Inocencia profanada.
《— Shhh tranquila cachorrita, nada malo te pasará — acariciaba a la pequeña loba asustada. — No tengas miedo, no de mí, te prometo que después de hacer esto sentirás una maravillosa sensación casi adictiva para tu cuerpo. 》
— Shhh tranquila enid, todo estará bien — La aprisiono con su cuerpo e inevitablemente las lágrimas cayeron — no llores, te prometo que te haré sentir bien, no tengas miedo, no de mí.
Aquellas palabras fueron las mismas del pasado, no cambian, la manera de decirlo es la diferencia, pero su significado sigue siendo el mismo.
— Por favor no merlina — el miedo agita su corazón, amenazando con salirse de su pecho.
Sus súplicas no son más que basura que no le da importancia a lo que ella diga o sienta, solo sabe que tiene ganas de ella y no dudara en aprovecharse de su debilidad y cariño por ella como hace años atrás, un recuerdo golpeo su mente:
- No mer, me haces daño - decía una niña rubia quien intentaba alejarla de sus piernas.
- Shhhh, vamos lobita cálmate, la vamos a pasar bien. - Decía una Merlina desnuda abriendo las piernas de la niña debajo de ella descubriendo su sexo, rosado y tan hermoso, no dudo mucho bajar hasta sus piernas y pasar su lengua por allí.
Enid para nada disfrutaba de eso, sabia en sus adentros de que lo que hacía Merlina estaba muy mal, no tenía la suficiente fuerza como apartarla de su cuerpo, la mayor disfrutaba tanto hacérselo que no le importaba lo que la rubia sintiera, dejo de lado de besar su flor para posicionar su miembro dentro de ella ¿iba en serio a penetrarla con tan solo 6 años de edad? Lastimosamente que sí.
Entro en ella con fuerza y Merlina soltó un suspiro al estar dentro de ella, su flor era tan apretada que hacía que tuviera que moverse con algo de brusquedad, la pobre niña solo lloraba del dolor mientras que su mayor encima de ella lo disfrutaba.
- Cálmate enid, pronto te acomodaras a ello - decía la causante de su dolor, se movía tan brusca que sin darse cuenta hizo sangrarla de su parte intima, se estaba cogiendo a un cuerpo no desarrollado ¿qué clase de enferma haría eso? Merlina, era la peor sin duda.
Con cada embestida que le daba aumentaba su velocidad dándose el mejor placer que nunca antes había experimentado, las lágrimas de la menor caían sin cesar, estaba sufriendo a manos de una persona que jamás pensó que la iba a lastimar, su adorada Merlina la estaba masacrando ahí abajo.
- ¡Arg! ¡Si! ¿Dime te gusta? - Pregunta la cínica que la está lastimando por dentro.
- ¡DEJAME! - Le grito la niña empujándola un poco puesto a que es solo una niña y no puede defenderse bien de su captora.
Merlina la sujeta de sus mejillas y la obliga a verla a los ojos - ¡Escúchame enid! ¡No me importa lo mucho que te esfuerces para zafarte de mí! - Enid no podía verla a los ojos, no con lo que le estaba haciendo - ¡Mira carajo! - La tomo con fuerza - ¡Los de tu raza solo para esto sirven! - empujo con fuerza su pene dentro ella - ¡A partir de ahora eres mía! ¡¿Lo entiendes?! - Pregunta sin importarle su dolor o sus sentimientos.
Sin importar cuanto intente luchar siempre perderá, porque es un Addams y los Addams siempre ganan. Tomo su cuerpo juntándolo con el de ella mientras empujaba más duro dentro ella, no iba a poder soportarlo más cuando de una empujada más la sentó bien en sus adentros causando que liberara toda su semilla dentro de su interior, la niña podía sentir como en el interior de su cuerpo era llenado, eso le causo asco queriendo vomitar, Merlina al ver esto la jalo de sus cabellos estampando sus labios gruesos con los de ella, metía su lengua dentro de su boca, era un beso rudo y asqueroso que Enid no pudo responderle, no importaba si lo hacía o no porque de igual manera ella sabía que la adulta tenía el control. Se alejo de ella dejando un hilo de saliva notorio solo para reírse en su cara, era tan enferma, tan cínica, tan asquerosa que no puede hacer nada ante ello, esa fue la primera de muchas violaciones sintiéndose tan impotente.
Fin del recuerdo.
Enid estaba consciente de lo que iba a pasar ahora si se dejaba que la mayor la tomara nuevamente, ya no era una niña a la que le profanaron su inocencia, ahora era una adolescente que con todas sus fuerzas agarrón a la mayor del cuello ejerciendo presión.
Y como por primera vez en mucho tiempo dijo:
- NO - La aventó al otro extremo de su cuarto, merlina cayo con enojo recuperándose, la miro como la primera vez que la capturo, inferior a ella.
- Jajajaja - se ríe ante su espectáculo - ¿Qué es esto enid? ¿Te estas revelando? ¿Hasta cuándo entenderás que no puedes escapar de mí? Te lo he dicho muchas veces y parece que no entiendes.
- ¡Antes no podía defenderme de ti! ¡Pero ahora sí! - Dice con rabia - Me violaste merlina.... ¡TU ABUSASTE DE MI CUANDO SOLO ERA UNA NIÑA NO DESARROLLADA! - Le grito al mismo tiempo que sus lágrimas caían sobre su mejilla - ¡No te importaron mis sentimientos! - Decía tragando grueso.
Su cuerpo le temblaba conteniendo su rabia, la pelinegra solo puede reírse en su cara como siempre contestandole con un:
- Tus sentimientos siempre me importaron ¿no recuerdas cuando te besé después de que hice al amor contigo? Yo no puedo entender enid porque te enojas y lloras cuando sé que en el fondo te encanto - hizo una pausa para saborearse los labios - Ustedes solo sirven para esto, solo sirven para pelear y para aparearse, yo no veo nada malo en educarte mientras que al mismo tiempo te follo ¿tu si enid? ¿Lo ves mal en eso? Porque yo no y tal vez tengas razón en eso, que no me importen tus sentimientos más que mi placer mismo.
Enid mira detrás suyo viendo que hay una ventana y sin dudarlo se aventaría en esta.
- Oh no maldita perra ni lo intentes -amenaza la gótica.
- ¿Oh si qué? - Pregunta preparándose para atravesar la ventana.
- Si lo haces, te juro que te castigare de la peor manera que existe, te voy a amarrar y te voy a violar muchas veces hasta que entiendas que no puedes huir de mi - se va acercando peligrosamente cuando la rubia solo suspira limpiándose las lágrimas.
- Atrápame si puedes, ¡perra! - Sin dudarlo atraviesa la ventana ocasionando que se lastime con vidrios incrustados en su cuerpo, eso no le importa y al caer trata de levantarse como puede para tratar de correr con una pierna lastimada.
La pelinegra solo puede observarla con ira y hace lo mismo que ella al saltar solo que esta cae de pie azotando un poco el suelo, y se va caminando hacia la rubia sin tanta prisa, sabe que esta lastimada y no puede ir muy rápido.
- No puedes ni siquiera correr - dice estando un poco cerca de ella - será mejor que te detengas sinclair - ordena y esta no le hace caso y solo sigue sin mirar atrás cuando siente las manos de la Addams tomar su cabello y jalarlo para mirar por el rostro.
- Te dije que te pasaría lo peor si intentabas escapar.
La suelta y la empuja cayendo al piso donde hace lo peor.
- Ahora ya no intentaras escapar por un buen tiempo, maldita loba.
Dice rompiéndole la pierna.