Braind and Spades

Capitulo IV

                “Memoria de dígitos”

—Bueno pero ya basta de ser tan sentimentales— comenté mientras me levantaba del sillón— iré con Verónica para prepararme para la siguiente prueba —

— ¿Saben cuál es?— pregunto Jenna con curiosidad

— No, pero es mejor prevenir que lamentar — respondí mientras salía del departamento

— ¡Ok, ten cuidado!— grito Jenna para que la pudiese oír

—¡Está bien!— le contesté de vuelta

Me dirigí a la plaza ya que Verónica y yo acordamos encontrarnos allí para ir a su “casa”

Sinceramente eso parecía más un búnker lleno de aparatos eléctricos más que una casa

— Eli, ¿Lista?—

— Si lo estoy —

Empezamos a caminar por la ciudad, ya que las “casitas” quedaban muy cerca de la cúpula de la ciudad, íbamos platicando hasta que llegamos a su casa

— llegamos — comento Verónica mientras habría la puerta , después de eso entramos y la habitación estaba un poco desordenada

— Disculpa el desorden, mi compañera no es muy ordenada que digamos —

— No importa —

Verónica me guío hacia la sala y allí saco un pequeño círculo

—¿Que es eso?—

— Ya lo verás —

Verónica presiono un botón y del círculo salió un holograma, el cual para mi gran sorpresa era táctil, Verónica comenzó a googlear para ver si podría encontrar alguna pista, de pronto la puerta se abrió de golpe y entro un chico de la misma edad que yo

— Hola chicas ¿Cómo están las dos bellezas más inteligentes de CyberMetropolis?—

— Hola Derek — saludo Verónica sonriente

— ¿Quien es el?— pregunte

— Soy Derek preciosa, el mejor futuro programador de CyberMetropolis. He oído que estás preparándose para la prueba de mañana y pensé que podrían necesitar mi ayuda, pero cuidado no te enamores muñequita— respondió Derek mientras se sentaba en la silla sin permiso de nadie

— Gracias, Derek pero preferimos prepararnos solas, gracias — dije con una sonrisa forzada

— Como quieran chicas, pero si necesitan al mejor ya saben a quien buscar — agrego Derek mientras se levantaba y se dirigía hacia la puerta

Verónica y yo nos miramos un poco confundidas pero no pudimos evitar reírnos

— ¿Y ese que ?—

— Lo conozco hace un par de años, solíamos ser amigos pero luego desapareció supongo que lo trajeron aquí, es algo arrogante pero es bueno en todo lo que hace—

— No lo sé, me hace sentir incomoda, no me agrada su actitud — comenté mientras fruncía el ceño

— Lo entiendo, pero no te preocupes, no tienes que tratar con el si no quieres —

Asentí ante lo que dijo Verónica pero sin embargo aún sentía una sensación rara en mi estómago, me preguntaba si Derek sería un obstáculo en la prueba del día siguiente

— espero que no cause problemas en la prueba — mencioné pensando en voz alta

— No te preocupes, somos lo suficientemente buenas para afrontar todo lo que se nos venga—