"No puedo sacarla de mi cabeza "
Giulia
Después de eliminar a esa chica mi mente no estaba quieta, en cualquier situación normal simplemente me negaría, pero cuando la doctora Drew nombró a Eli simplemente no pude negarme, a pesar de todo, Eli aún seguía en mi mente, y haría todo por ella ciegamente .Sabía que había sido yo quien le había hecho daño y que ella no merecía lo que le había hecho pasar. Me sentía arrepentida y triste por haberla lastimado de esa manera.
Estaba muy estresada, necesitaba liberar la tensión así que decidí llamar a mi ligue favorita, Ana, para que me ayudara a despejar mi mente. Después de un par de tonos, Ana contestó el teléfono.
-Hola, Giulia, ¿cómo estás? - dijo Ana con una voz suave y sensual
-Hola, Ana, necesito que vengas a mi habitación. Tengo ganas de jugar un poco- le contesté con una voz juguetona
-Claro, estaré allí en unos minutos - respondió Ana con una sonrisa en su voz
Cuando Ana llegó a mi habitación, la recibí con un beso apasionado y la llevé a mi cama. Le expliqué lo que estaba buscando y ella se dejó llevar por mi iniciativa.
Poco a poco, fui tomando el control de la situación, explorando el cuerpo de Ana con mis manos y mi boca. Ella gemía de placer y yo me sentía poderosa y excitada.-Oh, Giulia, eso se siente tan bien - susurró Ana mientras yo la besaba el cuello
-Me alegro de que estés disfrutando, Ana -respondí con una sonrisa.
Juntas experimentamos nuevas sensaciones y descubrimos nuevas formas de placer. Al final de la noche, ambas estábamos agotadas pero satisfechas.
-Gracias, Ana, por ser mi ligue favorita -le dije con una sonrisa.
- Siempre estaré aquí para ti, Giulia -respondió Ana con una sonrisa.
Ya era algo tarde, así que le ofrecí a Ana quedarse a dormir en mi departamento, nos dimos una ducha y luego nos fuimos a la cama, a la mañana siguiente Ana recogió sus cosas y se fue, cumplí con mi rutina diaria, me puse mis botas y salí del departamento, hoy era sábado así que solo me tocaba patrullaje de rutina y luego tendría el resto del día libre
Mientras caminaba ví a Kioko y a Eli sentadas a lo lejos en una mesa de la cafetería riendo y charlando animadamente. De repente, senti una punzada de celos en mi pecho. ¿Por qué Eli estaba pasando tiempo con Kioko y no conmigo?. Así que decidí acercarme a ellas
- Hola caramelito - saludé con voz sensual - ¿Puedo unirme?- Eli volteo los ojos y me miró con desagrado
-No, gracias. Estamos ocupadas- respondió con voz fría
- Auch mi corazoncito, ¿Se te olvidó que debes tratarme como la realeza?-
- ¿¡Realeza!? - Eli cuestiono enojada , luego respiro hondo y siguió- Mira Giulia, solo vete- espeto
-No te preocupes, Eli, puedo esperar aquí afuera hasta que terminen- respondí con una sonrisa coqueta en el rostro.
Kioko me miró con indiferencia, mientras que Eli parecía molesta por mi presencia.
-No es necesario, Giulia. Estamos bien sin ti- respondió con una voz cortante.
Pero yo no podía dejar de pensar en Eli y en lo mucho que quería estar con ella. Decidí esperar afuera de la cafetería, observando a las dos chicas a través de la ventana. Kioko parecía fría y distante como siempre, y Eli parecía estar disfrutando de su compañía.
Después de varios minutos, Eli finalmente salió de la cafetería, la tome de la muñeca y la hale hacia a mi, quedando así cara a cara. Intenté verla a los ojos pero mi vista se desvío hacia sus labios, los veía con deseo, Eli se sonrojo y volteo la cabeza
- Ni se te ocurra - dijo algo avergonzada
Lamentablemente, no era muy buena para captar órdenes, la tome de la cintura y voltee su cabeza hacia mi con delicadeza, se que Eli se hacía la dura pero, muy en el fondo de su corazón ella sentía lo mismo que yo sentía por ella
Ya estaba apunto de besarla cuando ella me detuvo
- Giulia, por favor detente, solo me estás haciendo daño - pidió con lágrimas en sus ojos
- Lo siento Eli, pero, no hay ni un solo día en el que no piense en ti, todos mis días sin ti han sido una completa mierda - le susurré al oído- déjame besarte, por lo menos un segundo -
- Si todo lo que dices es verdad ¿Porque hiciste lo que hiciste?- pregunto Eli con la voz un poco quebrantada
- Eli, fue porque-
- Suelta a Eli soldado- ordenó Kioko, ella era mi superior así que no me quedo de otra , solté a Eli, ella se apartó de inmediato y se fue con Kioko
Eli
- ¿Estás bien?¿No te hizo nada?- pregunto Kioko
- No me hizo nada físicamente, pero me siento algo confundida - respondí con la voz algo apagada, mire a Kioko con cariño y me acerque para abrazarla, Kioko se sorprendió por el abrazo pero después de un rato lo correspondió
- Tranquila, estoy aquí para ti - comento Kioko tratando de suavizar su voz - ¿Quieres hablar del tema?- pregunto mientras levantaba un poco la mirada
- Es que, mi corazón está confundida, Giulia me hizo tanto daño -
- Es normal sentirse confundida. Pero debes ser honesta contigo misma y con Giulia. Si no estás segura de tus sentimientos, no es justo para ella ni para ti misma seguir adelante con algo que no es real- no pude evitar mirar a Kioko a los ojos, me estaba empezando a atraer ella, la dejé de mirar, me separé del abrazo y le sonríe tímidamente
- Gracias por escucharme Kioko,-
- No hay de que, además, se perfectamente lo que es haber amado a una persona pero no la quieres dejar ir- respondió Kioko con nostalgia
¿¡Esa chica había amado a alguien!?
- Lo siento Kioko yo- Kioko puso su dedo índice en mis labios indicando silencio
- No te disculpes, no fue tu culpa - hubo un silencio largo - Adiós Eli nos vemos más tarde -
- Adiós Kioko - me despedí de Kioko y cagué un rato por la ciudad
Ahora todo era más complicado, tenía sentimientos por Giulia pero también estaba desarrollando sentimientos hacia Kioko
Odio mi vida

ESTÁS LEYENDO
Braind and Spades
DiversosEste libro nos lleva a una ciudad futurista y tecnológica, dónde la vida de las personas está completamente automatizada y controlada por las máquinas. Sin embargo no todo es color de rosa y eso lo descubrirá nuestra protagonista ⚠️𝙰𝚍𝚟𝚎𝚛𝚝𝚎𝚗�...