El mundo en mi contra

Nueva familia.

Después del desastre de año nuevo estuve dos días sin salir de mi habitación. No quería ver a nadie y menos a Noah. Me fui al baño a coger mi nuevo móvil que me había tenido que comprar Noah con sus ahorros, se estaba cargando y cuando lo encendí vi que tenía cinco llamadas perdidas de mi padre. Me apresure a marcar su número.

- ¿Papá?

-Hija, era para avisarte que en menos de una hora estoy allí para recoger a tu hermano y a ti. Mierda se me había olvidado que hoy iba a conocer a la familia de mi padre.

-Si si papá ya me estoy vistiendo, gracias por avisarme.

-De nada cariño, en un rato nos vemos. -Y antes de que pudiera decir nada me colgó. Genial tengo menos de una hora para arreglarme. Salí corriendo hasta la habitación de mi hermano para avisarle de que papá estaría en menos de una hora para recogernos. Volví a mi habitación y me puse lo primero que pillé del armario. Una camisa blanca con una blazer negra y unos pantalones negros de campana. Cuando me termine de preparar baje a la cocina a por un poco de zumo de naranja y para mi mala suerte estaba Noah con Sofía que le estaba preparando el desayuno.

- ¡Buenos días Alice! - Me dijo Sofía con una sonrisa en la cara.

-Buenos días preciosa. -Me incliné hacia ella para darle un beso en la frente. Después cogí un vaso y el zumo de la nevera. Vi que Noah no me quitaba los ojos de encima.

- ¿Quieres algo o intentas que desaparezca? - Le dije volviéndome hacia él. El reaccionó tarde, se puso rojo y siguió haciéndoles tortitas a Sofía. Me senté enfrente de Sofía y me tomé el zumo con tranquilidad mientras miraba los mensajes de Jackson. Me enfadé mucho con él porque que a pesar de que no éramos nada se echó novia y me sentí bastante utilizada al respecto. Sus intenciones eran liarse conmigo, pero tener novia, así que bloquee su número.

-Vaya no sabía que te había afectado tanto. -Me dijo Noah mientras le hecha las tortitas que había cocinada para Sofía en el plato.

-A ti qué coño te importa. -Le dije fulminándolo con la mirada. Me levanté y me fui directa al salón para ir a la terraza, no necesitaba ningún tío más en mi vida son todos unos capullos. Cuándo me terminé el zumo fui a la cocina a dejar el vaso y estaban Sara y Henry con Sofía y Noah.

- ¿A dónde vas? -Dijo Sara mirándome de arriba a abajo.

-Mi querido padre nos va a recoger a mí y a mi hermano para conocer a mi nueva madre. -Le dije con una sonrisa. Ella cambió su expresión y se acercó muy rápido tan, rápido que no me dio tiempo a esquivar el guantazo que me dio en la mejilla.

- ¡Sara! no tolero esto y menos delante de la niña. -Le dijo Henry levantándose y poniéndose entre nosotras. A mi dándome la espalda.

-Yo... lo siento yo no quería...-Dijo poniéndose nerviosa.

- ¡Cállate! y vete arriba. -Le dijo Henry señalándole la puerta. Ella se levantó y desapareció por la puerta.

-Bueno....yo mejor me debería de ir, vamos Sofía. -Dijo Noah mirándome con cara de preocupación y llevándose a su hermana de la mano.

-Alice, quiero que me digas todo cuando alguien te haga algo. Conmigo puedes confiar no puedo tolerar que alguien te ponga la mano encima. -Henry se acercó y me rodeo con sus enormes brazos en un abrazo muy tierno y largo. Yo también me arropé a él. Hacía tiempo que no me abrazaba nadie y me había venido súper bien.

-Gracias, me debería de ir. -Lo rodeé y salí a la entrada donde estaban mis llaves y antes de salir me volví a ver quién estaba detrás y era Noah.

-Pásatelo bien hermanita. -Me dijo Noah sentado en la escalera.

-Sabes que escuchar conversaciones ajenas es de mala educación ¿verdad? -Me acerqué hacia él y me crucé de brazos.