Incorrecto

15

— No pensé!!

— Pero usted golpeó a Enid! No veo una razón para golpearla.
Solo lo hizo porque si?

— No como tal, hubo un razón.
¿Pero eso que importa ahora?
Es más importante estabilizarla

— Pues no quiere dejarnos entrar y así me parece un poco imposible —

Después del inconveniente la rubia se asusto tanto que literalmente sacó a Merlina de su habitación y le cerró la puerta en el rostro.
Divina llevaba intentando saber que paso para la actitud de las dos chicas pero Merlina no parecía dispuesta a contarle, la primera y única versión que le dió era muy poco creíble

— De verdad necesito saber que paso —

— Ya le dije, ella se despertó, me asusté y por acto de reflejo la golpeé —

— Muy creíble —

— Está intentando que la despida?

— Está intentando que diga absolutamente todo?

— No lo harías.

— Por qué asume eso?!

— Porque no podrías vivir sabiendo que por tu culpa se llevarán a Yoko y Enid —

Bajo la cabeza, de alguna manera sabía que tenía razón.
Eran lo mejor de su vida y no podría dañarlas

— Ella. . . Bueno, creo que fue una confusión o algo parecido, estaba dormida cuando la revisaba y tal vez por inercia llevo mi mano a sus genitales

Divina la miro con sorpresa tratando de creer que era una broma

— Es que hoy estuvo un tanto rara, creo que su ciclo hormonal está cambiando drásticamente.
No trato de excusarla, hablaré con ella sobre esto.
Solo entienda que es una adolescente que no conoce nada de la vida humana normal, no sabe que lo qué hizo está mal —

Addams asintio entendiendo y las dos se quedaron en silencio por algunos minutos.
Luego Divina se levantó y tocó de nuevo la puerta de Enid que no parecía dispuesta a abrir.

— y si se desmayo?
Estaba muy agitada y tenía fiebre

— Divina ¿Por qué Enid estaba así de alterada?

— La encontré masturbándose y cuando le hable del tema se puso así

El rostro de la pelinegra enrojeció ligeramente
La vampira salió de su habitación con sus habituales lentes negros por la luz de la sala

— Puedo ayudar a abrir la puerta si gustan —

—Si—
—No—

Divina y Merlina dijeron al unisono

— Es una puerta muy sólida Yoko, puedes lastimarte —

— Es la única opción que tenemos, Divina —

— Déjenme demostrar cuánta diferencia hay entre nosotras —

Yoko camino frente a la habitación de Enid, tomo aire y de una patada abrió la puerta
Divina debía admitir que si estaba sorprendida, a pesar de conocerla desde pequeña jamás se puso a pensar en las diferencias entre ellas.
Ahora entendía que habían y muchas, definitivamente no eran normales y eso le gustaba.
Para su sorpresa la loba no estaba desmayada o algo por el estilo, estaba profundamente dormida, como si hubiera corrido por horas
Luego de revisarla entre las dos bajo la mirada de la vampira notaron que todo estaba en perfecto estado de nuevo.
Divina salió junto a Yoko y Merlina se quedó unos segundos más admirando la belleza de su pequeña Eni
Acarició su mejilla y tomo uno de los tantos mechones rubios que caían sobre su rostro para retirarlo y admirar bien su cara

"Eres tan linda mi Eni"

Se dignó a dejar de parecer una acosadora y antes de salir dejo un besito en su frente