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Hyunjin y Félix pasaron el resto de la noche juntos hasta que el efecto de la marihuana se pasara.

Pasaron varias horas, y realmente nada cambio mucho, por lo tanto, Hyunjin le ofreció a Félix pasar la noche en su casa. Hyunjin sabía controlarse, así que le aseguraba a Félix que nada malo pasaría.

Después de varias insistencias, Félix accedió a dormir en la casa de Hyunjin.

Ambos caminaron hasta llegar a la casa del mayor. Después de llegar, Hyunjin ayudo a Félix a subir hasta su dormitorio, apenas llegaron, Hyunjin depositó cuidadosamente al menor encima de su cama.

Félix seguía bajo los efectos de la marihuana, así que todavía no estaba del todo consiente de lo que hacia. Por lo tanto, se dispuso a dormir sin más.

Y claro, la madre de Félix tenía que saber en donde iba a pasar la noche.

-¿Qué? - el tono de voz y en el modo en el que su madre habló tan pronto contestó la llamada, solo significaba que estaba molesta.

-Buenas noches, Sra. Lee. - sí, en realidad Félix no estaba en buenas condiciones para hablar con su mamá. Así que Hyunjin se encargo de avisar.

-¿Quién eres? - preguntó su madre extrañada, pues la voz que habia escuchado no era la de su hijo.

-Me presento, me llamo Hwang Hyunjin, soy amigo de Félix. - la manera en la que Hyunjin se presentó era cálida. Facilmente cualquiera hubiera pensado que se trataba de un chico amable y para nada presumido de si mismo.

-¿Y qué necesitas? Ya es tarde. Félix ya debería de estar aquí en la casa.

-Justo por eso llamo, Sra Lee. Félix y yo salimos a divertirnos, pero se nos hizo muy tarde y Félix se quedo dormido, por eso le llame, para informarle que su hijo esta bien y no tiene nada de que preocuparse. - otra vez Hyunjin estaba hablando con demasiado cuidado.

-Que estupidez. No me importa donde este el imbecil de mi hijo, pero igual gracias por hacermelo saber. - a diferencia de Hyunjin, su madre hablaba con frialdad.

-De nada. Tenga buena noch-. - Hyunjin intentó despedirse, pero antes de hacerlo escuchó un sonido fuerte del otro lado. La Sra. Lee habia arrogado su celular al suelo con suficiente fuerza para que se notara la frustación que tenía. Solo que... olvido colgar la llamada.

-¡COMO LO ODIO! ¡YONGBOK ES UN IMBECIL, IGUAL QUE SU PADRE! ¡ESTOY HARTA! - la ira que desprendia la señora era demasiada. Era tanta que incluso Hyunjin pudo sentir un pequeño escalofrio desde el otro lado de la pantalla al escuchar los gritos y los ruidos de botellas rompiendose.

Hyunjin no pudo escuchar más, y terminó la llamada.

Después de hacerlo, Hyunjin fue directamente a la habitación en la cual estaba Félix. El mayor creia que tendria que pasar el resto de la noche cuidando de el menor, pero no fue así, tan pronto Hyunjin entro a la pieza, noto que Félix ya estaba completamente dormido.

Así que sí, Hyunjin tambien se dispuso a dormir, solo que para darle espacio el menor, decidio pasar la noche en el sillon de la sala.

A la mañana siguiente, Félix se desperto primero con una leve resaca. No esta de más decir que Hyunjin tenia un sueño pesado, así que él no se iba a despertar facilmente.

Tan pronto Félix abrio sus ojos, noto que el lugar en donde estaba no era su casa. Por supuesto que se preocupo.

Sin embargo, después de salir de la habitación y de haber ido a la sala, se tranquilizo por completo al ver al mayor dormido profundamente en el sillon junto a una nota que el mismo Hyunjin habia escrito la noche anterior, pues sabia que no iba a ser el primero em despertar.

Mi Carta - HyunlixDonde viven las historias. Descúbrelo ahora