Braind and Spades

Capitulo XXIII: Ciudad de ensueño o pesadilla

—Haber si entendí, como eres tremenda tonta aún sientes algo por Giulia,¿pero al mismo tiempo estás desarrollando sentimientos por Kioko?— cuestiono Jenna, asentí algo avergonzada

— ¿Y que planeas hacer?— pregunto Jenna esa curiosidad

— No se — lloriquee

— Deberías esperar para ver si eso que sientes por Kioko es amor o simplemente cariño—

—tienes razón Jenna, buenas noches descansa —

                                 (...)

Pasaron algunas semanas y ya por fin culmine las clases de programación

— Perfecto Eli, estoy muy orgullosa de ti, mañana irás a tu primera entrevista de trabajo ¿Estás nerviosa?— pregunto la doctora Drew con curiosidad en su voz

— No, en realidad confío en mis conocimientos —

¿Conoces el anime de Oshi no Ko?

Si

¿Y a la prota?

Si ¿Por?

Pues mientes más que ella, te felicito

Y otra vez mi voz interna no es de mucha ayuda

— Wow, valoro mucho esa confianza que te tienes a ti misma, eso es bueno — comento la doctora Drew orgullosa

Si me tengo demasiada confianza

— Te recomende a esta empresa — la doctora Drew me pasó un papel con la dirección, lo tome y lo observé — No me decepciones —

— ¿No está arreglado cierto?— pregunté desconfiada

— Para nada — respondió la doctora Drew

Señora, miento cada día de mi vida, se que me está mintiendo, pero si quiero sobrevivir aquí necesito algo de dinero así que no me queda de otra

Salí del edificio central, aún guardaba conmigo la dirección que encontré en el diario sin saber exactamente de que era, mientras iba sumergida en mus pensamientos sentí alguien abrazarme

— ¡Eli! Tiempo sin verte— saludo Verónica emocionada

— ¡Vero! — la saludé mientras le correspondía el abrazo — ¿Y eso que no vienes con Drake?— pregunté extrañada ya que casi siempre estaban los dos juntos

— Está ocupado con el trabajo — respondió Verónica frunciendo el ceño — La última vez que nos vimos fue la vez del club —

— A si cierto — conteste algo avergonzada

— ¿Te dió fuerte la resaca?— pregunto Verónica suponiendo que era la primera vez que bebía alcohol

— Pues...—

Tres semanas atrás ...

— Me duele la cabeza — me queje mientras me levantaba de la cama

— No te va a doler, bebiste lo suficiente como para dormir un caballo — me reprendió Jenna — Toma, anoche pase por la tienda para comprarte estos fideos instantáneos, sabría que tendrías resaca — tome los fideos algo desganada y comencé a comer

— ¡Rayos, tengo que ir a las clases de programación!—

— Tranquila mujer, hoy es sábado — dijo Jenna tratando de calmarme — por cierto, Kioko me dijo que quería salir a pasear hoy contigo, así que después de comer te arreglas —