INTRUSO DEL PASADO

REHÉN Y RETRASO

Esto es increíble.

Tenían un plan preparado, dentro de unos días pondrían manos a la obra.

- Entonces, ¿Gato conocía a ese tal Félix porque Alex se lo averiguo? – preguntaba Emma agitada.

- Precisamente, ese repugnante de la taberna – Kitty estaba algo ajetreada, pero no como su aprendiz.

Emma y Kitty estaban peleando. La ojiazul decidió enseñarle a Emma algo de esgrima, pues ella tendría que ser parte del plan y no sabía defenderse.

Iba por buen camino, aprendía lo suficientemente rápido para el futuro ocaso.

- ¡Descansemos por favor, llevamos horas practicando! – suplicó la gata blanca.

Kitty se detuvo, envaino su espada y rio.

- De acuerdo, vamos con los demás, en cuatro días empezaremos todo.

- Esto es estúpido – se quejó – Si ayer recién trajeron a los "rehenes" como ustedes los llaman, ¿Por qué en cuatro días?, mejor una semana.

- Que fastidiosa eres.

Las hermanas empezaron a codearse mutuamente.

Todos estaban en la sala, conversando. Y a todos me refiero a Lucas, Alex, Gato y sorpresivamente Harry. Él se había enterado por Gato; quien lo estuvo buscando toda la mañana; que capturaron a Félix y podía estar más tranquilo.

- ¡Terminamos al fin! – Emma celebraba.

La gata se desplomó en el sillón y reposó su cabeza en el regazo de Alex. Se habían vuelto excesivamente cercanos y, por si fuera poco, Lucas tenía que aguantarlos.

- Dentro de poco ese desgraciado de Jack pagara todas las que ha hecho.

Gato fantaseaba con torturarlo.

Todos sabían con exactitud lo que sucedía. Las piezas fueron armadas. Primero, Jack estaba tan obsesionado con Kitty que armo un robo en el orfanato para que ella los ayudara con los gastos económicos. ¿Cómo?, haciéndola participe del robo del zafiro, pero como ese trabajo no lo lideraba él, decidió hacer llegar la información como si fuera "trabajo". Gracias a Beny y Harry sabría cuando ella estuviera ya metida en el trabajo, pues ellos eran sus supuestos compañeros rivales. Los gatos conseguirían antes el zafiro, se lo entregarían a Jack y fingirían que fueron emboscados. La llevarían a San Lorenzo donde sería secuestrada y plan completo. Por si fracasaba estaba el plan B. Para los caza-recompensa. A ella la describieron como ladrón entre los trabajos. De esto se encargaba Dulcinea, pero la falsa, solo que los chicos aún no sabían de eso. Félix solo se encargaba de amenazar a Harry para que obedezca cual siervo.

Quién lo diría. Si Kitty no se hubiera metido con Jack nada de esto estuviera pasando.

Su pasado la estaba atormentando.

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Kitty se encontraba en su habitación, descansando y repasando el plan por si sacaba uno B en caso del fracaso o inconvenientes.

Estaba tan metida en sus pensamientos, pero fue sorprendida por el golpe de su puerta.

- ¿Puedo pasar?

- Claro, adelante.

Gato entró sigilosamente, como si ella no supiera que estaba ahí.

- Solo entra, pareces cazador haciendo eso.

- Lo lamento – el gato naranja rio un poco acercándose a su novia, que estaba sentada al frente de un escritorio.

Se sentó en la esquina superior de la cama, quedando frente al buró.