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6 meses después...

Marinette.

La relación con Adrien iba muy bien, quedábamos casi a diario y eso fortalecía nuestra relación y nos hacía querernos más.

Me encontraba en casa, cuando de repente, el timbre sonó.

La verdad que no había pasado muy buena noche, me dolía la cabeza y tenía frío. Y escalofríos.

Sin embargo, abrí la puerta.

Ad: Buenos días mi amor.

M: Mm.. Hola..

Adrien me dio un suave beso en los labios.

Ad: ¿Estás bien? Te veo mala carilla...

M: Sí... Estoy bien...

Ad: Mmhh.. yo no estoy tan seguro.. a ver.. déjame..

Adrien me tocó la frente.

Ad: Cariño, estás ardiendo...

M: Mm.. sí, estoy súper caliente *seductora*

Ad: *risita suave* No, me refiero a que tienes fiebre.

M: Uf, no me extraña, me encuentro mal...

Ad: ¿Sí? A ver, ven aquí.

Adrien me cogió en brazos y me llevó a mi habitación.

Ad: Tienes que descansar...

Él me tumbó en la cama y se sentó a mi lado.

Ad: ¿Que sientes? ¿Que te duele?

M: La cabeza me duele, el cuerpo también, luego, tengo escalofríos...

Ad: ¿Te importa que hoy me quede aquí contigo para cuidarte?

M: *sonrisa* Claro, quédate. Pero... No quiero quitarte de tus cosas.. tienes que hacer obligaciones tuyas..

Ad: Tú eres más importante.

Adrien me besó la frente y yo sonreí.

M: Gracias...

Ad: De nada mi vida.

Adrien se levantó y cuando volvió a la habitación, me trajo un vaso de agua.

Ad: Tienes que beber agua.

M: Vale, doctor Agreste.

Ad: *risa suave* ¿Y tienes algún medicamento para tomar?

M: Ayer gasté la última pastilla que me quedaba...

Ad: Bueno, no te preocupes, voy a ir a la farmacia.

Adrien me arropó con las mantas de mi cama y me acercó el mando de la televisión, para distraerme un poco.

M: Adrien...

Ad: Dime.

M: Tampoco tengo un termómetro. *Estornudo*

Adrien me pasó un pañuelo de papel y me soné.

Ad: También lo compraré.

M: Adrien... No te quiero contagiar...

Ad: No te preocupes por eso, ahora solo importas tú.

M: Bueno...

Adrien se marchó y cuando volvió, trajo a mi habitación algunas pastillas y un termómetro.

Ad: Incorpórate...

Me senté en la cama, Adrien me pasó las pastillas y el vaso de agua y yo me las tomé.

Ad: Ahora, vamos a tomarte la temperatura...

Adrien me ayudó a ponerme el termómetro, ya que me sentía muy débil en cualquier movimiento.

Ad: 38'5 ...

M: Ay Adrien... Eso es mucho.. ¿No me moriré no?

Ad: *risa suave* No cariño.. con la medicación y algunos cuidados te bajará la fiebre tranquila.
Y no te preocupes por mí.
Porque mi padre, de adolescente, insistía en vacunarme cada mes de todos los resfriados.
Y ahora, de mayor, un médico me llama todos los meses para vacunarme, porque así mi padre lo planeó.
Así que tengo muy baja probabilidad de contagiarme, no te preocupes.

M: Oh.. bueno, vale, me quedo más tranquila.
Acuéstate aquí a mi lado...

Ad: Vale.

Adrien se acostó a mi lado y yo me acurruqué con él.

Él pasó todo el día cuidándome y yo dejándome cuidar.

En la madrugada...

M: Mm.. Adrien.. me encuentro mal..

Ad: *Tocadole la frente* Seguramente te esté subiendo la fiebre..

Adrien me colocó el termómetro una vez más.

Ad: Si, te ha subido, 38'3, aunque bueno, al principio tenías más.

Adrien también se pasó casi toda la noche en vela para cuidarme y que la fiebre me bajara.

A la mañana siguiente ya me encontraba mucho mejor.

Y le di varios besitos a Adrien.

Ad: *despertando* mm.. buenos días..

M: Buenos días... *Sonriente*

Ad: ¿Como te sientes?

M: Mucho mejor, además he tenido un médico fabuloso cuidándome.

Adrien se rió suavemente y me besó, después, tocó mi frente.

Más tarde tomó mi temperatura y ya casi la tenía normal.

Y cuando ya me puse completamente bien ambos salimos a dar un paseo al aire libre.

Continuará...

𝕸𝖎 𝖊𝖗𝖗𝖔𝖗 𝖈𝖔𝖓𝖙𝖎𝖌𝖔. (+18) (Adrinette) {TERMINADA}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora