Capítulo 3

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—Escuché que Aiko dio su primer beso. —susurró una amiga de ____.

—¿Qué? ¿No somos muy niños para eso?

—No lo creo, muchos en el salón ya lo hicieron y dijeron que era bonito.

____ observó el rostro de su amiga y un miedo se instaló en ella. Esa sonrisa traviesa solo significaba que quería que ella se incluya en su plan.

—No creo que sea buena idea, Suki. —susurró ____ avergonzada.

—Oh, vamos. No pasará nada. Además, puedes elegir con quién darlo. —Ambas niñas miraron hacia el grupo de niños que era conformado por sus compañeros.

—¿Con quién quieres darlo?

—Con Saito, es muy lindo. Imagínalo, sería su primer beso. —Suki suspiró ilusionada. —Y en caso de que no quiera, podría hacerlo contigo, ¿Tú tienes alguien en mente?

____ dirigió su vista hacia su rubio amigo, pero la desvió rápidamente para no ser atrapada por su amiga. —Nop, ni siquiera quiero hacerlo, Suki.

Su amiga bufó rendida y se recostó en el respaldo de la silla. —Pienso preguntarle a Saito en la salida.

—Espero te vaya bien, Suki. —____ le regaló una sonrisa a su amiga dándole ánimos.

Suki no se quedaría tranquila. Tarde o temprano ____ daría su primer beso y ella prefería que sea ahora para poder compartir sus experiencias.

—Reigen. —susurró Suki cerca de él.

El rubio se volteó a mirar a la niña.

—Ven, tengo que proponerte algo. —susurró y lo guió hasta un salón vacío. —____ y yo pensamos dar nuestro primer beso. —el corazón de Reigen se detuvo. —Ella no sabe con quién hacerlo, pero creo que serías el indicado ya que pasan mucho tiempo juntos y son amigos desde hace mucho. ¿Aceptas?

—¿Qué?¿Yo? —el corazón del niño volvió a latir, pero esta vez rápidamente. —¿Estás segura?

—Por supuesto, la otra opción era que lo hiciera conmigo, pero quiero intentar hacerlo con Saito.

—Bien, ¿cuándo lo hago?

—Si puedes hacerlo hoy sería excelente, pero no se lo preguntes. Solo crea el momento y si ella no te detiene, puedes proceder. ¿Entendido?

—Creo que sí.

Finalmente llegó la salida, ____ y Reigen se encontraron y caminaron juntos hacia sus casas.

—____, ¿vamos al parque un rato? —Reigen la detuvo jalando su mano.

— Claro, ¿qué haremos?

— Cualquier cosa, solo quiero pasar tiempo contigo. Hoy no pudimos hablar mucho.

—No te preocupes por eso, Rei Rei. Solo querías pasar tiempo con tus amigos. —Reigen no lo había notado, pero desde que agarró la mano de su amiga para detenerla, no la soltó hasta sentarse en una banca del parque.

"Rei Rei"

El rubio no se atrevía a hablar sobre su cometido por lo que solo habló sobre cualquier tema.

—Wow. —lo interrumpió la niña.

—¿Qué pasó?

La niña señaló hacia un lugar y Reigen pudo saber la razón del asombro de su amiga.

Era una pareja haciendo fotos para su boda. La joven portaba un hermoso vestido blanco mientras que el novio la observaba con los ojos llenos de mucho amor.

—Se ve tan mágico. —susurró la niña, parecía hipnotizada por lo que veía.

—¿A ti te gustaría casarte?

—No lo sé, es muy bonito, pero muchos terminan divorciados. —La niña hizo una mueca de tristeza.

—No creo que pase eso si te casas con la persona indicada. —susurró Reigen.

—¿Cómo sabré que alguien es el indicado?

—No lo sé, pero tal vez cuando seamos grandes podamos notarlo.

—Mmm, puede ser. ¿Crees que en algún momento encuentre a alguien que me ame?

—Por supuesto, tal vez ya hay alguien que te ama.

____ soltó una pequeña risa. —No creo que sea el que yo quiero.

Ambos niños se observaron en silencio. Reigen quería hacerlo, realmente quería hacerlo, pero algo lo detenía. No quería que sea planeado, no quería tomar su primer beso sin que ella se lo pida, más aún si ahora sabe que ella quiere a alguien. No quería arruinarlo y decidió callar. Estaba bien, lo hacía por la felicidad de su amiga.

—¡____, no me lo vas a creer! —Suki interceptó a su amiga ni bien ella cruzó la entrada de su escuela. —¡Besé a Saito! ¡Fue, fue, increíble! O sea, fue increíble que él acepte, el beso lo sentí muy insignificante la verdad. —murmuró decepcionada. —En fin, ¿cómo te fue?

—Bien, bien, fui al parque con Reigen.

—¿Y? —Suki esperaba más información.

—Oh nada, solo hablamos. Oh y vimos a una pareja que estaba por casarse.

—Oh.

—¿Pasó algo? —preguntó ____ ante la clara decepción de su amiga.

—Nada, olvídalo. —Suki no podía creer que Reigen no se atrevió a hacerlo.

—¿Entonces, usted era un galán?

—Por supuesto, recuerdo que muchas niñas me buscaban para pedirme que sea su primer beso. Pero, ¿sabes? Jamás acepté.

—¿Qué? ¿Por qué? —Mob estaba intrigado.

—Porque ninguna me interesaba. Puedo tener esta imagen y ser un galán, pero yo también me enamoro.

—¿Estaba enamorado?

Reigen sonrió ante el recuerdo.

—Sí, Mob, lo estaba, pero eso ya es otra historia. Ahora acompáñame a desembrujar una casa.

Reigen en realidad, jamás dio su primer beso. Como lo dijo cuando era niño, él solo quería probar los labios de su amada. Lamentablemente cuando se decidió por hacerlo, ella desapareció de su vida.

"Rei Rei"

El rubio llegó a su casa cansado y se sentó en su cama mientras se quitaba el saco. Se estaba quitando la corbata cuando detuvo su mirada en la mesa de noche.

 Abrió el cajón de su mesa de noche y sacó una hoja arrugada la cual guardó con mucho cariño por años.

"Con mucho cariño, ____"

"Con mucho cariño, ____"

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Almas en el amor - ReigenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora