mine || hvz x reader 🔞 (CANCELADA)

fanservice (atsumaru)

Instapvz ira bro, procedo a tirarme a Atsu

una_mochi_suicida no leas esto imouto.

Este OS será con mi OC, Dear. Si quieren uno con la rayis, pídanlo abajo.

Ah, y otra cosa. Ahora hago pedidos con OC's.

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Dear se relamió los labios y observó a Atsumaru frente a ella. Lo tomó del cuello de la camisa y se subió en su regazo con una sonrisa de superioridad en el rostro. Comenzó a acariciar su bien formado pecho sobre la camisa y él la miró sonrojado.

-¿Quieres apostar?- Atsumaru levantó una ceja. - Yo puedo darte más placer del que tú me puedes dar a mí.-

-Ajá. ¿Y si resulta ser mentira?- Él puso una mano en su trasero y otra en su cabello corto, acariciando ambos. - Tu dirás.- Sonrió.

-Ven aquí niña traviesa.- Ambos se fundieron en un intenso beso. Dear comenzó a relajarse en sus brazos.

Aquel cuarto estaba aislado de los ruidos del exterior e iluminado por algunas luces rojas que daban una tonalidad cálida al sitio. Ella comenzó a quitarle la camisa con desespero y él hizo lo mismo, aunque más tranquilo.

Bajó el cierre de su vestido y sonrió a medio beso al notar que no llevaba sostén bajo este. Le encantaba tocarla. Dejó de besar su boca y comenzó a bajar con besos por su cuello, aspirando aquel olor a vainilla que tanto le gustaba. Dear terminó de quitarle la camisa y sintió un escalofrío en su espalda cuando lo sintió besar su cuello.

-Ngh...- Atsumaru sonrió en su cuello. - Por esto era que no te gustaba que te tocaran el cuello, ¿cierto?- Ella no le respondió.

Atsumaru gruñó cuando ella comenzó a restregarse sobre su entrepierna, poniéndolo duro. -No es justo... Yo ya casi estoy desnuda, y tu no.- Él la levantó de su regazo y en un rápido cambio de posición la acostó en la cama.

Terminó de bajarle el vestido y acercó su cara a su sexo. Dear contuvo la respiración y algo saltó en su pecho cuando le retiró las panties con los dientes. Frente a ella, comenzó a quitarse la camisa y los pantalones, dejando ver...

"Santa madre de Dios Jesús Cristo bendito en moto. ¿Eso me va a caber?" Tragó duro, sin poder disimular su miedo. Él se colocó entre sus piernas y notó aquello.- ¿Qué pasa mi niña?- Dear comenzó a tartamudear mientras trataba de explicarse. Cruzó los brazos sobre su pecho, cubriendo sus senos, apretó las piernas y frunció el ceño.

-Es que, bueno, no soy santa pero si virgen. En la vida me ha entrado algo allá abajo. Menos algo tan grande.- Él pudo notar su miedo, y eso era algo que él admiraba de ella.

Le estaba diciendo que era virgen porque sabía que podía ser lastimada por él si era muy brusco. Porque conocía los riesgos de tener su primera vez. Ella jamás se dejaba llevar por la calentura y otras cosas. Nunca perdía el norte de la situación.

-Tranquila. Seré muy cuidadoso y haré que lo disfrutes.- Atsumaru besó su frente con dulzura y notó que ella no relajaba su ceño fruncido ni su postura defensiva. Él sabía muy bien porque.

Porque Dear era tan cachonda como romántica, y si no había perdido su virginidad antes, era porque quería perderla con alguien especial, alguien que sintiera digno de ella.

Alguien que la amara.

-Oye.- Ella volteó a mirarlo. Atsumaru se inclinó hacia ella y le robó un beso. -Te amo.-

No era mentira. Era una realidad entre ambos desde hace años. Un secreto a voces, una verdad no dicha. Se amaban, no con intensidad, no con pasión, pero con firmeza. No era la clase de amor fogoso, intenso y pasional que asemeja a un intenso fuego. El suyo era como una llama de chimenea, cálido, reservado y tierno. Se amaban.

Y lo sabían.

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Dear acercó su boca a su miembro, sintiendo como Atsumaru acariciaba su espalda. Le dió una lamida al glande, insegura. Comenzó a meterlo a su boca con timidez, recorriéndolo todo con su lengua, oyendo los gemidos de él.

-Sigue preciosa, sigue..- Su voz firme la prendía más, y sentía como su zona íntima comenzaba a mojarse. Usó su otra mano para brindarle más placer y supo que estaba a nada de correrse. No se detuvo. Siguió cada vez más rápido, hasta que acabó en su boca.

-A que no puedes tragarlo.- Dear lo miró con reproche y lo tragó. Enseguida puso cara de asco. Ambos sonrieron.

Atsumaru se tendió sobre ella, alcanzó un condón y lubricante con una mano y dejó la otra junto a ella, poniéndose el condón y llenando sus dedos de lubricante.

-Relájate. - Entrelazó una mano con la de ella y comenzó a explorar su intimidad con la otra. El frío la hizo respingar. Clavó la mano que tenía libre en su espalda.

Halló su entrada y frotó sus dedos de arriba a abajo, antes de introducir uno. Dear suspiró, intentando adecuarse a la situación. Atsumaru lo movió, sacándole varios jadeos.

-Estás estrecha.- Mantuvo solo un dedo por un rato hasta que fue capaz de meter el segundo. Ella soltó unas lágrimas por el dolor y estrujó más fuerte su espalda y su mano. Él la tranquilizó con un beso y comenzó a frotar su clítoris con el pulgar.

Dear no lo podía negar. Lo estaba disfrutando. Él se movía tan bien y tan rápido... No tardó en llegar al orgasmo en sus dedos. Atsumaru sacó sus dedos y los lamió con lascivia, pero su mirada transmitía un amor indescriptible.

-¿Lista?- Ella asintió. Él besó su frente y puso sus manos en su espalda, presionándose contra ella lo más que podía.

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Aún era difícil moverse. Pero ninguno negaba el placer que sentían. Dear puso sus manos en su pecho y continuó montándolo. Se sentía mejor de lo que ella pudo haber imaginado.

No hablaban, no hacía falta que lo hicieran. Los cambios de posición eran rápidos y fluían como el agua. Atsumaru le puso una mano en la espalda y la recostó, comenzando a moverse contra ella. Dear le clavó las uñas en la espalda y escondió su cabella en el hueco de su clavícula. Le encantaba la forma en la que lo abrazaba.

-At-atsu....- Él le acarició el cabello sin dejar de moverse. -Dime, princesa.-

-¿En se-serio me amas o lo dijiste para no sentirte tan mal haciendo e-esto? Porque aunque, no me- ugh- amaras, yo igual hu-hubiera hecho esto con-contigo.- Atsumaru sonrió.

-Realmente te amo. Pero eres muy inteligente Dear, me sorprende que realmente no te hubieras dado cuenta antes.- "Ya no importa" pensó ella, antes de sentirlo acabar en su interior.

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Que si, quiero que Atsumaru me ame. Y me vale que se separe mucho del OS de Insta. Lo importante es que c0jen.

Dear_Simp