Capitulo XXXI

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                       “El amor está en
                               El aire”

                              Drake

— Hola Drake — saludo Sidney mientras entraba a mi laboratorio

— Hola Sidney, ¿Se volvió a dañar el blaze?—

— Si en plena pelea — respondió Sidney mientras ponía el arma en mi escritorio

— ¿Y estás bien, no te hicieron daño?— pregunté con preocupación

— No tranquilo, el comandante detuvo la pelea de inmediato —

— Me alegra que estés ilesa, sientate por allí en unos minutos está listo tu arma — le indique señalando una silla a mi lado

Sidney y yo nos habíamos vuelto un poco más cercanos desde hace algunas semanas

Semanas atrás...

— No puede ser que tenga que pedirle ayuda a ese — se escuchó un murmullo a lo lejos que al parecer era de Sidney — Edward, se me volvió a dañar — Sidney me miró algo sorprendida — Y ese milagro de ver a semejante dios del Olimpo por aquí y no a un típico nerd? — pregunto Sidney a forma de broma, me rei un poco

— Pues semejante dios del Olimpo es el nuevo líder del departamento de tecnología, me llamo Drake nos conocimos el otro día —

— Cierto Drake, el amigo de Eli, pero por tu físico creí que ibas a ser soldado —

— Pues soy científico, no necesariamente debo ser un muchacho debilucho con lentes para ser inteligente —

— Tienes razón, me caes mejor que el antiguo, se creía la última Coca-Cola del desierto, era algo como: no me sorprende que con tu IQ tan bajo solo te alcanza para usar la fuerza bruta, tenía unas ganas de ahorcarlo—

— Espero no tener esos inconvenientes contigo — aclare algo asustado

— No, me caes bien, bueno a lo que venía — Sidney puso en mi mesa una pistola de energía — estaba practicando mis tiros y derrepente dejo de funcionar — tome el arma la revise y la repare en unos pocos minutos

— Ten, como nuevo — Sidney tomo el arma y la probó, tuve que agacharme por qué por poco me disparaba en la cabeza

— oops! lo siento Drake — se disculpo Sidney un poco arrepentida

— No te preocupes, se que fue un accidente —

— Gracias Drake, espero vernos pronto —

Y asi fue, Sidney venía cada dos o tres semanas con una nueva arma para reparar, o a veces me ayudaba a probar las armas que creaba

Actualidad ...

— Aquí tienes Sidney —

— gracias Drake, ¿Tienes libre en la tarde?—

— Pues, déjame pensarlo, hoy ... Si tengo libre ¿Porque?—

— Me preguntaba si podíamos ir por un helado — comento Sidney

— Claro ¿A las seis?— le propuse a ver qué tal le parecía

— ¿Seis? Perfecto a la seis será —

Sidney salió de mi laboratorio, no era la primera vez que salía con Sidney, muy pocas veces pero salíamos

Seguí con el proyecto que me asignó la doctora Drew, era crear un sistema de enfriamiento para el motor del tren, y el sistema no debería ser contaminante, me quite la bata y los lentes de seguridad, ví la hora

— Vaya ya son las cinco — guarde las cosas y salí del laboratorio

Mientras caminaba por los pasillos del laboratorio, mi mente seguía trabajando en el proyecto. Sabía que era una tarea desafiante, pero estaba decidido a encontrar una solución innovadora y sostenible.

Al salir, el sol comenzaba a ponerse y el aire fresco de la tarde me envolvía. Recordé las palabras de la doctora Drew sobre la importancia de encontrar una alternativa al sistema de enfriamiento actual, que utilizaba productos químicos dañinos para el medio ambiente. Era crucial para el tren y para el futuro de la industria del transporte encontrar una solución más ecológica.

Mis pensamientos se dispersaron cuando llegué a la heladería y vi a Sidney esperando en una de las mesas al aire libre. Me acerqué y me senté frente a ella, notando que ya tenía un delicioso helado de fresa en la mano.

—¡Hola Sidney! Tengo algunas ideas interesantes para el sistema de enfriamiento del tren. Estoy pensando en utilizar energía renovable, como paneles solares o turbinas eólicas, para hacerlo más sostenible y respetuoso con el medio ambiente— le platique mientras me sentaba

Sidney me miró con curiosidad, tomando un sorbo de su helado.

— Eso suena prometedor, Drake. Como soldado, siempre estamos buscando formas de mejorar nuestras operaciones y reducir nuestro impacto ambiental. Si podemos implementar esta tecnología en otros vehículos militares, sería un gran avance, pero si te soy honesta, no me expliques más que no te entiendo ni pío — admitió Sidney, no puede evitar reírme

— Entendido señorita —

Ambos estábamos riendo y disfrutando de nuestros helados. Me sentí emocionado al verla, y sentí una chispa especial en el aire.
Sidney, con su cabello brillante y su sonrisa radiante. Su energía era contagiosa y siempre me hacía sentir vivo. Nos complementábamos de una manera única, y cada vez que estábamos juntos, sentía una conexión especial.
Mientras conversábamos y compartíamos nuestras ideas, noté cómo nuestras mentes se sincronizaban perfectamente. Sidney tenía una creatividad y una pasión por su trabajo que me inspiraban

A medida que hablábamos sobre el proyecto del sistema de enfriamiento del motor del tren, la emoción crecía. Nuestras miradas se encontraban y nuestras risas llenaban el espacio entre nosotros. Era evidente que no solo compartíamos intereses profesionales, sino también una atracción mutua.

O bueno, eso era lo que creía el pobre de mi corazón

— ¿Y a qué no sabes que?a una chica hoy en el entrenamiento se le cortó el brazo en seco y luego -

— Sidney — la interrumpí — estoy comiendo un helado con caramelo rojo, por favor —

— Lo siento Drake... Lo que pasa es que... Vino un hacha y le cortó el brazo en seco a la chica —

—! Sidney¡—

— Y eso que no viste cuando se la llevaron al hospital y el brazo se lo llevaron en una caba con hielo — Sidney observo mi cara de asco y luego se empezó a reír — deberías ver tu cara — dijo entre risas

A pesar de que estuviera molesto por eso, sabía que Sidney era así y misteriosamente me gustaba eso de ella.

Con una sonrisa traviesa, decidí que sería el cupido silencioso que los uniría aún más. Sabía que, juntos, podríamos encontrar una solución revolucionaria para el sistema de enfriamiento del motor del tren, y tal vez, en el proceso, descubriríamos una conexión aún más profunda entre nosotros dos.

Braind and Spades Donde viven las historias. Descúbrelo ahora