Limerencia

\\2~El chico de cabello blanco\\

\\Porque el efecto de admirar los efectos que el tiempo traía consigo nunca fue mi acto saudade, por ello, te elegí admirar a tí.\\

Barlon Gibran.

12 de enero de 2020:

SHAYLA VIER:

Conocer exteriores y maravillarse con la inhóspita penumbra que abarca y describe los lugares más recónditos de la tierra.

Sí, definitivamente puede ser un tema interesante para el resto de la humanidad.

Mas, no lo es para mí.

Nunca he sido una persona que conozca alrededores después de la habitación de hospital, de una en mi casa, pese a que no me acuerdo mucho de ella.

Porque, personas como yo, no son consideradas del todo normal, no somos considerados seres comunes, como los que se sitúan fuera de los lugares que yo frecuento. Y no por las pautas que nosotros mismos nos permitimos, sino por las múltiples y diversas enfermedades que nos mantienen en cautiverio.

No salimos porque tengamos problemas en sentido emocional, o porque tengamos miedo de la realidad que suele asomarse. Lo hacemos por nuestra salud y bien estar, lo hacemos para poder vivir con un poco de descencia. Lo hacemos para mantenernos con vida, para seguir existiendo; moribundamente, pero existiendo a fin de cuentas.

La vida nos roba el derecho a vivir como personas normales, de poder salir, hacer nuestra vida como el resto de personas suelen hacerla.

Nos enajenamos del mundo porque queremos apegarnos al hecho de poder ver la luz del sol un día más.

Y, entonces, la rabia se acumula dentro de mí porque me doy cuenta de que hay personas allá afuera que, pese a que tienen todo el material para ser felices, para vivir y para marcar un punto en la vida de otras personas; no lo aprovechan. No hacen uso de dichos recursos, no piensan que millones de personas agradecen el hecho de simplemente tomar una nueva bocanada de aire, no hacen uso del razonamiento a cosas como que, a día de hoy, múltiples niños mueren, sin tan siquiera abrir los ojos por primera vez. Un sin fin de personas queridas pierden la vida, inesperadamente o no, lo hacen; y otro tanto, como yo, tratan de subsistir para que en un futuro, no sean solo una pila de huesos enterrados y condenados al olvido. Entonces, creo que la rabia y la impotencia están justificadas y con creces, al hecho de la personalidad de otros seres humanos.

Así que, si tú tienes la oportunidad de vivir, de respirar y de sentir el aire colarse y dar de lleno contra tu rostro, aprovéchalo. Sonríe, salta, canta, ama y ámate, cumple tus sueños y llénate de expectativas. Aprovecha el hecho de poder moverte, y no pienses en el futuro, piensa en el presente, pero sobre todo, vívelo, porque solamente tú serás capaz de hacerlo como en un futuro habrás querido.

Claro está, hay personas que están conformes con respirar nuevamente, con sentir una vez más los latidos de su corazón, y yo me incluyo en ese grupo de personas.

No necesito salir al mundo, al exterior para ser feliz, solo necesito seguir viviendo, y por ello mi empeño y amor a la más mínima cosa, por muy pequeña que parezca.

Y, cuando, cada día estés a solo un paso de la muerte, lo entenderás. Cuando cada noche te vayas a dormir con el miedo de no despertar, pero con la satisfacción de que viste el sol nacer, de que viste la luna esconderse y de que, al menos, suspiraste nuevamente. Allí me comprenderás y recordarás mis palabras.

Subo las escaleras con suma lentitud, reforsando mi aguante en la barandilla cada que veo un escalón roto. Porque sí, el hospital, en su mayoría, ha recibido mucho mantenimiento, muchas condiciones tiene. Pero esta, al no ser un área concurrida, excepto por mí, no suelen repararla muy a menudo.