使命 [ NamJin | JinNam ]

S I E T E

─Tengo entendido que hubo algunos problemas entre ustedes y dos de mi equipo de seguridad el día de hoy. ─Kang, que no solía andarse con formalidades, fue al punto de inmediato, sus fríos y filosos ojos de tiburón parpadearon cuando les arrinconó al final del comedor.

─Sí, fue... muy lamentable ─Dijo Namjoon con frialdad─. Un malentendido de nuestra parte, pero comprensible, supongo. Ya que somos nuevos en el RamJack.

─Comprensible si ustedes son lo que decís ser. ─Kang frunció el ceño evaluándolos de arriba a abajo mientras hablaba─. Thadeus, mi jefe de seguridad, no estaba del todo convencido de su... ah... orientación.

Namjoon sintió la tensión de su socio detrás de él, pero puso una mano sobre el hombro de Seokjin, un gesto que había utilizado miles de veces antes. "Tranquilízate, lo tengo cubierto." Seokjin se relajó como siempre, su lenguaje corporal transmitía la fe inquebrantable en su compañero. Namjoon, tenía la esperanza de que en esta ocasión, su fe fuera acertada.

-¿Está usted diciendo que hemos venido hasta aquí bajo falsas pretensiones? - Exigió.

─Yo no estoy diciendo nada, sin embargo ─respondió Kang─, deben ser conscientes de que las consecuencias de estas acciones podrían ser... graves. Una o dos veces he tenido algunos problemas de este tipo, con la Prensa encima, que siempre está esperando algún escándalo sobre la vida gay o el tráfico de drogas. No digo que ustedes estén en esa liga, pero debén estar conscientes de que habrá serias repercusiones si se les encuentra culpables por argucias. ¿Creo que he hablado claro?

─Perfectamente claro. ─Namjoon sintió que su ira iba en aumento, o tal vez fue sólo el deseo frustrado con el que había estado luchando toda la noche, y por más de un mes antes de eso─. ¿Cree que somos heterosexuales? Vale, déjeme preguntarle, Señor Kang, ¿con qué frecuencia ve a hombres heterosexuales haciendo esto? ─Se volvió de repente a Seokjin, tomó el rostro de su compañero en sus manos, y sin previo aviso, le plantó un beso fuerte en la boca.

Fue sorprendente, tanto que sólo podía describirse como correcto, el sentimiento de pertenencia y posesión tan fuerte, lo sentía hasta el alma, alimentándose de esos experimentados labios rojos que había estado deseando con tanta desesperación. Pues él estaba probando la boca caliente de Seokjin. Casi gimiendo, Namjoon se inclinó para seguir con la tarea, tirando de su compañero, más plenamente en sus brazos y presionando el cuerpo delgado, firme, tan cerca del suyo como podía conseguirlo. Podía sentir los brazos de Seokjin enrollarse alrededor de la cintura y Namjoon lo besó con toda la pasión encerrada que había estado atormentándole toda la noche.