⸙ LUNA ⸙ Wenclair

⸙ Capítulo 7 ⸙ - Por ti...

Los Mates de algunos Licántropos se pueden encontrar en otros seres que no son de su misma especie, pero siendo así, son mas propensos al rechazo de este.

Y por mas que Marilyn pataleo, rasguño y mordió a Ajax, el chico no estaba dispuesto a dejarla ir. La pequeña Bruja no tuvo otra alternativa mas que caminar de vuelta a la manada, y los lobos a su alrededor solo hacían que mantuviera ese pensamiento y no el de intentar huir nuevamente.

Con la condición de que el castaño mantuviera sus manos —o patas, como las había nombrado la rubia en un insulto— en su lugar, fuera de ella. Pero eso no impedía que él la mirara constantemente, con una boba sonrisa en su rostro.

Wednesday observaba con curiosidad su comportamiento, totalmente diferente al de Enid con ella. Giró la cabeza al frente de nuevo, pues sus tropiezos aumentaban debido a la falta de luz que había. Y antes de lo esperado, la rubia se encontraba caminando a su lado, apretando sus labios y jugando con sus dedos, en un gesto nervioso.

Parecía intentar decir algo, pero las palabras no le salían.

—Quería... pedirte una disculpa por mi anterior comportamiento...

La ojinegra la miró con los ojos muy abiertos, esperando de todo menos eso por parte de su posesiva Mate. Hizo una mueca, sin saber que responder ante sus disculpas.

—Pude sentir tu... tristeza mientras mirabas a Ajax con su Mate— siguió la rubia, mordiendo su labio inferior. Esto alerto a Wednesday. ¿Sentir su tristeza? —Yo sé que empezamos con el pie izquierdo, pero si me aceptas, prometo cambiar— la sonrisa que adorno su rostro, hizo que Wednesday se quedará sin aliento —Cambiaré por ti.

Antes de que la ojinegra se negará ante su propuesta, pensando en esta como algo completamente absurdo e irracional, una voz la detuvo.

"Si quieres salir de aquí, debes ganarte su confianza".

Miro de reojo a Marilyn, quien mantenía sus ojos fijos en ella. Su rostro sin ninguna expresión.

—¿Wednesday?— la llamó Enid, esperando una respuesta.

¿Debía hacerlo? El plan no sonaba nada mal, si tenía la confianza de la futura Alpha, tendría la oportunidad de robar la Joya sin sospechas, y escapar con Marilyn sin que nadie las detuviera.

Enid extendió su mano, esperando no tener nuevamente el rechazo de Wednesday.

La ojinegra trago con dificultad, tomando la mano de la rubia y entrelazando sus dedos en señal de aceptación. Sintió ese agradable cosquilleo en su cuerpo al hacerlo, y la tierna sonrisa de Enid solo fue como la cereza al pastel.

Henri miraba la interacción de ambas chicas con recelo.

((*))

Un Licántropo puede puede percibir las emociones de su Mate, y después de la mordida, estas se intensifican.

—Al fin llegas, tu padre ha llamado Enid— aviso Yoko apenas pusieron un pie dentro de la gran casa.

Enid le dio una mirada de disculpa a Wednesday antes de soltar su mano y subir las escaleras hacia el despacho del Alpha, seguramente para llamar a su padre.

—¡Ah no! ¡No dormiré contigo, pulgoso!— se giró cuando escuchó a Marilyn quejarse, el chico la miraba con una expresión confusa en el rostro.

—Pero... eres mi Mate, ¿Por qué no quieres estar conmigo?— dijo dolido, acercándose lentamente a ella, pero Marilyn retrocedió bruscamente.

—¡Ni siquiera sé tu jodido nombre! ¿Y ya quieres que compartamos cama?

—Mi nombre es Ajax Petropolus— se presentó con una sonrisa, pensando que eso resolvería el problema —¿Ya vamos a nuestra habitación?— tomó la mano de Marilyn con suma delicadeza, como si la chica fuera hecha de porcelana y su simple tacto la quebraría. La llevo a sus labios, dejando en su dorso un casto beso.

Wednesday no podía dejar de mirar, puesto que la reacción de Enid a la idea de que Wednesday durmiera en otra habitación ni siquiera se acercaba a esta.

—Ah, claro. Un gusto Ajax, ahora llévame a mi habitación— dijo Marilyn apartando su mano del chico —¿Entiendes? Tú en tu cama, y yo en la mía.

El castaño solo asintió con la cabeza desanimado, comenzando a caminar al fondo del pasillo y Marilyn siguiendolo sin rechistar.

—Esa pequeña tiene problemas eh— bromeó Yoko, Wednesday había olvidado que la chica se encontraba ahí —¿Tienes hambre, Luna? Estábamos por cenar algo.

Wednesday comenzó a caminar detrás de ella, en camino a la cocina.

—¿Estábamos...?

Se quedó de piedra al entrar a la cocina, el chico se encontraba sentado en el taburete comiendo un plato de cereales dándole la espalda a ambas.

—Tyler, ella es Wednesday. Tu futura Luna.

Su mirada se elevo al escuchar a Yoko hablar, y frunció el ceño al ver nuevamente a la ojinegra.

—¿Qué haces aquí?— preguntó como si se tratará de una broma —Técnicamente te di pase libre a la libertad, no me digas que no supiste rechazarla...

Su corazón palpitaba acelerado, temía que este se le saliera del pecho. Yoko miraba al chico sin comprender lo que decía, comenzando a unir las piezas.

—Y-yo...

—¡¿Fuiste tu?!

La furiosa voz de la Mate de la ojinegra resonó en las paredes de la cocina, las manos de Enid estaban cerradas con enojo y las uñas se encajaban en las palmas de sus manos. Ansiaba tener su puño en la cara del chico, pues por culpa suya estuvo a punto de arruinar su vida.

Y eso no lo pasaría por alto.

Sin embargo, su furia aumento cuando Tyler sonrió arrogante en su dirección. No sabia como contener su enojo. Debía contenerse, debía calmarse...

Pero ya era demasiado tarde, pues su loba ya había tomado control de su cuerpo y mente.