La madre de Jimin se paseaba en silencio por la casa con el teléfono a la mano, Suji viendo con aquellos ojos de largas pestañas su entorno lleno de muebles y decoración blanquecina como a ella siempre le había gustado. Extrañamente, seguía sintiéndose vacía de alguna forma u otra; la copa de vino seguía en su mano, le daba un par de tragos meditando en silencio.
Solo pensaba en todo y nada.
—¿Mamá? —La voz de su hijo hizo que ella volteara y viera a su adorable Jimin que estaba despeinándose el cabello, acercándose a ella. —¿Sabes a qué hora llega papá hoy?
—No tengo idea, amor. Hoy iba a verse con el contador de la empresa según me dijo. —Ella alzó sus hombros como si fuese poca cosa y siguió dando vueltas ligeras con copa en mano, viendo el líquido en el interior. —¿Deseas que hagamos algo hoy, cariño? Podemos ir de compras o puedes invitar a Hoseok para que sigan con su proyecto.
—Claro. —Jimin sonrió y se acomodó un poco la camisa, su madre enarcando una ceja antes de ajustársela correctamente del cuello que estaba ligeramente doblada. —¿Tú no fuiste a trabajar?
—Tengo el día libre, estaré trabajando desde casa,. —Contestó ella sentándose en el sofá y cruzándose de piernas. —Hablé... con tu abuela. —Su madre le dio un pequeño trago al vino y Jimin hizo una pequeña mueca al instante. —Dice que no aguanta más a mi hermano y que si puede estar acá.
—No. —Jimin soltó en seco y su madre suspiró. —No. No. Yo no quiero a Jungkook aquí. Yo no quiero a mi tío aquí conmigo.
Su madre rodó sus ojos cansada e hizo una cara larga, ya se esperaba esa respuesta, pero aún así no lograba entender por qué simplemente Jimin y Jungkook no podían llevarse bien. ¡Tenían casi la misma edad! Jungkook era mayor por solo un mes.
Bueno, la historia era extraña desde un principio. Resulta que la madre de Jimin siempre fue madre soltera con Suji. La niña creció, hizo su vida y cuando se fue de la casa a los veinte años, su madre empezó a salir con otro hombre que había conocido. Suji se mantenía feliz, bastante feliz ya que para sus veintidós años ya había conocía al famoso "E-Dawn" y estaban esperando a Jimin juntos.
El problema es que el embarazo de Suji no fue la única sorpresa, ya que su madre con cuarenta y nueve años, se había embarazado inexplicablemente del hombre de con quien salía que era diez años menos que ella. Bueno, total locura, todos estaban felices pero a la vez muy extrañados. Suji no podía creer que iba a tener un hermano veintidós años menor que ella y que iba a nacer a la par que su hijo.
Y bueno... Jungkook llegó así al mundo un mes antes que Jimin. Menuda historia de locos.
Jungkook vivió con su madre que era la madre de Jimin igual, aunque fue hasta la adolescencia del joven chico que empezó a tener problemas. Jungkook vivió seis años con su padre (ya que su madre y este se habían separado), pero este lo había malcriado un poco, así que Jungkook había vuelto apenas con su madre otra vez... quien ya no lo quería más.
Y ahora venía a pedirle ayuda a su hija mayor, la hermana de Jungkook para que pudiera alojarlo en su casa de aquí a que finalizaba el año. ¿Pequeño problema? Ni Jimin ni su marido s llevaban bien con el castaño.
Era normal, más o menos. De niños Jungkook y Jimin eran "primos" y no exactamente tío y sobrino. Sin embargo cuando Jungkook se fue con su padre y quebraron un poco de contacto, cuando ambos ingresaron a la pubertad, los roces fueron más agresivo hasta llegar al punto de no aguantarse. Fingían no conocerse allá afuera y en reuniones familiares apenas se hablaban.
—Jimin, escúchame. —Suji buscó la mirada de su hijo que se negaba y se negaba una y otra vez a escucharla. —Jungkook solo estará aquí hasta que acabe el curso.
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LAW OF THE FORBIDDEN - yoonmin
FanficPark Jimin es un niño caprichoso y mimado que cree que con sus berrinches puede tenerlo todo, Min Yoongi es su solitario, frío y desagradable compañero de clases. Cuando a ambos les toca hacer equipo en un proyecto escolar, al instante una tormenta...