Para muchos el amor es un sentimiento indescriptible algo que ni los científicos logran explicar, un conjunto de sensaciones nunca antes experimentadas por una persona, y que para los enamorados es una meta lograr que la persona que aman los amen como ellos a ellas.
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Pero que pasa con las personas que no logran cumplir su meta, las personas que lo intentan una y otra vez y no lo logran, quizás solo su error fue amar a la persona equivocada, a la persona que no correspondió sus sentimientos, pero la culpa nunca la tuvo esa persona sino su ingenuo corazón.
Y ay se encontraba esa persona ese joven de cabello amarillo y anaranjado con ojos color miel, recostado en un futón ubicado en un cuarto totalmente oscuro de no ser por un rayo de son qué salía de una ventana de la finca del antiguo pilar del rayo qué poco tiempo atrás avía cometido suicidio.
— por que en este momento tenía que pasar esto — salió de la boca del rubio con tono melancólico — por que premisamente ellos me tenía que hacer esto — dijo es ojos color miel mientras se levantaba lentamente siendo su cara la qué choco con los rayos de sol de la ventana.
Se podía apresar qué su rostro tenía los ojos rojos y ojeras quizás por llorar asta dormirse.
— talvez darme un baño y salir al pueblo me anime — propuso para si mismo con desánimo talvez ya sabe que eso no lo animara para nada.
Como fue que el joven que conocemos como la persona más chillona y gritona se convirtió en un tipo que apenas y tiene ganas seguir con su vida, pues eso se los contare yo.
Flashback:
Todo era felicidad por fin después de un largo tiempo la lucha contra los demonios y su rey Muzan kibutsuyi avía terminado siendo los cazadores de demonios los vendedores.
—!! Donde se encuentra mi querida Nezuko-chaaaan!! — gritaba un energético y embobado Zenitsu por los pasillos de la finca mariposa mientras era sujetado por las trillizas y Aoi.
—!!Ya cálmate idiota tus heridas aun no sanan del todo debes permanecer en reposo!! — grito la kanzaki al rubio quien seguía insistiendo en ver a la kamado.
— eso puede esperar Nezuko-chan no — respondía rápidamente el agatsuma a la enfermera de coletas.
— si traigo a Nezuko te calmaras — dijo la pelinegra al rubio.
— si si si si — respondió el ojos color miel.
— iré a buscarla, vuelve a tu cama — ordenó Aoi a Zenitsu antes de irse en busca de la kamado.
— aaa podré charlar con Nezuko-chan — salía de la boca del agatsuma mientras daba saltitos yendo a su habitación.
Adelantando el tiempo
Zenitsu yasia acostado en su cama en la habitación que compartía con sus mejores amigos.
En ese momento solo se encontraban Nezuko y Zenitsu el cual el último se encontraba charlando alegremente sobre temas triviales, mientras que su acompañante solo respondía con un tono ciertamente frío.
— y esa fue la razón por la que Aoi-san me castigo esta mañana — comento con una sonrisa a la kamado.
— qué lástima — dijo la de ojos rosas con cierto tono para no sonar desinteresada.
— le sucede algo señorita Nezuko — Zenitsu avía notado el comportamiento y el sonido estaño de la kamado, era como si su sonido y su actuar fuera el de una persona que se siente "incomoda".
— no, no me sucede nada todo esta bien — dijo con un tono muy diferente al anterior mientras forzaba una sonrisa en su rostro, cosa que delataba mas qué está mintiendo.
Pero justo antes que pudiera preguntar otra cosa.
—!! El gran rey de la montaña esta aquí!! — gritaba un joven con cabeza de jabalí y con unas cuantas vendas qué entraba ala habitación mientras quitaba la puerta de su camino con una patada.
— Inosuke-san — pronunció la kamado con una sonrisa y un tono de felicidad.
Zenitsu pudo notar como el sonido de Nezuko cambio de incomodidad a felizidad y alegría al ver al hashibira y de un momento para el otro el corazón de la kamado empezó a latir de manera desenfrenada, cosa que confundió al agatsuma qué no tenía idea de que pasaba.
Sin embargo con el tiempo se dio cuenta de lo que sucedía.
Pero fue muy tarde.
3 meses después:
El joven de haori color amarillo se encontraba empacando sus últimas pertenencias antes de partir con sus amigos a la antigua casa kamado,
Ya aviendo finalizado ya su recuperación era momento de partir.
— Zenitsu puedes ir a llamar a Nezuko y Inosuke, pronto partiremos— diría el mayor de los kamados tanjiro con un tono amable.
— esta bien —respondió simplemente el rubio.
Últimamente la relación entre Nezuko e Inosuke se a echo más cercana a tal punto de no verlos separados el uno del otro, lo cual provocaba los celos del agatsuma el cual no pensaba que Inosuke fuese a quitarle a Nezuko.
Gran error.
— Nezuko, Inosuke —llamaba el rubio a sus amigos como método de búsqueda por la finca.
— Nezuko, Inosuk....... —
Zenitsu se encontraba atónito por la escena qué estaba viendo.
Era uno de sus mejores amigos y la mujer que amaba.
SE ESTABAN BESANDO
Eran Inosuke y Nezuko bajo un árbol de sakura besándose de forma romántica.
— no, no no esto es solo una pesadilla — repetía el agatsuma para si mismo, inconscientemente empezó a llorar.
Como paso esto se preguntaba una y otra vez el agatsuma en su cabeza.
El agatsuma no soporto ver más la escena y decidió salir corriendo hacia su habitación, tuvo suerte de que no estuviera tanjiro para que no vea su condición. Solo una cosa decía su mente en ese momento sal de hay.
Y eso hizo rápidamente tomo su bolso ya listo con sus pertenencias y salir de hay, no sin antes escribir rápidamente una pequeña nota diciendo:
Lo lamento Tanjiro pero tengo que tomar un camino distinto al de ustedes.
Firma:Zenitsu
El agatsuma salió de la finca justo en el momento en el cual comenzó a llover pero para el eso no le importaba en lo más mínimo emprendiendo viaje a la finca del rayo.
Hola espero que les allá gustado la primera parte de esta historia.
Por favor si pueden voten y si no no ay problema.
Chau cuídense.
