Noah retrocedió para agregar espacio entre ellos—pero el Alfa lo detuvo, su agarre permaneció firme en su cintura con propiedad. Los dos tenían sus ojos fijados en sus labios, como si estuvieran esperando quien daría el primer paso.
"Solo uno más," Murmuró Dante con una voz ronca, y se adueñó nuevamente de ellos.
El Omega suspiró al sentir la satisfacción del pasional toque. Cerró sus ojos y se aferró a él, permitiéndole explorar cada rincón con más precisión.
Lo cargó, y lo colocó encima del tocador—separó sus piernas y se situó entre ellas, sin parar con su ataque. Gemidos y gruñidos eran el único sonido en el lugar. El Alfa mordió su labio inferior, y luego besó su barbilla, para después pasar a su cuello y chupar allí.
"Ah,"
Empezó a hacer movimientos lascivos, causando fricción entre sus piernas, haciendo que una corriente de electricidad se generara, la cual lo hizo estremecer—y luego metió su mano dentro de su camisa para acariciar su sensible piel.
"Espera... hng,"
El sonido de voces fuera del baño hizo que ambos se detuvieran. Las risas y los pasos se acercaban con rapidez, y Dante no parecía estar muy contento por ello. Chasqueó su lengua, luego arregló su ropa y la de Noah, con delicadeza.
"Maldita sea," Murmuró para sí mismo. "Continuaremos después," Lo besó brevemente en los labios, dejándolo embobado.
Dos Alfas entraron al espacio acompañados de un Omega, el trío los observó con suspicacia.
"Ah—Dante, aquí estabas." Expresó como si fueran amigos. "Axel y Erik te estaban buscando. Pero veo que estabas ocupado," Miró de reojo a Noah.
"¿No lo estamos todos?" Comentó su acompañante al reírse, implicando que no estaban allí por buenos motivos tampoco.
"¿Y tú eres?" Preguntó Dante con su usual sonrisa, pero dejando en evidencia su molestia ante la confianza.
"Oh... um, Jason." Contestó nervioso, intimidado por el Alfa.
Uno de ellos se fijó en Noah, pero al recibir una mirada punzante del imponente Alfa, se volvió hacia sus amigos. El Omega que estaba con ellos, por otro lado, no removió su mirada en ningún momento. Sus ojos eran intensos y contenían incluso resentimiento.
Estaba casi seguro de que ya lo había visto en el grupo de Alexander, y suspiró al saber los problemas que traería.
"Bueno... creo que iremos a otro lugar." Dijeron sin mirar en su dirección esta vez.
Noah se bajó del tocador, llamando la atención de todos con su movimiento. "No, pueden quedarse. Ya nos íbamos," Dijo sin mirarlos.
Sus mejillas se tornaron coloradas al ser descubiertos en una situación tan comprometedora. Dante lo miró con ojos coquetos, pero el Omega lo ignoró. Lo siguió hacia el pasillo con calmados pasos, los cuales hicieron contraste con los de Noah, quien parecía querer alejarse a como dé lugar.
Se paró de repente, y el Alfa abrazó su cintura para sostenerlo. "Ten cuidado," Regañó, con una voz juguetona.
Se giró hacia él y lo fulminó con la mirada. "Bórrala."
"Ya lo hice," Le mostró la galería de fotos y pudo ver que no había nada allí. Luego el Alfa rompió el dispositivo y lo arrojó hacia afuera.
"¿Un poco exagerado no crees?"
Se encogió de hombros. "No era mi teléfono."
Noah lo miró confundido y estuvo a punto de preguntar—pero su teléfono sonó en ese instante. Suspiró al ver el nombre de Luka en la pantalla, y consideró si debía contestar. Optó por simplemente ignorar la llamada y dirigirse a donde se encontraban sus amigos.
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Jaula de Rosas
RomanceNoah tiene un gran secreto, para sobrevivir debe amaestrar el arte de la manipulación y seducción, y pasar desapercibido en un mundo donde los Omegas son considerados un rasgo inferior. Sin embargo, conoce a un Alfa dominante que es capaz de ver a t...