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28 junio de 2009

Habían pasado tres años desde la última vez que Luana habló con Tom. Muchas cosas habían cambiado.

Luana había dejado de confiar en la gente, se había desarrollado físicamente mucho más, fumaba, bebía, se acostaba con cualquiera y se había vuelto una persona muy egocentrica.

Le dolió saber que Tom nunca la llamó cuando se lo prometió, y ella lo iba a llamar, pero a las semanas de que se fueran salieron fotos de él junto a una chica rubia besándose en una fiesta.

Le partió el corazón aunque fueran solo amigos.

Desde ese momento en las únicas personas en las que confiaba eran Fatima, Daniel, Alexander y su nueva hermanita de tres añitos llamada Victoria.

Luana cuidaba a Victoria con su vida, era la niña de sus ojos. Era su niñita pequeña e inofensiva. Mataría por ella si hiciera falta.

La ahora pelinegra se encontraba ensayando con su grupo de amigos.

-Me encanta la nueva canción, presiento que va a ser mil veces mejor que cualquiera que se haya lanzado este año-iba diciendo Luana mientras sus amigos la escuchaban felices.

Luana había dejado de mostrar su verdadera yo a la gente, solo lo hacía en el mundo de la música, ahí se podía ver su niña interior e ilusionada con sus nueva vida.

-Lo que a mí me mola es como la cantas-dijo su amiga Fatima mientras le pasaba una botella de agua a la cantante, que estaba agotada de tanto trabajo.

A si, terminaron sacando a Nicolás del grupo y Luana consiguió el puesto de cantante y guitarrista a la vez. Y esto fue muy apoyado por todos sus fans, que cada vez iban creciendo más y más.

-Esta noche tenemos una fiesta en casa de mi primo-avisó Alexander algo divertido al ver la cara de ilusión de Luana.

A la chica le habían empezado a encantar las fiestas, el ambiente, la ropa que se ponía, lo que bebía y donde acababa a la mañana siguiente.

Siempre acababa en comisaría o en la cama de algún desconocido atractivo que después podría fardar de habérsela follado.

Todos estaban loco con ella.



La cantante se encontraba en la casa de su mejor amiga para cambiarse juntas para la fiesta.

-Me encanta como te queda ese vestido Lu-le dijo la rubia tapándose la boca al darse cuenta del mote-Lo siento mucho Luan.

-Tranquila-dijo riendo.

El diminutivo "Lu" solo lo había utilizado Tom, y el hecho de que él no le hubiera vuelto a hablar a la chica, hizo que le cogiera asco al apodo cariñoso.

Volviendo a lo que llevaba puesta Luana, era un vestido negro con varias aperturas por todas partes. Hacía calor y eso la ayudaba a poner una excusa para vestirme más "fresquita" como le decían en alguna que otra fiesta, los hombres uni neuronales que se pensaban que las chicas se vestían para ellos.

En cambio la rubia llevaba un vestido del mismo color pero sin ninguna apretura y un poco más largo.

-Estáis preparadas?-preguntó Daniel en la otra parte de la puerta.

Las dos chicas salieron deslumbrando los ojos de chico, que las miraba con una sonrisa inmensa.

-Si no fuerais mis amigas, me acostaría con vosotras-dijo este haciendo reír a las chicas.

Agarró a cada una de una mano y se fueron a la fiesta tan felices.


-Hola Alexander! Donde está Luca?-la pelinegra quería saludar al dueño de la gran fiesta. Como siempre hacia.

-En la cocina, repartiendo bebidas!-respondió el chico.

-Perfecto-una sonrisa se formó en la cara de la chica mientras se iba acercando a donde se suponía que estaba Luca.

-Hola rey-le saludo Luana dándole un abrazo. Se conocían desde hace años, no tenían mucha confianza, pero eran amigos.

-Que tal guapa? Veo que muy alegre-dijo este devolviéndole el abrazo.

-Pues como en cualquier fiesta, parece que no me conozcas-dijo haciendo que el chico riera.

-Que quieres que te ponga?-preguntó él sonriendo al ver el vestido que llevaba.

-Que como quiero que me pongas? A ver Luca no crees que es muy pronto para esas cosas-dijo en broma para empezar a reír junto con el chico-ponme vodka con lo que sea.

El chico le entregó un vaso con la bebida que ella le había pedido y la chica se esfumó dándole un choque de manos.

-Donde estaba Luan?-le preguntó su amiga viéndola bailando sola con su cuarta bebida en mano.

-Ya sabes donde he estado-aunque a Fatima no le gustará, sabía que su amiga había estado fumando y bebiendo sin parar en el techo de la casa.

Luana siempre tuvo una muy mala relación con sus padres, y esto la hizo tener varios problema que la llevaron al alcohol y las drogas.

En todas las fiestas a las que iba hacia lo mismo. Bebía, subía al techo de la casa o el piso, se fumaba unos cuantos cigarrillos de maría y volvía a la fiesta a bailar.

-Deberías de dejarlo Luan-le dijo su amiga acercándose a ella.

-Sabes que lo intento, y sabes que ahora lo hago menos-le dijo ella haciendo que sonriera-todo lo hago por ti y por mi hermana.

-Cierto

Las chicas empezaron a bailar al ritmo de la música atrayendo varias miradas de chicos hormónales con los que se terminarían besuqueando esa noche.






QUE CAMBIO NO? 3 AÑOS EN UN ABRIR Y CERRAR DE OJOS.

Espero que os guste el fanfic y como está yendo.

Vestido de Luana:

Vestido de Fatima:

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Vestido de Fatima:

HASTA EL PRÓXIMO CAPÍTULO

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HASTA EL PRÓXIMO CAPÍTULO. BESOS.

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