Braind and Spades

Capitulo XII

“ Si ya sabes cómo termina un libro
           ¿Para que volver a leerlo?”

Me lleve el libro y salí de la biblioteca, iba caminando directo a mi casa pero lamentablemente sufro de la ley de Milo Morphy

— Hola caramelito— Giulia se acercó a mi oído y susurro en tono coqueto — ¿Que llevas ahí?—

Tiene forma de libro pero creo que es un tractor

Sin embargo no pude evitar ponerme algo nerviosa, al parecer no había superado del todo a Giulia

— E-Es solo un libro — respondí algo nerviosa

— Oh, que interesante — Giulia puso una sonrisa coqueta — Siempre has sido una cerebrito — Giulia puso una media sonrisa y alzó las cejas— pero en el buen sentido —

Giulia trato de tomarme de la cintura pero yo le aparte las manos rápidamente, Giulia se tomó el mentón y me miró fijamente por un rato

—¿Quieres ir por un bubble tea?— pregunto ladeando un poco la cabeza de lado

— Si estaría bien — dije mientras asentía

Giulia y yo nos dirigimos al café más cercano, recordé los viejos tiempos cosa que me puso un poco nostálgica pero la vida debía continuar, aún seguía enojada con Giulia por lo del otro día pero ni modo, entramos al café y nos sentamos en una de las mesas

— Eli... disculpa por como te trate el otro día — se disculpo mientras sus ojos se iluminaban

Pinche ojos de luna llena, hacían todo más difícil

— No importa — respondí agachando la cabeza y de manera algo cortante, Giulia se quedó en silencio luego tomo el dije y lo empezó a observar

— lindo dije caramelito— Giulia cambio de tono de voz bruscamente y arqueo una ceja — ¿Te lo regalo una persona?— pregunto con un tono de voz celoso, se lo arrebate de las manos y lo oculte debajo de mi camisa

— Nada interesante, solo estaba caminando por ahí y lo encontré —

Muy creíble ¿Cierto?

— Con que te lo encontraste? — Giulia puso una mirada sería — Interesante, si hay algo que sabes muy bien caramelito es que no me gusta que me mientan ¿Verdad?—

— Lo se , pero ya no somos nada, así que no te debo estar dando explicaciones — espete

La cagué

Giulia se relamío los labios y volteo la mirada un momento

—¿Con que esas tenemos?— Giulia comenzó a acariciar mi pierna por debajo de la mesa

— Giulia, detente — pedí a voz baja y un poco sonrojada

— Está bien caramelito, pero — me tomo de la muñeca derecha — de aquí no te vas hasta que tomemos algo — asentí tímidamente, Giulia ordenó algo, se estaban tardando mucho en llegar, Kioko entro cargando unas cajas de metal y las puso en la cocina

— Gracias Kioko —

— De nada señora C —

Kioko ya se iba hasta que volteo a verme, formule con mis labios un ayuda, Kioko se pasó la mano por el rostro y se acerco a la mesa

—  Hola Giulia, necesito hablar con Eli ¿Puedo?— pregunto Kioko con su ya característico tono de voz frío

— En realidad ella está algo ocu-

— Libre, estoy totalmente libre — Giulia me halo para que me volviera a sentar

— Ella está conmigo — espeto Giulia