Entrelazadas... Algebra

206- ¡¡Tita, Tita!! ¡Llegaste!

Dey: ¡Pero que le ha dicho que vendría desde hace días y no se ha aparecido! Apenas si ha llamado un par de veces y para decir tonterías, Bea, ¡que no la justifiques más, por favor!

Bea: Amor, lo sé... lo sé y estoy de acuerdo contigo, pero Mónica no necesita que se lo recalques, entiende, si ella no lo expresa abiertamente, no lo hagas tú, entiéndelo ya, ellas están casadas ahora, y ya no puedes andar detrás de Mónica evitando que se caiga y se lastime.

Dey: Pues casadas, casadas... solo es un papel y ya...

Bea: Pues ese papel tiene peso legal, y ahora ellas solitas tienen que arreglar sus problemas y aprender a comunicarse, anda, ven aquí... -tiro de mi novia para que se recueste sobre mis piernas- tu hija está inquieta hoy, la estas poniendo nerviosa con ese mal humor, así que ahora cálmala...

Dey: mmm, si mi hija lo que esta es molesta con esa caradura, igual que yo... ¿verdad que tengo razón, mi amor? -digo acariciando la barriga de mi mujer-

Es que no lo entiendo, Bea, Mónica llegó aquí con una sonrisa que no le cabía en la cara, Vanesa parece estar feliz también...

Bea: ¡Y lo están! Ellas se quieren, Dey, eso es de verdad, que Vanesa no haya podido venir aun, bueno sus razones tendrá, ya hablaran y...

Dey: ¿Razones? Bea, yo sé que la quieres mucho, pero por favor no hagas eso, no pierdas las miras para justificarla, ha decidido regresar a Málaga y ha estado actualizando sus redes con publicaciones de fiesta con sus amigas o pasándolo bien, y claro que eso, en apariencia, no tiene nada de malo, de no ser que había quedado con Mónica de venir a Madrid y acompañarla a ver a su gente.

Son una pareja, Bea, y eso implica a las dos, y no que solo sea Mónica la que deje de hacer cosas para sacar el tiempo de verse, después de todo es la cantante quien, con el pretexto de su trabajo, dice tener menos tiempo, pero cuando lo tiene, decide pasarlo con otras personas, ¿eso te parece bien?

Bea: Ni bien, ni mal, Dey... así es como ellas llevan su relación y si a Mónica le genera alguna incomodidad, es responsabilidad de ella y nadie más decírselo...

Dey: mmm... pues en eso quizá, tengas un poco de razón ¡Pero solo un poco! Y está bien, no diré nada, pero que te quede claro, que voy a estar para Mónica, no me importa si hay un papel firmado o no de por medio...

Amor, es que... -me incorporo para mirar de frente a mi mujer- esto, lo que hace Vanesa, siento que es lo mismo en lo que falle yo... -bajo la mirada- la mirada de Mónica cuando vio en las redes sociales la razón por la que Vanesa no vino, aun cuando le había dicho que estaba cansada...

Sí, es eso lo que me molesta, creo...

Tú sabes que yo a Mónica la lastime cuando me refugie en el trabajo, cuando ella me necesitaba y yo simplemente no estuve, conozco esa expresión, esa mirada... y si ella en aquel entonces se sentía sola y herida, aún sin estar enamorada de mí, ¿puedes imaginarte lo que estará sintiendo ahora, que no solo si está enamorada de Vanesa, sino que además de eso, están legalmente casadas?

Eso sin contar con que recientemente involucraron a sus familias y les dijeron que se casarían, apenas volviera Vanesa de la gira pendiente en América, tú misma estuviste buscando diseñadores de vestidos y bodas con Mónica hace un par de días...

Bea: Pues viéndolo así... no, no lo había pensado, la verdad...

Sin embargo, insisto, Dey, esa es cosa de ellas... -sonrío dejándole un corto beso- pero te prometo que estaremos para Mónica si nos necesita, ¿bien?