secreto

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La mañana fue como cualquier otra. Con un bello cielo azúl, decorado con nubes tan esponjosas, que con solo verlas, me provocaron sueño.
Flores de distintos tamaños, formas & colores, me tenían rodeada, mientras jugaba en el jardín de padre, escuchando a lo lejos el zumbido de las abejas, quienes volaban de flor en flor, además de pequeñas mariposas blancas revolotear frente a mis ojos.

Acostumbraba a jugar en aquel jardín, ya que escondido por las mismas plantas, se encontraba un lugar. Uno mágico a mi parecer.
Era igual que un bosque, donde criaturas fantásticas viven en completa tranquilidad con la naturaleza. Con enormes piedras formando pequeñas & oscuras cuevas, con vegetación & hongos creciendo en ellas.

Era tan místico que no deseaba alejarme de ahí.
Cada día, iba a jugar a ese lugar con la esperanza de poder encontrarme con un hadita, un elfo o un duende, sin malas intenciones, claro.

Hice esto por años, hasta que lamentablemente, crecí.
Dejé de frecuentar aquel lugar por falta de tiempo & de ganas, sin embargo, cada vez que paso por ahí, me quedo observando cada rincón de este, deseando con todas mis fuerzas que de alguna de las tantas cuevas, salga volando un hadita o algún duende venga a buscar un nuevo bastón...

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