilleta.

Igualmente no había sido para tanto.

Me dirigí al basurero para tirar el papel.

--- ¿Y ésto? -tomé el ramo de flores, se encontraba al lado del basurero en la caja de reciclaje- ¿Por qué está junto a la basura?

--- Olvidé tirarlo, es que no cabía en la basura porque el contenedor es muy pequeño... Lo iba tirar fuera. -dijo con ciertos nervios- se equivocaron de entrega.

• • •

"Para ___, con amor.♡"

• • •

--- Pero sí aquí dice mi nombre. -fruncí mi ceño, él lo hizo igual- dime la verdad Haruchiyo. ¿Las tiraste a propósito? -lo señalé con el mismo ramo de rosas blancas- responde.

--- No lo tiré. -cambió su argumento, yo lo miré ofendida- ni siquiera se de dónde salieron.

--- Hace un segundo me dijiste algo completamente diferente.

--- No es cierto, jamás lo dije.

∷ Por un momento pensé si era cierto lo que yo decía.

"¿Y si entendí mal? ¿Estaré delirando?... No, no creo."

Esta vez no planeaba caer en sus mentiras.

--- ¿Por qué siempre tiras lo que me regalan? -lo encaré, lo ví fruncir su ceño con molestia. Su mandíbula se tensó- los chocolates, las flores, los peluches, las cartas. ¿Por qué? ¡Carajo, dímelo Haruchiyo! -suspiré angustiada, restregando mis palmas en el rostro- ¡crees que no me doy cuenta!