Capítulo 5: Lobo idiota

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Saliste lo más rápido posible y te pusiste enfrente del lobo, sí que era grande

- Me las vas a pagar maldito – El solo te miraba desafiante, con su mirada te transmitió como si quisiera decir "A mí no me amenaces estúpida"

Se acercó a mí con un solo paso, podía oler su aroma, era imponente, sus feromonas estaban demasiado fuertes en ese espacio que había entre los dos, no retrocedí ni un solo paso, eso a mí no me afectaba, después de todo, me crie con las alfas de mi manada, ninguno se podía imponer ante mi

- ¿Para que las liberas? A mí no me vas a imponer lobo idiota – Obviamente tenías miedo, pero no lo ibas a dejar notar por él, había algo raro, sabias que él era de la manada vecina, por lo cual era posible que se pudiera transformar en humano

Entonces paso, se abalanzó sobre ti y cerraste los ojos pensando lo peor...

- ¿A quien le llamas idiota, idiota? – Abriste de un instante los ojos, ¡¿Qué mierda estaba pasando?!

- ¡Puta madre! – Tu lo veias sorprendida y no pudiste contener tus feromonas de sorpresa, el solo te miraba molesto

- Repite lo que dijiste mocosa – Te miraba molesto, con una sonrisa ladeada mostrándote todos y cada uno de sus colmillos

- ¿Y si no que? – No era miedo lo que tenías, era sorpresa, intriga, curiosidad. No pensaste en lo que estaba pensando solo veías lo atractivo que era, sus facciones tan definidas y cada una de sus heridas, suponías que por las batallas que ha tenido

- No me pongas a prueba pequeña insolente, ¿Qué no ves que te puedo matar de un mordisco? – Sonreíste retadora

- Hazlo entonces – Te miro sorprendido a lo que acababas de decir, se apartó de ti y se sentó a un lado.

- ¿Qué haces aquí en el lago? ¿No es peligroso para una mocosa como tú? – Lo miraste indignada

- Solo estaba refrescándome un rato y quería verte - Dijiste despreocupada

- Yo vine temprano para no toparme contigo – Dijo de una manera irritada

- Mmm... pues ni modo te toco, oye a todo esto ¿Cuál es tu nombre? – Dijiste mientras lo mirabas, sus orejas se alzaron y su cola se crispo, por alguna razón era humano, sí, pero seguía teniendo cola y orejas.

- ¡¿Y eso a ti que te importa idiota?! –

--Esto será difícil—Pensaste mientras te rascabas la cabeza

- Bien empiezo yo, me llamo (T/N), soy la hija de la alfa de la manada de aquí cerca, ¿Tú debes de ser esa manada que es lobuna no? – Lo miraste curiosa, el té gruño

- Parece ser que no eres tan estúpida... mi nombre es Bakugo Katsuki, soy hijo de la líder de, como tú lo dices "la manada lobuna", próximo líder de ella – Dijo con orgullo

Rodaste los ojos y el solo se limitó a sonreír

- Que engreído – Susurraste.

- Te escuche idiota Te crispaste ¿Por qué sentías nervios?

- E-entonces, ¿Cuándo comienza la cacería de este año? –

- Tch... ¿Y tú para que quieres saber? No te incumbe – Te dijo mientras se levantaba del piso – Debes ser cuidadosa, quizás y para la próxima no sea tan generoso y te termine devorando – No querías admitirlo, pero te dio un poco de miedo esa amenaza

Él te sonrió de una manera victoriosa y se transformó de nuevo en un lobo, desapareciendo por los arbustos

- ¡Eyy, Mínimo un adiós ¡ –­­­ Dijiste con algo de molestia

- Maldito lobo maleducado -  

Después de eso decidiste volver a casa, pensaste que tu madre estaría atareada por los preparativos para recibir a esa manada donde provine ese lobo, decidiste ir a ayudar

Pasaron uno, dos, tres... ya había pasado una semana después de tu pequeño encuentro con ese lobo tan malhumorado, habías ido cada día al lago para ver si lo volvías a ver, pero no paso ¿Qué había pasado con él? Pensabas cada noche después de su encuentro y de su extraña desaparición.

Ese día decidiste ir a dormir, esperabas que en la mañana ese lobo estuviera en el lago una vez más.

Narrador: (T/N)

Decidí ir a dormir una vez más sin ver a ese lobo, mi omega interior estaba triste, al igual que yo pero me resultaba raro que mi omega estuviera triste, nunca me había pasado, era un sentimiento extraño, no entendía nada de esto.

Cuando estaba a punto de caer en un profundo sueño, escuche como tocaban la puerta de la choza, era tarde ¿Quién podría ser?

Sali de mi habitación pensando que mi madre no iba a abrir, pero cuando la vi en la puerta me di la vuelta e iba directo a mi habitación, quien sea que sea, esa persona tocaba la puerta desesperadamente, que molesto.

Me estaba yendo justo cuando mi madre estaba abriendo la puerta, me detuve al instante que escuché una voz femenina pedir... ¿ayuda?

- ¡Inko! Discúlpame por la hora, pero por favor necesito tu ayuda- Dijo con lágrimas en los ojos

- ¿Qué pasa Mitzuki? – Dijo preocupada haciendo que pasara ella y alguien más, supuse que era su esposo

­- ¡La casería empezó esta noche y ataco a mi manada! Quedamos muy pocos y algunos están heridos, no tuvimos tiempo de evacuar, todo estaba tan tranquilo la semana pasada que no te moleste con nada de trasladarnos aquí, pensé que no nos harían nada, pero... - Te sentías inquieta, estabas pensando en algo que no querías que fuera real.

- ¡No encontramos a mi hijo! No sabemos dónde está, ya lo buscamos por todos lados, no identificamos su olor, estoy pensando en lo peor... - Sentiste como te debilitaste, ¿Qué era este sentimiento? Pensaste mientras te agarrabas el pecho con firmeza

- No te preocupes, mandare a mis- Saliste corriendo de la choza, tu madre se limitó a gritarte – ¡(T/N) Espera!

Temtation [BakugoXLectora] «+18»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora