Una esposa joven ━━━ [¡Padre, no quiero casarme!]

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"No puede ser, la señorita Ariadne está embarazada"

"Es verdad, mira su vientre y el seguro"

"Es enorme, parece tener cinco meses"

Jubelian también posó su vista en el estómago de la joven hija del marqués, la cual no ocultaba su embarazo a nadie.

Trae un vestido blanco de hombros descubiertos y algo ajustado, aunque no tanto para sofocarla pero si para qué se notará su estómago redondo.

Jubelian se sorprendió al ver que Ariadne la volteó a ver. Sus ojos de color lavanda era tan hermosos, como los recordaba ella.

Inconscientemente, Jubelian le sonrió haciendo que la joven se sorprenda ante ese gestó y luego noto que su vista cambio a su padre.

El cual no dejaba de ver el vientre de la joven embarazada pero esa vista fue cubierta por el joven marqués que la tomo de la mano para caminar hacia el emperador.

Todos los invitados deben de prestarle sus saludos al emperador del imperio. Así que se acercaron a él e hicieron reverencia.

"Erick, que sorpresa que asistas a estos eventos después de que te convirtieras en la cabeza de tu familia"

"Como podría perderme este evento, su majestad. Después de todo la princesa se esforzó en hacer esta fiesta y quería felicitar al príncipe heredero por su victoria"

"Y tú Alexander, escuché que te has convertido en el archimago de la torre roja del imperio Abbysis"

"Fue todo gracias a usted majestad, estoy muy agradecido por eso"

"No hay de que, después de todo son los hijos de mi hermana menor."El emperador miro a Ariadne."Por cierto, no sabía que estabas casada. Felicidades por tu matrimonio y tu embarazo, del cual no fui invitado."

Al decir eso todos se quedaron callados. Los nobles sabían cuánto amor tenía el emperador hacia los hijos de su hermana fallecida.

Ni a sus hijos quería tanto como a esos tres jóvenes.

Y era una ofensa hacia el emperador no estar invitado a la boda de la joven que mantuvo en la palma de su mano desde que era una bebe.

Ariadne, solo sonrió con algo de pena.

"No me he casado, su majestad. El bebé que está en mi vientre no tiene padre"

El emperador no pudo evitar pararse de su asiento ante esa revelación.

Como era posible que la buena y respetada Ariadne estuviera embarazada y más aún, que cometiera ese adulterio sin estar casada.

"Cómo es posible que tuvieras un hijo fuera del matri..."

"Guarda silencio"El emperador miro con furia a la emperatriz, la cual solo apretó los dientes."Entiendo, cuentas con todo mi apoyo cariño. Espero que mi nieto nazca sano y que goce de mucha felicidad"

Todos se asombraron al ver cómo el emperador acarició la panza de la joven.

El recién marqués sonrió, ahora nadie puede hablar de su hermana y de su futuro sobrino tan descaradamente porque tienen el respaldo del emperador y eso se convertiría en una ofensa para él.

Fue una gran idea venir a este banquete.