Tᴀɴᴊɪʀᴏ, Eʟ Pɪʟᴀʀ Dᴇʟ Aᴍᴏʀ!! ❤︎

Próxima Misión ➡️ M:2/5

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Kamado estaba haciendo pucheros, unos grandes.

Tanto a Kyojuro le costaba decir un: "Perdón"

Pues...

Estar arriba de un árbol, es como un: "SI, porque hiere mi orgullo"

Kyojuro no iba a bajar, aun no podía quitarse de la cabeza a Kamado sin ropa y con gotas de agua. Y siendo sinceros, si bajaba, lo haría para marcar a Kamado.

-¡KYOJURO-SAN! ¡SE VA A CAER! ¡BAJE DE HA-

-CRAW CRAW

Un graznido se hizo presente.

-SE NECESITA CRAW AYUDA EN LA CRAW FINCA DEL VIENTO CRAW -dicho eso, el cuervo fue volando hacia esa dirección.

-¿¡Será una luna!? -se pregunto Kamado.

En ese momento Kyojuro bajo del árbol, agarro a Kamado como un saco de papas y salió corriendo siguiendo al cuervo de Tanjiro.

-EH!? ¡RENGOKU-SAN SUELT-

Una nalgada lo hizo callarse, totalmente sonrojado y avergonzado.

-¡Señorita Kanroji! ¡Por favor, llevé a mi hermano a casa! -Kyojuro sonrió- ¡Cuidate Senjuro! -Dijo el rubio ya a distancia.

¿Qué estará pasando en la finca?

Ya iban llegando Tanjiro seguía sonrojado, y Kyojuro más sonriente qué nunca.

Pero el sonrojo de Tanjiro y la sonrisa de Kyojuro se quitaron al escuchar los ruidos de la finca, se escuchaban golpes, un sin fin de insultos y destrozos en la finca.

Y entraron...

Tanjiro y Rengoku con katana en mano listo para asesinar al demonio qué causo tal destrozó en la finca (aunque era tarde aun).

Sorpresa se llevaron cuando 2 pilares estaban magullados.

-¡OBANAI-SAN! ¿ESTA BIEN?

Tanjiro se preocupo al ver a su amigo amarrado en una columna de madera, moreteado, arañado, cortado y sangrando.

-¿¡Qué le paso!?

-¡KAMADO MALDITA SEA! ¡CONTROLA A TU PERRO!

-¡Shinazugawa! ¡Por favor no insultes a tus compañeros! -Rengoku hablo mientras que caminaba hacia Iguro- ¡Tampoco los amarres! ¡Recuerda que no debemos pelear entre nosotros!

Kyojuro corto la soga qué tenía amarrado a Iguro, y este siendo muy agradecido con él. Le pego un puñetazo, dejandolo en el piso, para después ir directo al Pilar Del Amor.

Abrazándolo posesivamente.

-... -Tanjiro abrazo de igual manera a Iguro, supuso qué necesitaba cariño- ¿Qué ha pasado Obanai-san?

-¡LO QUE PASO! ¡FUE QUE TU PERRO ENTRO A MI PUTA FINCA A ATACARME SIN MOTIVO ALGUNO! -Sanemi tenía poco temperamento, y esto ya lo artaba más de la cuenta- ¡LARGUENSE! ¡LARGUENSE MIERDA!

-Obanai-san?... ¿Porque lo hizo?...

Iguro no respondía solo olfateaba el cuello de Tanjiro.